Aznalcóllar - Sevilla

COMO PA NO ESTAR INDIGNADO CON LOS 6.000 EUROS QUE COBRA EL TIO EN EL PARLAMENTO.

En su pueblo, además de elegirlo para que arregle el asfaltado de las calles, lo votan para que derribe el capitalismo

17.07.11 - 01:27 - ANTONIO SOLER

Sánchez Gordillo, alcalde de Marinaleda, revolucionario a lo Ché, pero sin boina ni estrella, es un indignado de nacimiento. Un indignado propenso a la ocupación de fincas, la eterna reforma agraria y -algo bueno debía tener- alérgico a la aristocracia. La revolución de Gordillo siempre ha tenido un toque castizo. No folclórico, sino populista, muy de la tierra. Más agropecuario que intelectual. Uno diría que es el otro lado de la balanza del liberalismo antropófago de Camps y compañía. Francisco Camps es defensor de la trilladora liberal, esa máquina capaz de hacer carne picada con cualquiera que haya estado, aunque sea de paseo, por los arrabales del marxismo. Los trajes, ya puestos en la percha del juzgado, Gürtel y toda esa defensa de su situación responden no a una caradura personal, sino a una postura política que concibe la vida como una selva en la que los peces grandes se comen a los pequeños no solo en beneficio propio sino en el de los peces pequeños que escapan a sus mandíbulas y que de un modo o de otro acabarán beneficiándose de los despojos que ellos dejan a su paso.
Imagina uno que Sánchez Gordillo siente una profunda repulsa hacia ese sistema y las personas que lo defienden, aunque lo suyo, como buen revolucionario, tiende más a la dispersión que a la concreción.

Gordillo quiere cambiar el mundo. Lo suyo es una batalla macro. La cara B de las cruzadas. En su pueblo, además de elegirlo para que arregle el asfaltado de las calles, lo votan para que derribe el capitalismo. Esa responsabilidad tiene mucha enjundia y no es fácil de llevar. Quizá por eso a veces, Gordillo ha tenido algunos trastornos, como apoyar a los acólitos de Batasuna o tener durante no se sabes cuantos meses el lapsus de recibir en su cuenta corriente -con tanta barricada es normal que no reparase en el saldo que le manda una sucursal bancaria, un reducto del capital- dos sueldos incompatibles.

Ahora, sin embargo, la indignación universal de Gordillo se ha focalizado. No en Camps ni en ninguna de las grandes contradicciones en las que están empezando a caer algunas de las corporaciones del PP elegidas en marzo. No, su grito se ha alzado porque su compañero Valderas, apoyado por los socialistas, ha impulsado una ley que impedirá a los alcaldes ser parlamentarios autonómicos en Andalucía. Algo que desplaza a Gordillo y posibilita que Valderas pueda presentarse en su lugar por la circunscripción de Sevilla. El alcalde de Marinaleda, defensor de la postura de IU en Extremadura y látigo del PSOE, denuncia esa ley -que deja a muchos alcaldes del PP contra las cuerdas- como un acto de canibalismo contra su persona. Anuncia batalla. Cosas de la revolución. Los roces de la causa y el Super Yo. La ideología convertida en una gran hormigonera donde todo cabe y todo gira como en un alegre tiovivo.

La utopía está en el horizonte. Camino dos pasos, ella se aleja dos pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. ¿Entonces para que sirve la utopía? Para eso, sirve para caminar.

Eduardo Galeano

Ta luego.

Pero la utopía está más cerca con cerca de 6.000 € al mes en el bolsillo, así es utópico cualquiera.

Como los concejales de mi pueblo con un sueldo y el bolsillo llenito hasta ellos son utópicos

Agriadul..........VALORADA EN 8,5 MILLONES DE EUROS
El Estado se apropia de la finca que Vera se compró con los fondos reservadosSiete años después de que la Justicia se pronunciase, el Estado ha expropiado la finca, valorada en 8,5 millones de euros, que compró el socialista en 1989.
Vera vive desde hace seis años en una finca del Estado
2011-07-18
L.I.VER.TAD....DI.GI.TAL
En el año 2004, la Justicia adjudicó al Estado la finca El Relumbrar, propiedad de Rafael Vera, número dos de Interior durante el Gobierno de Felipe González. Sin embargo, no ha sido hasta siete años después cuando la Administración ha expropiado la finca, valorada en 8,5 millones de euros, al socialista.

Vera adquirió esta finca con el dinero que robó de los fondos reservados sustraídos al Ministerio del Interior. Pero aún así, el socialista tiene como vivienda habitual otra finca en la localidad madrileña de Torrelodones y que también adquirió con los fondos reservados.

El pasado 15 de junio, el delegado provincial del Ministerio de Economía y Hacienda de Albacete recibió las llaves de la finca de manos del representante de la comunidad de bienes de los herederos de Enrique Esquivias, suegro de Vera y a quien utilizó como testaferro.

En el acta de expropiación se detalla que la finca El Relumbrar cuenta con 12 instalaciones industriales y edificios, entre ellos una vivienda de 470 metros cuadrados que está compuesta por siete dormitorios, cinco baños, una cocina y un salón comedor. Igualmente, hay tres viviendas aledañas, así como oficinas de administración, una bodega, aprisco, naves y tres cuadras de caballos