Cambrils - Tarragona

Entre los dias pasados por los impuestos y el administrador del foro que ¡cierra la ventana!, luego ¡abro la ventana! pues no he podido intervenir.

Como mejores plumas que yo han escrito sobre "el garfio retorcido de la ley", me permito copiarlos por aqui para, si no es mucho pedir, mediten un poco "los tuertos rojillos" para que se ilustren un poquito.

SR EMBAJADOR. Ussia.

Han existido en nuestra reciente historia embajadores políticos extraordinarios. Franco tuvo a don Antonio Garrigues Díaz-Cañabate, que no comulgaba con el régimen. Fue embajador de España en Washington y ante la Santa Sede, y derrochó, además de inteligencia y habilidad, buena imagen exterior de un sistema mirado con lupa más allá de nuestras fronteras. Don Antonio conquistó la simpatía de Kennedy, y con bastantes probabilidades, algo más que la simpatía de Jaqueline, que ya viuda, y como don Antonio no se prestó al asunto, se casó por despecho con Aristóteles Onassis, un chico de segundo nivel. Y en Roma, don Antonio Garrigues, el embajador por definición que no era diplomático, asombró con su tacto y conocimiento de los rincones de la Iglesia. Fue mucho más cardenal que la mayoría de los cardenales, y limó todas las asperezas que impedían las relaciones personales de Franco con Pablo VI. Claro, que la figura de don Antonio es irrepetible, su señorío culminante y su inteligencia de difícil superación. No era franquista y se erigió en su mejor embajador: «Lo importante es representar a España».
El embajador político no gusta en demasía entre los miembros de la Carrera, así en mayúscula, como a los diplomáticos les fascina escribirlo. Para ser diplomático hay que superar unas durísimas oposiciones, y recelan de los embajadores políticos. A veces, los embajadores políticos son –como en el caso de Francisco Vázquez, actual embajador de España en el Vaticano–, exiliados de lujo de su propio partido, personajes a quienes los mediocres quieren tener lejos y ocupados. Claro, que también ha habido embajadores políticos espeluznantes. Y los habrá.

El próximo será Baltasar Garzón. El Gobierno de Zapatero premiará su buena disposición política con una Embajada al juez imputado por tres delitos de prevaricación. El problema será buscarle un destino que encaje con su peculiar personalidad. Los más adecuados se ubican en los azules caribes. Embajador de España en La Habana o en Caracas. Sólo un inconveniente. Igual en La Habana que en Caracas tendría que renunciar a su famoso chaquetón, por aquello de los húmedos calores antillanos. Cuba transcurre por tiempos de agonía revolucionaria. El día que Fidel doble la servilleta, su hermano Raúl será incapaz de detener el camino hacia la libertad. Garzón quedaría en situación difícil. Venezuela, por desgracia, parece más preparada para alargar su tiranía, que poco a poco se va tragando todos los resortes democráticos de defensa de los detractores y adversarios de su locuaz primate.

Garzón, que es un gran amante de la naturaleza, sería feliz en aquella nación, que es un prodigio en sus selvas, ríos y sabanas. Con permiso de Chávez, podría cazar el jaguar, que abunda en las selvas del Orinoco, la Guayana y en puntos determinados de la Gran Sabana, la extensión milagrosa que se abre bajo la vigilancia quieta de los tepuís. Y a menos de dos horas de Maiquetía, está el archipiélago de los Roques, un paraíso de la pesca y de la contemplación. Porque Garzón puede ser un buen embajador de España si está ocupado en lo que no le corresponde. Que acuda de tarde en tarde a la embajada y no se meta en asuntos diplomáticos. Porque si se pone a trabajar en lugar de cazar al jaguar y pescar al merlín, tenemos guerra asegurada. No se sabe contra quién, pero asegurada. Señor embajador…

BERZOSA O BERZOTAS. Javier Ferrari.

Dícese de una persona ignorante o necia. Así define «berzotas» el diccionario de la Real Academia. Pero el rector de la Complutense, el señor Berzosa, no es un ignorante. Al menos en el sentido académico del término. Pero en sus últimas actuaciones sí ha mostrado una cierta necedad que se define en el María Moliner como acción o dicho necio, es decir, de una persona «presumida o vanidosa» en su segunda acepción, que me parece más ajustada a la realidad que la primera en la que se define al necio como «bobo, tonto o majadero». Convertir la Universidad en un recinto para el sectarismo más grosero como ocurrió la pasada semana en el acto presuntamente en favor de Garzón, pertenece más a alguien cuya vanidad no le cabe en el cuerpo y que además quiere presumir de un falso progresismo, bastante trasnochado y de una zafiedad que se compadece mal con esa cualidad de universal que debe caracterizar a cualquier universidad.

En los últimos días todo el mundo ha opinado, a favor o en contra, de los Villarejo, Zarrías, la inevitable Pilar Bardem o todos los subvencionados de nuestro cine, y digo nuestro no por afinidad con sus presuntas cualidades, sino porque lo pagamos entre todos,empezando por las televisiones privadas que tienen cautivo un 5% de sus ingresos aunque esté cayendo la mundial con la crisis. Berzosa debería haberse opuesto a esa especie de mitin que sonaba más a los años treinta que al primer tercio del siglo XXI en el que estamos a pesar del Gobierno, como diría mi admirado Carlos Rodríguez Braun. Pero hay que tapar tanta mala gestión, tanto fracaso incluido el de un Tribunal Constitucional incapaz de sentenciar sobre un Estatut, el catalán, que se esta desarrollando desde hace cuatro años, los mismos que los magistrados llevan mareando la perdiz, y que no tiene vuelta atrás sino queremos armar la de Dios es Cristo, algo que por otra parte nos encanta en este país que olvida a las víctimas del terrorismo mientras reabre las fosas del franquismo olvidándose de otras como las de Paracuellos que, por cierto, Garzón se negó a investigar en el año 98.
El señor Berzosa, que se ha portado como un berzotas, lo que debería hacer es explicar, ahora que todo el mundo pide explicaciones de todo, en qué se gasta las subvenciones, por ejemplo para mejorar los colegios mayores, y que salen de los bolsillos de los contribuyentes. Pero eso no es ni divertido ni progresista, y el señor rector que prohíbe actos pro vida, o anti abortistas si ustedes prefieren esta expresión, parece estar más preocupado y ocupado en ahondar en las viejas heridas que tanto le gusta a este Gobierno y su partido llevar a los titulares de los periódicos.

Bajo su mandato la Complutense no ha ganado precisamente prestigio, y hasta los progres de diseño prefieren que sus niños vayan a universidades privadas. Como cantaba Mecano, será que con las nubes y el barullo de los tiempos no tenemos bien los nervios, pero nuestra clase política y la presuntamente intelectual esta dando todo un espectáculo lamentable a una ciudadanía que soporta un paro de récord Guinness, y que está pidiendo a gritos, a gritos silenciosos, que alguien ponga un poquito de cordura y sentido común en la vida española.

GARZON ES UN SIMBOLO. Carlos G. Braun.

Sea cual fuere el desenlace de sus contratiempos, Baltasar Garzón nos ha brindado la oportunidad de asistir al espectáculo de la campaña en su favor. Un magistrado investigado por posible prevaricación no es, desde luego, algo inédito. ¿A qué viene, pues, tanto lío? Y, dando un paso más ¿a qué viene tanto respaldo por parte del grueso del PSOE, cuya corrupción investigó el propio juez? Sospecho que la explicación estriba en que Garzón es un símbolo de la maniobra organizada por la izquierda en el último medio siglo sobre la justicia universal, cuyo objetivo no es hacer justicia sino utilizar la justicia para hacer política contra la derecha y contra todo lo que huela a antisocialismo. Y ahí Garzón es fundamental.

Podrá haber desvelado las tramas criminales de los GAL, que ahora le pueden servir de excusa, pero la clave es que es un defensor de los «derechos humanos» que persiguió a Pinochet y jamás le tosió a Fidel Castro, que hostigó a ETA (faisanes aparte) pero nunca a los terroristas latinoamericanos, que quiere investigar el franquismo pero nunca a Santiago Carrillo y los asesinatos de Paracuellos. Es tal el camelo que, a pesar de todo lo que saben los socialistas de Garzón, no en vano figuró en sus listas electorales, también saben que en el fondo es un aliado para esta mentira de que la izquierda es la única que cuida de las víctimas de la violencia política, y de que el franquismo (vamos, el PP) sigue vivo y hay que combatirlo.

EL POLITICO JUEZ.

La opinión pública ha visto durante los últimos veinte años los actos de un funcionario público llamado Baltasar Garzón al amanecer, al atardecer y al anochecer. Siempre le han correspondido al mismo los casos «gordos». Su señoría estaba de guardia perpetua. Las escaleras de entrada de la Audiencia Nacional son las más conocidas de España gracias también a esas entradas o salidas del magistrado, con frecuencia mirando de reojo a la cámara que le esperaba, del juez más político de España.

Dicen que la Justicia luce una venda en los ojos pero en el caso de Garzón se ha puesto en duda por triplicado que el pañuelo de la verdad judicial tenga en su caso un par de orificios para quitar la niebla de la vista. No hay persecución al juez Garzón. Más bien todo lo contrario, porque las manifestaciones son a favor de su señoría.
Uno de los abogados del juez ha tenido que pedir a los hinchas que se calmen. Los gritos no van a servir de nada ante otros jueces tan profesionales y democráticos como Garzón.

Los magistrados del Tribunal Supremo van a hacer su trabajo guste o no a los agitadores y demás comparsa que pretenden con su histerismo poner los pelos de punta al sistema.

La mañana del jueves a las puertas del Tribunal Supremo se pudo contemplar una pancarta en la que se pedían más jueces como Garzón.

Pero resulta, y se deduce de la encuesta de LA RAZÓN, que la opinión pública española está cansada de algunos comportamientos iluminados y prefiere a los jueces sin focos, que están agobiados y desbordados por la ausencia de medios y que sobreviven asombrados ante la falta de pudor de los políticos, que no paran de interferir y de meter la mano por debajo de la falda a la justicia.

Los jueces en España van en el coche escoba de la democracia, salvo Baltasar Garzón, que se ha colocado en el puesto de mando a base de fama y foco. Ha sido más político que juez. Y es lo que están investigando en el Tribunal Supremo. Nada más

Muñoz, cuando tengas pensado copiar y pegar una defecación de esas que acostumbras, ten la precaución de al menos no poner quien la ha perpetrado, ya que si vemos que es del gracioso sin gracia Ussia, o de Ferrari, entonces nadie lo va a leer. Ten más cuidado la próxima vez.

A cambio, yo te voy a copiar un gran artículo publicado en El País el pasado domingo, escrito por Juan Diego Botto, sí, ya sabes, ese titiritero de la ceja, que además habla con conociendo de causa en el asunto de los crímenes fascistas, ya que a su padre lo desaparecieron (como cantaba el gran Carlos Cano) los milicos argentinos. Ya ves, otro resentido más entre las filas rojelias, total, si solamente asesinaron a su padre, no es como para ponerse así, como ya estáis cansados de explicarnos los demócratas orgánicos de este país. Pero ya ves, somos tan brutos que no entramos en razón, y seguimos con la estúpida cabezonada de buscar restos de hace décadas. Te recomiendo que lo leas detenidamente, que no tiene desperdicio, y es dificilmente contestable con chascarrillos de los Ussías y otros fachas de turno.

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La primera persona que va a ser juzgada por los crímenes del franquismo es precisamente la única que ha pretendido investigarlos. Esta paradoja cuestiona la naturaleza de nuestro Estado de derecho y nuestra democracia. La transición nació fruto del siguiente pacto: Estado de derecho sí, pero vamos a hacer un aparte con este genocidio y estos crímenes de lesa humanidad para que sea posible avanzar. Y así se desarrolla nuestra democracia, manteniendo en los aparatos del Estado a quienes habían administrado la dictadura.

Mi generación (nacidos en 1975) siempre pensó que era cuestión de tiempo, que cuando la democracia estuviera asentada llegaría el momento de las víctimas. Lo que ha ocurrido es precisamente lo contrario. Este auto del juez Luciano Varela es el equivalente a la peor de las leyes de punto final. Peor, porque en este país ya nadie pedía sentar en el banquillo a los responsables. Lo único que se pedía era dar amparo a víctimas y familiares.

Preguntémonos con qué autoridad moral se asienta un Estado de derecho que investiga a quien comete un asesinato pero no a quienes cometen 100.000; que investiga la desaparición de una niña pero no la de decenas de miles de personas; que persigue a quien roba un coche pero no a quien organiza un entramado para robar niños. Sobre esa estructura es improbable que alguien llegue a confiar en sus instituciones. La mejor manera de garantizar que ningún grupo ose alzarse de nuevo contra la democracia es demostrar que la justicia será con ellos implacable. Pero a quienes lucharon por la República se les ha premiado con una fosa común con vistas al olvido.

Según las encuestas, la mayoría de los españoles prefiere la democracia a la dictadura franquista, a la que la mayoría considera sangrienta. Ello presupone que cualquier gobierno en estos años de democracia estaba legitimado para enfrentar una tarea que, sin embargo, ninguno acometió.


Se trataba, simplemente, de catalogar esos delitos como lo que son y, más importante aún, ofrecer reparación a las víctimas. Si desde el Estado se cometieron los crímenes -y se hizo además desde las fuerzas del Estado y en nombre del Estado- es éste, sin duda, el que debe asumir buscar, desenterrar y averiguar cómo fueron eliminados sus ciudadanos. La visibilidad de casi 1.000 víctimas del terrorismo etarra es uno de los grandes aciertos de la democracia española; sin embargo, la lacerante invisibilidad de los al menos 113.000 desaparecidos y miles de torturados, encarcelados y exiliados es una de sus más imperdonables deudas.


En cuanto a la Historia, se recurre a menudo al argumento de la equidistancia: "Por ambos bandos se cometieron atrocidades". Sí, muy probablemente el bando republicano cometiera crímenes de guerra. Todos deberían ser investigados. Ahora bien, eso no puede nunca oscurecer el hecho históricamente nítido de que la contienda tuvo un responsable, un bando que se sublevó contra la democracia y que ello derivó en una guerra. Más aún, no se puede negar que hubo durante la guerra y también en los años posteriores a ella un plan sistemático para acabar con un grupo político o ideológico.

Ampararse en que ambos bandos cometieron atrocidades para igualar a los contendientes sería tanto como afirmar que no se puede juzgar a los nazis porque los aliados también cometieron crímenes. Sin lugar a dudas las cometieron. Es difícil pensar que los bombardeos sobre Dresde no fueran un crimen de guerra. Eso, sin embargo, no ampara ni una sola de las atrocidades cometidas por los nazis.

Para sostener que hubo prevaricación, el juez Varela señala que la Ley de Amnistía impide juzgar los crímenes del franquismo. Pues bien, aclaremos que la propia Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas pide la nulidad de dicha ley, porque los delitos de lesa humanidad y genocidio no pueden estar sujetos a leyes de amnistía. Son delitos considerados tan graves que no se permite a los políticos el derecho de amnistiarse ni arrebatar a las víctimas el derecho a obtener justicia. Por otra parte, esa interpretación que coloca la Ley de Amnistía por encima del amparo a las víctimas es contradictoria con los artículos 10.2 y 96.1 de la Constitución, en vinculación con varios tratados y convenciones internacionales suscritos por España.

Varela indica, además, que los delitos han prescrito, pero eso solo sería posible si se observa cada caso individualmente, es decir, si se niega la existencia de crímenes masivos y por ende, la intencionalidad del franquismo de cometerlos, dado que los crímenes de genocidio y lesa humanidad no prescriben.


Varela señala también que Garzón ha incumplido la Ley de la Memoria Histórica al usurpar tareas que corresponden a la administración, lo cual es falso, porque dicha ley señala en su disposición adicional segunda que las previsiones contenidas en la misma son compatibles con el ejercicio de las acciones establecidas en las leyes o tratados y convenios internacionales suscritos por España.

Cuando la justicia da cobertura a una dictadura a costa de negar auxilio a sus víctimas, cuando se actúa de espaldas a la voluntad de la mayoría, ¿qué Estado de derecho es éste? ¿Qué democracia es ésta?

Juan Diego Botto, hijo de desaparecido de la dictadura argentina, es actor.

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Bnb

Ciertamente no tiene desperdicio, y hasta es probable que esta vaina se extienda, y lo que en principio solo era la búsqueda de los nuestros, se convierta en un revertir el asunto, y SI se tengan que juzgar esos crímenes, que quieren por activa y por pasiva que pasen al olvido, poniendo punto final a esa ley de punto final y de mordazas obligadas.

¿Y CARRILLO?

¿Y FIDEL?

¿Y EL MONO VENEZOLANO?

¿Y EL PRESIDENTE NORCOREANO?

¿Y EL PRESIDENTE CHINO?

¿Y EL FEO DE IRAN?

¿Y LOS MILLONES DEMUERTOS SILENCIADOS
DE LAS DICTADURAS BOLCHEVIQUES?.

¿QUE, QUE, QUE, QUE, QUE?

ESOS COMO ERAN Y SON ROJOS,

NO CUENTAN NI PARA EL SUPERJUEZ,

NI PARA LOS ROJOS DE PACOTILLA.

Como siempre, el tonto de las mil personalidades mezcla el culo con las témporas, y cuando los demás hablamos de cosas serias, él continúa con sus absurdas gracias, sus torpes comparaciones y sus infantiles iconos. No tiene arreglo. Lo del tonto y la linde, ya sabemos, cuando la coge.........no para.


Como he citado antes a Carlos Cano, voy a copiar la letra de su sublime “Tango de las madres locas”, que el maestro dedicó a las madres y abuelas de la Plaza de Mayo, y que emociona a cualquiera que lo escuche, a cualquiera que tenga algo de sensibilidad. Sensibilidad de la que andan escasos nuestros simpáticos defensores/apologetas (o mejor dicho apoloJetas) de Patascortas, que aunque son todos muy cristianos y amantes de su prójimo y de la familia tradicional, no son capaces de entender que esos prójimos tengan sentimientos hacia sus familiares desaparecidos, e incluso que algunos de ellos quieran dar cristiana sepultura a los restos, que también se da el caso.



Todos los jueves del año
A las once de la mañana
Junto a la Plaza de Mayo
Con lluvia frío o calor
Te esperaré vida mía
Frente a la Casa Rosada
La espina de tu mirada
Clavada en mi corazón.

Me dicen que no te fuiste, mi bien
Que te desaparecieron
Que te vieron en la cuneta
Cantando "El Yira" de Carlos Gardel
Que de pronto te esfumaste
Que te borraron del mapa
Que ni siquiera naciste
Que medio loca mamá te inventó.

Con Malvinas o sin Malvinas
Grito tu nombre por las esquinas,
Mientras que los generales
Se dan al Tango
Por los portales.
Tango de las madres locas
Coplas de amor y silencio
Con vida se los llevaron
Y con vida los queremos.
Con Malvinas o sin Malvinas
¿Dónde está Pedro? ¿Dónde está Lidia?
Con Malvinas o sin Malvinas
Grito tu nombre por las esquinas.

Cada vez que dicen : "Patria"
Pienso en el pueblo y me pongo a temblar
En las miserias que vienen
Y en los fantasmas de la soledad
¿Petronila qué te hicieron?
¡Qué mala cara tenés!
- La que me dejó Videla
- A mí Galtieri ya ves...

Con Malvinas o sin Malvinas
Grito tu nombre por las esquinas,
Mientras que los generales
Se dan al Tango
Por los portales.
Tango de las madres locas
Coplas de amor y silencio
Con vida se los llevaron
Y con vida los queremos.
Con Malvinas o sin Malvinas
¿Dónde está Pedro? ¿Dónde está Lidia?
Con Malvinas o sin Malvinas
Grito tu nombre por las esquinas.

oooooooooooooooooooooooooo

Bnb

QUE SI, QUE LO QUE PASO EN LAS
DICTADURAS CHILENA Y ARGENTINA,
FUERON CRIMENES Y QUE MERECEN
CASTIGO LOS CULPABLES.

¿Y LAS MADRES DE BLANCO CUBANAS?

¿QUE, QUE, QUE, QUE, QUE?

EL TIRANO CUBANO Y SU HERMANO,
TAMBIEN TIRANO, TODAVIA VIVEN.

¿QUE HA HECHO EL SUPERJUEZ AL RESPECTO?

NADA DE NADA.

Y ZP Y SU DESATINADO EMBAJADOR,
APARTE DEL PELOTEO Y TURISMO GRATIS TOTAL.

NADA DE NADA

Y VOSOTROS, LOS ROJOS DE ESPIRITU

¿HABEIS PROTESTADO, QUEJADO, ENVIADO
CARTAS CENSURANDO LA TIRANIA?

¡NADA, DE NADA, DE NADA, DE NADA, DE NADA!.

QUE NO BNB, QUE NO SOY EL QUE TE IMAGINAS.

ME ALEGRO QUE HAYA INCORPORACIONES NUEVAS,
Y MAS SIN SON DE DERECHAS.

5140070

Pero de que te quejas?, no habíamos quedado (afirmado y comprendido) que tienes el cuero muy duro, tipo acero inoxidable y que en él resbala todo? Cuál es el problema tuyo que haya dictadores feos o bonitos por el planeta?, que haya cadenas y grilletes, que haya ladrones y ladrones, pederastas y criminales?, total, a ti y a tú descendencia (habrán heredado tus genes, por ende tú blindaje) no ha de sucederles nada de nada, si hasta la parca resbalará en su acorazada pellica, de que tienes miedo?, cuál es tú problema a tal respecto, de vaina conseguirá el agua regia hacer mella en esa armadura, y el agua regia no la consigue cualquiera….


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