Serón de Nágima - Soria

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Me parece que hay poca gente (de Serón) que conozca la existencia de éste foro, habría que poner un enlace en la página web del pueblo y unos carteles en los bares. Estaría bién que entraran, ya que el anonimato les permitiría decir lo que en público se callan.

Fdo. El Hoyo del Cubo.

que es la alhóndigaa???

ESPERO QUE TE SIRVA DE ALGO, LEELO:


De pósito a lonja y a Servicio Nacional de Trigo

El inmueble, datado en 1697, cuenta con una fachada de gran interés, que es la pieza que quieren conservar los vecinos
Nuria Zaragoza.Soria
El edificio de la alhóndiga de Serón de Nágima es el único inmueble urbano fechado a finales del siglo XVII, concretamente en el año 1697, según aparece grabado en piedra con carácter y estilo de la época en el dintel de la ventana central de la primera planta.


Los vecinos y amigos del pueblo interesados en la recuperación del inmueble han hecho un laborioso estudio documental e histórico para poner de relevancia la importancia del inmueble.


De propiedad municipal, la actual fachada está blanqueada con cal de forma muy burda, lo que enmascara y dificulta la visión de los guarismos del año de construcción (1697), así como los sillares de sus esquinas, alero del tejado, dinteles y jambas de piedra labrada de la puerta y ventanas.


Un sencillo trabajo de restauración centrado en la limpieza del encalado actual de la fachada sería suficiente para dejar al descubierto estos detalles y dar al conjunto el esplendor digno de este antiguo e histórico edificio.


En el estudio desarrollado por estos vecinos, se pone de manifiesto que un importante detalle del edificio lo constituye un campanillo fundido en el año 1733 que está situado en un lateral del tejado y que está inventariado por la Consejería de Cultura y Turismo de la Junta. Se trata de la única campana de carácter civil existente en el pueblo. El campanillo posee un sencillo soporte metálico en forma de arco de medio punto rematado por una veleta y una cruz que se utilizó para llamar a concejo o asamblea de vecinos para tratar temas relacionados con el municipio.


Desde el punto de vista histórico, el edificio cuya fachada se pretende salvar fue una lonja del mercado de cereales cuando en la plaza Mayor de Serón se celebraban mercados durante todos los jueves del año.



Anteriormente, en su planta baja estuvo el local del pósito o alhóndiga, destinado a almacenar cereales, leguminosas y alimentos no perecederos para su préstamo a los campesinos necesitados, ya fuera para sembrar o para paliar situaciones extremas de hambre en sus familias, reflejan estos vecinos en su documentación.


Cabe recordar en este sentido que las alhóndigas actuaban como unos bancos agrarios solidarios administrados por el propio Ayuntamiento. Tras la ocupación francesa y la Guerra de la Independencia, el número de alhóndigas se fue reduciendo drásticamente hasta llegar a desaparecer.


Precisamente en esas fechas se sitúa el cese del funcionamiento de la alhóndiga de Serón, aunque el local siguió conservando el nombre hasta la mitad del siglo XX.


En la posguerra fue cedido al organismo estatal llamado Servicio Nacional del Trigo, recuerdan estos vecinos. Fue entonces cuando se destinó a almacén de este cereal, cuya producción y compra a los agricultores estaba controlada por el Estado de forma monopolizada para paliar, en lo posible, la situación de escasez de pan en el país.







Serón prevé demoler su alhóndiga del XVII para construir un centro social
Un grupo de vecinos exige retocar el proyecto para que se pueda conservar la fachada
Remiten cartas al Ayuntamiento, a la Delegación y a la Consejería de Interior y Justicia
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Propuesta de rehabilitación de la fachada de la alhóndiga.. Cedida Nuria Zaragoza. Soria

Serón de Nágima podría perder su alhóndiga del siglo XVII con la construcción de un centro social de usos múltiples para el pueblo, un proyecto promovido por el Ayuntamiento de la localidad a través de una ayuda de 104.475 euros de la Consejería de Interior y Justicia.


La actuación aprobada por el Consistorio contempla la demolición total del inmueble, de titularidad municipal y ubicado en la plaza Mayor, para construir en el lugar un centro social. Aunque el edificio no está declarado Bien de Interés Cultural (BIC) ni forma parte del inventario de Bienes del Patrimonio Cultural de Castilla y León ni cuenta con protección alguna, lo cierto es que se trata de un inmueble de valor histórico y arquitectónico -es el único edificio de titularidad municipal datado en el siglo XVII que queda en pie y su historia está directamente vinculada a la del propio pueblo-. Por ello, su destrucción ha despertado ya las voces contrarias.


La noticia ha movilizado a un numeroso colectivo de vecinos y amigos vinculados con el pueblo de Serón de Nágima, que han manifestado ya su inquietud y preocupación por la pérdida, y han reclamado al Ayuntamiento de la localidad y a la Junta que retome el proyecto y estudie la posibilidad de construir el centro social pero manteniendo la fachada de la antigua alhóndiga.


Ignorado el valor patrimonial

"La demolición afectaría también a la actual fachada, ya que en el proyecto se ha ignorado su valor patrimonial e histórico, lo que provocaría su total desaparición", advierten los vecinos. Preocupados por la situación, añaden, "la pérdida de esta fachada es lo que pretende evitar este grupo de personas, que no se oponen en absoluto a la construcción del nuevo centro, sino que lo único que solicitan es su conservación, ya que pertenece al único inmueble municipal fechado en el siglo XVII". Insisten así en la viabilidad de compaginar ambas actuaciones, la rehabilitación y conservación del antiguo edificio, con la construcción de un nuevo centro. "El respeto de la fachada actual es perfectamente compatible con la demolición del resto de la edificación, lo que permitiría construir el nuevo local 'salvando de la piqueta' a esta pared que posee unas características arquitectónicas peculiares y una vinculación directa con la historia del pueblo", reiteran.


Desde este grupo de vecinos y amigos de Serón, aseguran que la fachada está perfectamente consolidada y aplomada, por lo que creen que su conservación no sería compleja de incluir en el proyecto.

Advierten que lo único que habría que hacer es apuntalar esta pared y asumir el proyecto y, una vez ejecutado, limpiar el encalado que cubre actualmente la fachada, blanqueada con cal desde hace años, para sacar su belleza. "La limpieza del encalado actual de la fachada dejaría al descubierto estos detalles y con un sencillo trabajo de simple restauración se conseguiría dar al conjunto el esplendor digno de este antiguo y sobrio edificio del más puro estilo castellano, con independencia de la nueva construcción", destacó.


Tres cartas remitidas

Este grupo de vecinos ha remitido ya tres cartas al Ayuntamiento, a la Delegación Territorial de la Junta, y a la Consejería de Interior y Justicia, instando a que se retome el proyecto y se evite la pérdida de la fachada. Por el momento, tan sólo la Delegación Territorial ha contestado, si bien en su escrito asegura no tener competencias sobre la defensa de este patrimonio, y se desentiende del tema.


En su texto de respuesta, el delegado territorial, Carlos de la Casa, advierte de que "el edificio que el Ayuntamiento pretende demoler para la realización de la obra no se encuentra inventariado como bien de interés cultural, ni reúne las características para poder acogerse a otra figura que determine su necesaria protección". Por ello, insiste, "la Consejería de Cultura y Turismo no tiene competencias sobre un edificio que es propiedad del Ayuntamiento". Además, subraya De la Casa, el Ayuntamiento "goza de autonomía para la gestión de sus respectivos intereses", por lo que es de competencia de la entidad local "la decisión de llevar a cabo una determinada obra dentro del término municipal".


Ante la negativa de la Junta en Soria a intervenir, los vecinos se han puesto ya en contacto con la Consejería de Interior y Justicia, de quien depende la ayuda por la que se va a asumir la obra de demolición de la alhóndiga y construcción de un centro social.


Otras pérdidas

Desde Serón alertan de que "no es la primera vez que el pueblo destruye impunemente sus bienes patrimoniales urbanos y, por ello, se escuchan continuas lamentaciones entre los vecinos sensibilizados por el tema".



Así, recuerdan que "a principios del siglo XX se demolió la torre Santiaga, también se desmontaron las piedras de la base del castillo para su reutilización en algunas obras. Asimismo, se destruyó el magnífico edificio con soportal y columnas del antiguo Ayuntamiento para convertirlo en una sucursal bancaria".


Ante esta situación, consideran, "sería imperdonable que hoy en día, con un mayor nivel cultural de las personas y la existencia de organismos oficiales, teóricamente, defensores del patrimonio, se cometieran similares tropelías a las realizadas en el pasado".


Los afectados recuerdan una cita del escritor y académico Arturo Pérez-Reverte para reclamar que se recapacite sobre el asunto y no se deje perder una fachada del siglo XVII única: "Mucha gente, políticos analfabetos sobre todo, cree que se trata de recordar batallitas del abuelo Cebolleta. Por eso desprecian y degradan lugares que podrían servir como lección viva de historia y de memoria".

De pósito a lonja y a Servicio Nacional de Trigo

El edificio de la alhóndiga de Serón de Nágima es el único inmueble urbano fechado a finales del siglo XVII, concretamente en el año 1697, según aparece grabado en piedra con carácter y estilo de la época en el dintel de la ventana central de la primera planta.
Los vecinos y amigos del pueblo interesados en la recuperación del inmueble han hecho un laborioso estudio documental e histórico para poner de relevancia la importancia del inmueble.
De propiedad municipal, la actual fachada está blanqueada con cal de forma muy burda, lo que enmascara y dificulta la visión de los guarismos del año de construcción (1697), así como los sillares de sus esquinas, alero del tejado, dinteles y jambas de piedra labrada de la puerta y ventanas.
Un sencillo trabajo de restauración centrado en la limpieza del encalado actual de la fachada sería suficiente para dejar al descubierto estos detalles y dar al conjunto el esplendor digno de este antiguo e histórico edificio.
En el estudio desarrollado por estos vecinos, se pone de manifiesto que un importante detalle del edificio lo constituye un campanillo fundido en el año 1733 que está situado en un lateral del tejado y que está inventariado por la Consejería de Cultura y Turismo de la Junta. Se trata de la única campana de carácter civil existente en el pueblo. El campanillo posee un sencillo soporte metálico en forma de arco de medio punto rematado por una veleta y una cruz que se utilizó para llamar a concejo o asamblea de vecinos para tratar temas relacionados con el municipio.
Desde el punto de vista histórico, el edificio cuya fachada se pretende salvar fue una lonja del mercado de cereales cuando en la plaza Mayor de Serón se celebraban mercados durante todos los jueves del año. Anteriormente, en su planta baja estuvo el local del pósito o alhóndiga, destinado a almacenar cereales, leguminosas y alimentos no perecederos para su préstamo a los campesinos necesitados, ya fuera para sembrar o para paliar situaciones extremas de hambre en sus familias, reflejan estos vecinos en su documentación.
Cabe recordar en este sentido que las alhóndigas actuaban como unos bancos agrarios solidarios administrados por el propio Ayuntamiento. Tras la ocupación francesa y la Guerra de la Independencia, el número de alhóndigas se fue reduciendo drásticamente hasta llegar a desaparecer.
Precisamente en esas fechas se sitúa el cese del funcionamiento de la alhóndiga de Serón, aunque el local siguió conservando el nombre hasta la mitad del siglo XX.
En la posguerra fue cedido al organismo estatal llamado Servicio Nacional del Trigo, recuerdan estos vecinos. Fue entonces cuando se destinó a almacén de este cereal, cuya producción y compra a los agricultores estaba controlada por el Estado de forma monopolizada para paliar, en lo posible, la situación de escasez de pan en el país.

¿Al final que va a pasar con el edificio?