Cambrils - Tarragona

Dice: no todo lo que reluce es oro, y vamos en la búsqueda del oro, como si en si mismo este pudiere solventar algo, cuando en realidad no resuelve nada en la dinámica de la vida de alguien, porque es absolutamente inerte para cualquier función de la vida, excepto la de ciertas bacterias que en su deglución, ayudan a la purificación de dicho elemento químico, ayudando en la extracción en algunos sistemas mineros, y que sin su colaboración no podrían ser rentables.

Se busca porque es moneda de cambio para todo o casi todo, hasta compra y vende amistades, alianzas y también traiciones, y como no se degrada excepto por el agua regia, en la cual se diluye y también en cianuro que después mediante procesos químicos se recupera átomo por átomo, mediante la decantación, precipitación o sistemas electrolíticos.

Pero me he desviado, al oro al cual me refiero es al del valor de la palabra, no al elemento químico, ese oro que pocos poseen o practican, si, la palabra empeñada, ese que mas compromete, mas allá del tiempo y las direcciones que hayan tomado las necesidades del momento o posteriores, ese oro que solo tiene el valor del compromiso, que no cotiza en bolsa, pero que al poseedor de él lo hace valioso y confiable.

Dentro de unas horas volveremos a ver la diatriba entre dos personajes, cada uno de ellos busca lo mismo, cada uno de ellos se tomará la “molestia” de prometer, de llevar las promesas hasta límites inconscientes e irresponsables, hasta donde cree que el otro no se atreverá a llegar, pero el otro tiene los mismos valores morales, y prometerá eso y tres rayas mas adelante, y cuadrarán el círculo, se saldrán del tarro, y tratar de tomar ventaja, porque creen que cada uno es mas listo que el otro, y tiene mas y mejores lugartenientes que el otro, mejores asesores y también mejores mentirosos, o para no herir a nadie diríamos: manipuladores de la verdad?

Total si no se puede cumplir o no se quiere, se echa mano de Gasset, y “”las circunstancias””, estas impedirán ser cumplidas, pero… ¿Qué importa si el voto ya está en la buchaca? Si, la palabra en política no tiene el valor de ORO, apenas tiene valor de plomo, y también algunas de sus propiedades, el plomo aísla de radiaciones, rayos X, gamma y otras radiaciones letales para la vida, en política, la lengua y las promesas aíslan a la conciencia del emisor o emisores, además son frágiles de memoria y creen que los demás también lo son, por tanto no le paran pelota a lo que hablan, solo procuran que sea mas o menos vistoso, para que dé los frutos deseados.

Al momento siguiente empezarán las encuestas, para saber que personaje ha estado mas fino y elocuente, quien ha dicho la mas y mas grande sarta de…Verdades? Y después a recordar lo que se dijo, por ver si se es capaz de llevarlo a termino, pero…, y los costos? Y los beneficios? No para ellos personalmente, que eso ya lo sabemos de antemano, sino para los que supuestamente van dirigidos, pero que al final y como siempre se queda en agua de borrajas, y siempre quedan las migajas de las mesas de los Srs.

Una semana para saber que conductor se monta arriba del carro, y sabemos de antemano que será mas de lo mismo, pero enriqueciéndose otros, si, con el oro amarillo en forma de billetes bancarios, bonos al portador o acciones de bolsa, que no son asentados en cuentas corrientes o de ahorro y en paraísos fiscales, en manos de testaferros, primos, parientes y hermanos, amigos y también para el perro que se le otorgará un nombre y se autonombra albacea de sus bienes.

Se sumarán a la larga lista de nuevos ricos, que lo que realmente son o serán nuevos predadores de las arcas nacionales, porque es tras eso de lo que se va, esa es la presa a perseguir, acosar y derribar, esa es la política a nivel internacional.

El oro de la palabra es tan escaso, que se le podría considerar extinto.