La Algaba - Sevilla

El PP denuncia que PSOE e IU cobraron a los vecinos para afrontar gastos ya pagados


Los presupuestos ya incluían el gasto, pero se obligó a los vecinos a pasar por caja; y el dinero no aparece...

https://ww.abcdesevilla.es/20110803/sevilla/sevi-ayuntamiento-psoe-cobro-tasa-201108022145.html

No ha dejado mucha documentación en los cajones el anterior Gobierno municipal sevillano (PSOE con IU de socio minoritario), pero con lo que ha ido apareciendo se puede realizar una aproximación bastante ilustrativa a lo que es toda una manera de gobernar que ha pisado demasiadas ocasiones la línea que separa lo legal de lo ilegal; y lo moral de lo inmoral. Incluso cuando el asunto afecta a las capas más desfavorecidas, como es el caso. Y es que el anterior gabinete cobró a los vecinos de al menos dos distritos de la ciudad (Sur, de los comunistas, y San Pablo-Santa Justa, controlado por los socialistas) una cuota por los viajes en autobús a diversos destinos de ocio —especialmente a la playa— que ya estaban costeados vía presupuestos, con sus correspondientes partidas. O sea, viajes que eran gratis para vecinos con escasos recursos que, sin embargo, se vieron obligados a pagar una pequeña cuota por adelantado para subir al autocar y de la que no se tiene constancia en documentación oficial. De momento son dos los distritos salpicados por esta práctica. De momento. Así fue expuesto ayer por el actual Gobierno local, del PP, y por los nuevos delegados de los dos distritos afectados, José Luis García (Sur) y Jaime Ruiz (San Pablo-Santa Justa), que anunciaron el inicio de una investigación completa del asunto incluyendo la petición al interventor general del Ayuntamiento de información, si es que existe, acerca de esos pagos.

Dichos abonos, que rondaban los tres euros por persona —se tenía la «delicadeza» de reclamar solo dos euros a los niños—, no tienen reflejo alguno en las cuentas públicas locales y lo realizaban los vecinos en los despachos de los distritos o en el mismo aparcamiento del bus antes de ocupar el asiento a personal de confianza de esos distritos, pero nunca a funcionarios. Esto es, a personas que PSOE o IU habían puesto a trabajar (y también a recaudar) en las sedes de los distritos y que recibían órdenes políticas puenteando a los funcionarios, garantes de la transparencia en los procesos. De hecho, los ediles populares trasladaron ayer a los medios de comunicación un documento firmado este mismo lunes por la jefa de negociado del Distrito San Pablo-Santa Justa en el que se recalca que los funcionarios han comprobado que en los últimos años «no se ha registrado ningún documento en el que se señale la percepción de ingresos por estos conceptos ni se ha facilitado a los vecinos ningún documento oficial por el que éstos tuvieran que realizar ingresos por los citados conceptos en entidad bancaria alguna a favor del Ayuntamiento de Sevilla». Dinero negro. Contabilidad paralela en la Administración pública. Una vieja historia. Como la del canon a los comerciantes de los mercadillos.
No obstante, los vecinos de varias asociaciones aseguran que tenían que pagar «una cuota al distrito para poder viajar, además de inscribirse». Tanto es así que el nuevo Gobierno local ha encontrado en alguna caja del Distrito Sur unos impresos, expuestos ayer a los informadores, que los ciudadanos que deseaban realizar el trayecto debían rellenar como «justificante de pago» o comprobante. El vecino se quedaba con la parte inferior, una especie de resguardo que se recortaba del folio, pero lo más grave del asunto es que estos papeles —reproducidos junto a estas líneas— tenían el membrete municipal y del Distrito Sur en cuestión, además de estamparse con el sello del propio Ayuntamiento. Este tipo de «solicitud» se utilizó en el distrito comandado por el comunista Antonio Rodrigo Torrijos con motivo de su famosa iniciativa «Los miércoles al sol», con la que se llevaba a gente con pocos recursos del Polígono Sur a las playas. Y se les hacía pagar el «impuesto», claro.

La empresa, el cien por cien

El pago de cuotas, que oscilaban entre los dos y los cuatro euros y que no fueron destinadas a la cofinanciación del servicio —puesto que la facturación realizada por la empresa era del cien por cien del servicio, coincidente con la documentación existente en el distrito— fue confirmado por representantes vecinales presentes en la propia rueda de prensa de ayer. Si se habían previsto esos documentos aparentemente oficiales ex profeso para este cobro, ¿por qué no hay asiento contable alguno en el Ayuntamiento de esos pagos que los ciudadanos realizaron a personal de confianza de los distritos? ¿Por qué se pagaba dos veces por lo mismo? ¿A dónde ha ido el dinero?

Eso se preguntaban ayer desde el Ayuntamiento, donde explicaron que ya se ha hablado con los vecinos de diversas asociaciones para «tranquilizarles», ya que no hay que costear nada en este tipo de viajes, pues en los expedientes administrativos se incluía el sufragio de estos gastos. «De ahora en adelante se hará así, sin coste, como está previsto. Lo que hace falta es ahora que se explique el motivo de este cobro irregular que se ha venido haciendo al menos durante el último mandato». Las primeras pesquisas y aportaciones vecinales apuntan, de hecho, a los años 2006 en adelante. Desde el Distrito Sur se tiene, además, constancia documental de casos fechados en 2008, que suponen la recolección de una media de 375 euros al día, lo que, multiplicado por 16 autobuses que prestan este servicio en verano, hacen unos 6.000 euros por ejercicio, unos 24.000 si se extrapola a los casos de los años 2007, 2009 y 2010, de los que no hay actualmente documentos pero de los que hablan los vecinos con absoluta claridad en relación a ese cobro paralelo del Ayuntamiento. En el caso de San Pablo-Santa Justa, en el pasado año y medio se habrían recabado unos 6.400 euros por este concepto. «Nadie sabe dónde ha ido ni en qué se ha empleado ese dinero», señaló ayer el delegado de ese distrito, que aclaró que «no vale el concepto de seguro de viaje, como se le indicaba a alguno de los vecinos, pues el contrato con la empresa incluye siempre la obligación de cubrir cualquier riesgo».

«Mínimo simbólico»

Desde el PSOE no se quiso ayer valorar el asunto, limitándose a pedir «cautela» a la espera «de lo que dictamine el interventor, al que van a preguntar». Desde el grupo municipal de IU, por su parte, sí se aludió a la cuestión, aunque sin profundizar demasiado y exponiendo que el dinero cobrado —lo que se admitió— era para «financiar más autobuses» y que, en ningún caso, «nadie se quedaba con este dinero». Dichas cantidades, según explicaron desde ese grupo a Europa Press, revertían «íntegramente» en un mayor número de desplazamientos, para lo que se llegaba a un acuerdo con las compañías de autobuses». Asimismo, se indicó que otra razón de ser de dicha cuota, a la que calificó como «mínimo simbólico», era la de evitar que las personas se echaran atrás en el último momento y que los autobuses se quedaran vacíos el día que estaba programado el viaje. Una especie de «seguro». Esta tesis choca con lo expuesto por algunos vecinos, que aseguran que se cobraba «a pie de autobús». La cuestión es que no parecen existir expedientes que acrediten que el dinero de las «cuotas B» tenía destino explícito o se usaba para «acuerdos» con las empresas de autobuses.