Lledó - Teruel

Dimiten los patronos del Palau y un comité gestionará la institución
Agencias | 13/11/2009 - 8:37
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Los patronos del Palau de la Música presentarán su dimisión en bloque y será la presidenta en funciones, Mariona Carulla, la que se encargará de dirigir la refundación de la institución a través de un comité gestor hasta que se creen los nuevos organismos.

Tras esta dimisión en bloque, se ha acordado nombrar un comité con un reducido número de patronos y que Carulla sea quien opte los nuevos miembros del patronato tras destaparse el desvío de fondos perpetrado durante años por el ex presidente del Palau Fèlix Millet y su mano derecha, Jordi Montull, según publica La Vanguardia.

Si la propuesta es aprobada, lo que requiere la asistencia hoy de la mayoría de los 104 patronos, la gestora estará formara, además de por Carulla, por el director general, Joan Linares, y los patronos Carlos Cuatrecasas, Leopoldo Rodés, Ignacio García-Nieto y Maria Àngels Vallvé. También se podría incorporar alguna persona sin vinculación actual con la entidad.
La gestora tomará el control

La gestora se constituirá después de la dimisión del conjunto de los patronos, menos la presidenta, con la que se pretende eliminar los patronos vinculados a la época Millet e incorporar a las personas y representantes de los principales mecenas actuales.

En el Orfeó, propietario del Palau, ya existe una comisión institucional para la refundación integrada por Antoni Dalmau, Jordi Font, Josep Caminal, Pau Duran y Josep Maria Busquets. El Orfeó se reúne hoy previamente a la fundación.

La renuncia de los patronos planeaba desde hace días aunque fue el pasado miércoles cuando esta posibilidad cobró más peso tras la propuesta del patrono Antoni Serra Ramoneda para que todos los miembros del Patronato entonaran el 'mea culpa' por su falta de control en las cuentas de la institución y, como este último, anunciaran su renuncia.

Esta propuesta fue acogida de manera dispar en el seno del Patronato, donde se produjo una división entre sus defensores y sus detractores. Entre estos últimos, se encuentra Antoni Dalmau, que se mostró contrario a que haya dimisiones entre sus miembros. "Es evidente que hay gente que nos sentimos responsables de no haber sabido detectar a tiempo la estafa, y que llegará el momento oportuno de renovar los órganos de gobierno de las instituciones del Palau", dijo en declaraciones a Europa Press.
Las auditorías, a examen

Otros como Arcadi Calzada consideran que "no sería bueno un vacío" en la institución hasta que finalice el proceso iniciado por los nuevos gestores. No obstante, una vez acabado, sería "lógico y natural" que "todo el mundo ponga la dimisión a disposición", opinó, por lo que estaría dispuesto a hacerlo.

Asimismo, esta decisión se conoce coincidiendo con la celebración de una reunión del Patronato que tendrá lugar hoy y en la que se conocerán dos de las tres auditorías que se han realizado sobre las cuentas de la entidad tras el escándalo del desvío de fondos, un caso que está en fase de instrucción. El propio ex presidente del Palau Fèlix Millet admitió en una carta pública el desvío de 3,3 millones de euros.

En ese encuentro se conocerá la auditoría encargada por el propio Palau a Deloitte y la de la Conselleria de Economía realizada sobre el Consorci, que agrupa a las administraciones. La última que será entregada al juez será la realizada por los peritos judiciales de la Agencia Tributaria.
Las cuentas del Palau

La auditoría extraordinaria de la Generalitat versa sobre las cuentas del Palau de la Música y del Orfeó Català entre 2002 y 2007, así como un avance de 2008. El Govern decidió revisar a fondo las cuentas a pesar de que las auditorías realizadas por la Intervención General en esos años no arrojaron "responsabilidades penales, contables o administrativas", expuso en un comunicado el 27 de octubre.

La Intervención empezó a auditar las cuentas del Palau en 2002. Desde entonces y hasta 2008, las administraciones públicas que integran el Consorci (Generalitat, Gobierno y Ayuntamiento de Barcelona) han aportado al Orfeó 2,58 millones de euros, que han sido objeto de análisis. Esta auditoría podría ser clave para dilucidar si hubo o no malversación de caudales públicos, lo que podría acarrear hasta ocho años más de prisión para los imputado.

Según publica hoy 'El Periódico', esta auditoría ha constatado que cerca de 500.000 euros procedentes de una subvención de dos millones otorgada por el Ministerio de Cultura, fondos destinados a la remodelación de la fachada del edificio modernista, no están justificados, y que Millet pagó viajes de carácter particular a Madrid a cargo de los fondos del consorcio.

La otra auditoría, la de Deloitte, apunta a un fraude de los directivos del Palau que rondaría los 30 millones de euros, mientras que la Fiscalía, en su recurso al auto de libertad provisional para Millet y Montull, apuntó a que el desvío era de 20 millones de euros en metálico.

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