Está preocupado porque su casa vale ya menos que su hipoteca? No se preocupe. No hay crisis que cien años dure ¿Está preocupado porque su casa vale ya menos que su hipoteca? No se preocupe. No hay crisis que cien años dure y el precio de su piso volverá a subir. Al menos eso es lo que piensan en la cúpula de La Caixa, que están convencidos de que a mediados de esta década el ladrillo patrio volverá a recuperar su valor. “Llevamos más de un siglo en este negocio y sabemos que los ciclos pasan y que los precios volverán a subir”, sentencia el presidente de la entidad. Por ese motivo, el financiero catalán ha dejado claro que la entidad no se va a desprender a corto plazo de los miles de inmuebles y solares que se han ido adjudicando desde que estallase la crisis. No les preocupa ni que el Banco de España exiga más provisiones a los bancos y cajas que acumulan viviendas ni que los expertos y firmas de análisis insistan en que todavía tienen que producirse rebajas cercanas al 20%. Vender ahora sería malvender y a eso no están dispuestos en la entidad catalana, que tiene músculo para seguir aguantando. “No nos preocupan nuevas depreciaciones. Todo el margen de caída, será el margen de subida en los próximos años”, sostiene el director general de La Caixa, Juan María Nin. Actualmente, la tercera entidad financiera española controla el controla el 5,7% de Inmobiliaria Colonial y el 5,1% de Metrovacesa, además de tener a su nombre más de 12.000 pisos, con un valor de 1.800 millones de euros, y suelo por un importe similar. No sólo no van a vender, sino que Fainé y Nin van a seguir adquiriendo activos con los que engordar Servihabitat, la nueva filial bajo la que engloba sus ladrillos. De hecho prepara una ampliación de capital de 1.000 millones de euros en Servihabitat, que se suman a los más de 2.000 millones que ya ha inyectado en la compañía en los dos últimos años. Todo un signo de confianza en la viabilidad del sector. El objetivo a largo plazo es transformar Servihabitat en una nueva Colonial en la que podría dar entrada a socios internacionales e incluso sacarla a bolsa en un futuro. Están convencidos de que se puede volver a repetir la jugada de Colonial, una pequeña inmobiliaria que compró al antiguo Banco Hispanoamericano y engordó con sus viviendas adjudicadas, para años más tarde colocarla en bolsa y vendérsela al sevillano Luis Portillo en pleno boom por un valor total de 3.600 millones. ¡Jugada redonda! Es cuestión de tiempo que la historia se repita. Fainé está seguro de que será así y hasta la fecha su olfato para los negocios no le ha fallado. |