¿Por qué la CUT? Que la izquierda es hoy más necesaria que nunca lo demuestra un somero repaso de la realidad que nos rodea. En el contexto internacional, la burguesía imperialista tiene varias consignas de obligado cumplimiento: a) El monopolio de la violencia que da como buena la violencia de los ricos, como legal y natural y hasta bendecida por todos y que criminaliza la violencia de los pobres. Así los Estados tienen licencia para matar y la OTAN se quita la careta para convertirse en el brazo armado del imperialismo para intervenir allá donde le dé la gana a los intereses de las grandes multinacionales. b) Todo el poder al mercado frente al Estado, las Naciones, los Pueblos y las personas. Se produce así un trasvase de Soberanía del ámbito de lo político al ámbito de lo económico. El mayor ladrón de Soberanía es el imperialismo económico y sus multinacionales. Los pueblos se quedan así más indefensos que nunca. c) Más desigualdad como necesidad de un sistema que vive sobre esta contradicción permanente. Hasta el punto de considerar el hambre como natural y que tres cuartas partes de la población de este Planeta se sitúe en la marginalidad permanente. d) El dinero convertido en Dios hace que el Capitalismo considere que la única filosofía válida es la de obtener el máximo de beneficios en el mínimo de tiempo y sea como sea, y a costa de lo que fuere, esto lleva a considerar a la naturaleza como una mercancía que se compra, que se vende y que se destruye con toda impunidad. No hay reforma ecológica que valgan dentro de este modelo depredador de desarrollo. e) La propaganda y la mentira son más imprescindibles que nunca para la burguesía que no sólo controla los medios de producción sino que también tiene el monopolio de los medios de comunicación. La verdad o la mentira es virtual y los sistemas educativos e informativos están exclusivamente en manos de una sola clase que los utiliza para difundir sus valores y las mentiras que convengan difundir en cada momento. Estas consignas son llevadas a cabo por los diferentes gobiernos. En el Estado español tanto el PSOE como el PP diseñan sus políticas sin apartarse ni un milímetro de estas directrices del imperialismo. Ni que decir tiene que en Andalucía, Manuel Chaves ha practicado el neoliberalismo más académico, con lo que los grandes problemas de Andalucía siguen sin resolverse. Hoy, Andalucía, tiene un millón de parados y dos millones de pobres, el índice más alto de la UE, el índice de accidentes laborales también más alto, 400.000 pequeños campesinos en la ruina o una nueva concentración de la propiedad de la tierra, el agua y la semilla, o la gran paradoja de que importamos el 53% de los productos agroalimentarios. Sectores como la pesca han sido desmantelados o son cuasi inexistentes como la industria que hoy apenas es el 8% de la del conjunto del Estado. A nuestra nación, evidentemente, se le sitúa en la marginalidad y en la dependencia política y económica. |