Paradas - Sevilla

INFORME SOBRE AGRESIONES POLICIALES A INMIGRANTES
- SAN ISIDRO (NIJAR, ALMERIA), Agosto y Septiembre de 2007 - SINDICATO DE OBREROS DEL CAMPO


En los últimos años, y en particular desde las agresiones contra inmigrantes acaecidas en El Ejido en febrero de 2000, han sido numerosas en esta provincia de Almería, las denuncias de inmigrantes por agresiones presuntamente racistas o xenófobas por parte de particulares, así como por abusos policiales en los controles de documentación. El esclarecimiento de estos lamentables hechos y la consiguiente aplicación de sanciones penales a sus autores, se ha visto dificultado por el miedo de las víctimas y testigos ante las represalias que pudieran llevar a cabo tanto las mafias como en su caso los cuerpos policiales implicados, ya que al tratarse de inmigrantes, y en gran parte indocumentados, se arriesgaban a ser maltratados y, en su caso, expulsados del país. Todo ello en un clima social e institucional reacio a admitir la existencia de racismo o de excesos policiales en perjuicio de los trabajadores inmigrados en Almería.

Durante los últimos meses este sindicato ha recibido casi un centenar de denuncias sobre maltrato y abuso policial en controles de documentación, así como de robo de dinero y violación de domicilio. La mayoría de estos hechos han sucedido en un par de viviendas precarias ubicadas en la localidad de San Isidro, perteneciente al municipio de Níjar, en el cruce de El Barranquete-Albaricoques, en la carretera 824, dirección a San José. Se trata de dos cortijos en ruinas que albergan entre 20 y 40 personas cada uno y que es conocido como “Casas Viejas”. Son alojamientos provisionales que utilizan los trabajadores mientras consiguen una habitación definitiva en las fincas de los empresarios o en viviendas alquiladas. Una parte de los habitantes están indocumentados o en proceso de documentación. Todos ellos se encuentran trabajando en el sector agrícola, días sueltos durante el verano y de manera continua a partir de septiembre, en que comienza la campaña agrícola en toda la comarca.

Es en estas circunstancias que un grupo de agentes jóvenes de la Guardia Civil y aparentemente con poco tiempo en su destino, se han dedicado a maltratar, humillar e incluso robar a estos trabajadores inmigrantes, al amparo de supuestos controles rutinarios de documentación, en operativos estilo “película americana” que han incluido disparos al aire, insultos, persecuciones y otras prácticas que además de humillar a las víctimas, deberían avergonzar tanto a este cuerpo de seguridad como a la misma sociedad y al estado de derecho que representan. Las denuncias que se detallan a continuación han sido recibidas tanto en nuestro local sindical como por teléfono y han sido contrastadas en todos los casos por nuestros sindicalistas a través de entrevistas personales y encuentros colectivos en el lugar de los hechos, esto es la vivienda de las víctimas.

1. El miércoles 7 de agosto de 2007 se produce en la "Casa Vieja" un operativo policial que deja como resultado cinco heridos leves. A eso de la una y media de la madrugada los inmigrantes escuchan el ruido de varios coches que se detienen en las inmediaciones y un momento después los puntapiés de los policías en las puertas de sus casas. Estos entran en la vivienda sin mostrar orden judicial alguna y comienzan a insultar a los habitantes: “¡Moros de miierrda, hiijjos de puttaa, fuera de aquí!”. Los trabajadores salen corriendo sin calzarse, lo que produjo heridas a algunos de ellos.



Los agentes de la Guardia Civil y Policía Local argumentan que hay muchos delincuentes y reyertas en el lugar. Los compañeros responden que es normal que en un grupo de ochenta personas haya problemas, pero que esto no justifica este tipo de actuaciones violentas, desproporcionadas y claramente racistas.

Asimismo se denuncia que unos meses atrás la policía hizo irrupción en la habitación que tienen acondicionada como mezquita y rompieron varios objetos, entre ellos el libro sagrado musulmán, el Corán. En otra ocasión, y por culpa de la huida precipitada a que les obligaron los agentes policiales, quedó encendida una vela que produjo un incendio que quemó enseres y alimentos.

Esta declaración ha sido realizada por las víctimas y confirmada en asamblea realizada el sábado 11 de agosto junto al cortijo. Las víctimas y testigos no quisieron en esta ocasión efectuar las denuncias por miedo ante represalias o expulsiones.


2. A mediados de agosto los inmigrantes nos piden acercarnos al lugar a fin de comunicarnos su situación actual. En una asamblea realizada ante cuarenta personas el día 19 de Agosto se reciben una serie de denuncias sobre actuaciones policiales realizadas en las últimas semanas y que consisten fundamentalmente en lo siguiente:

- Controles policiales nocturnos entrando en las viviendas por la fuerza, entre gritos e insultos. En ningún caso se ha mostrado a los moradores la necesaria orden judicial de allanamiento.
- Control de documentación con conductas violentas, abusivas y desproporcionadas tales como empujar y esposar a los inmigrantes sin causa alguna, tirar la documentación al suelo entre insultos y amenazas.
- Realización de disparos al aire para intimidar a las víctimas y realización de prácticas humillantes y peligrosas tales como hacer huir a una persona corriendo a fin de evitar posibles disparos, o producir una huida generalizada de los inmigrantes hacia la montaña, todo ello entre las risas e insultos de los agentes. Ha habido casos en que los policías han apedreado a las personas que obligaban a huir corriendo.

Se realiza una lista de 32 personas dispuestas a denunciar y declarar estos delitos, siempre que se garantice su protección ante represalias y expulsiones.

3. El día martes 4 de septiembre, por la tarde llega un coche de la Guardia Civil matrícula PGC 3310N a fin de realizar un control de documentación. Piden a los trabajadores que le entreguen tanto su documentación, Pasaportes y Tarjeta de Residencia, como todo lo que tengan en los bolsillos, incluyendo el dinero. Se retiran del lugar a fin de efectuar supuestas averiguaciones y momentos después vuelven a pasar cerca del cortijo y desde el coche tiran los documentos por la ventana. Los inmigrantes corren para coger sus documentos y encuentran que falta el dinero secuestrado. Dos personas, Mustapha El Assouli y Marzak Khalifa, trabajadores marroquíes titulares de autorización de residencia y trabajo, se dirigen a hablar con los agentes y les piden que devuelvan el dinero. Frente a la negativa de los agentes, les recuerdan que eso es ilegal, que hasta ahora nunca la Guardia Civil les había quitado su dinero en un control de documentación y que es un robo.

Los agentes bajan del coche, se acercan y comienzan a golpear a estas personas con su porra, diciéndoles que “todos los que no tienen papeles no tienen que estar aquí” (en España) y que “no tienen derecho a ganar dinero”. Durante el mismo operativo, y ante la queja de que se ha roto el frasco que contiene el medicamento contra la alergia de piel, uno de los agentes reacciona pisando el envoltorio con su bota hasta destruirlo completamente. Los testigos apuntan a un agente “rubio y joven” como de mayor ensañamiento contra los inmigrantes.

Seguidamente, y supuestamente a los fines de ampararse ante las denuncias de las víctimas, estos agentes detienen a las dos personas antes mencionadas, Srs. Khalifa Marzak y Mustapha El Assouli, acusándolas de atentado y resistencia a la autoridad, e incluso de lesiones a uno de ellos. También acusan al trabajador Aderchir Abdelaziz, quien exigía la devolución de seiscientos euros. Las actuaciones se tramitan en Diligencias 114/07 del Juzgado número 2 de Almería. En el Centro de Salud de Oliveros se acredita con fecha 6 de septiembre que el Sr. Khalifa Marzak presenta una lesión de contusión de ambos antebrazos, en la zona baja, en la zona lumbar y baja costal, así como una ligera inflamación en la zona parotidea bilar. Asimismo el Sr. Aderchir Abdelaziz fue diagnosticado de “Contracción tras golpe” según parte del servicio de urgencias del Hospital Torrecárdenas de Almería, de fecha 6 de septiembre. Se adjuntan copias por fax.

El día 5 de septiembre por la mañana el agricultor Francisco D. se dirige al cuartel de la Guardia Civil de Níjar a fin de que le aclaren lo sucedido respecto a un trabajador que conoce desde hace cuatro años y al que durante los hechos descriptos se le ha quitado dinero. Los agentes allí presentes comienzan a gritarle acusándolo de que “él es el culpable de que esa mierda de gente esté aquí, ya que les da trabajo” y a amenazarlo con denunciarlo por la contratación de ilegales. Respecto al dinero o a la posibilidad de efectuar la correspondiente denuncia le increpan de que “si quieren quejarse o denunciar algo que vengan ellos mismos al cuartel”.

Esta declaración ha sido realizada por las víctimas y confirmada por más de treinta personas que habitan en el lugar, en presencia de nuestros sindicalistas. Las víctimas del robo son las siguientes:
- Aderchir Abdelaziz 600€
- Khalifa Marzak; 100€. y Rotura de su medicamentos contra la alergia.
- N. M.; 200€
- A. K.; 50€
- A. B.; 15€
- A. K.; 50€


En Almería, a 10 de septiembre de 2007.-



Soc Almería.

A los policías pedimos más discreción, más profesionalismo y más educación ciudadana .
Desde el SOC Almería condenamos estas agresiones hasta la última energía.


Por el SOC:
Spitou MENDY, Inmigrante senegalés y responsable sindical del SOC-Almeria