Almadén de la Plata - Sevilla

Hay vecinos en Almadén que cuando atisban una nube tienen que subir la ropa al doblao. Otros no tienen ese problema, viven en una segunda planta sobre un pub y además les gusta ver llover plácidamente recostado en las barandas de forja del balcón con las manos en los bolsillos removiendo la calderilla.

No deja de ser curioso que habiendo heredado un plan de inundaciones aprobado sobre su mesa y pendiente únicamente de ejecución se quede en papeles mojados en un cajón de su despacho. Bueno, papeles mojados no, porque cuando la lluvia aprieta por las calles de Almadén, a su despacho no llega el agua porque también, como su casa, está en una segunda planta. Digamos que el plan de inundaciones coge polvo sobre su mesa. Pero seguro que esos documentos no cogen más polvo que las alcantarillas del pueblo, porque no hay un solo caño que no tenga un metro de mierda incrustado entre las rejillas. Pero claro, en eso no hemos caído porque el interior de los caños no se ve subido en el caballo. Y cuando vamos andando tampoco miramos pa el suelo porque es más bonito ir con el cuello erguido, el pecho tieso y la cabeza alta.

Las primeras aguas del otoño han traído mucha agua, mucho barro, desesperación y nerviosismo, y han traído ropa en las calles y escobas enfangadas recostadas en las puertas. Pero claro, como la escoba forma ya parte inseparable de nuestro paisaje urbano ya nadie se echa las manos a la cabeza cuando ve a la gente sacando barro de detrás del frigorífico.

Como no tenemos ninguna explicación por parte del consistorio les hago una propuesta sub-realista: ¿Por qué no construimos un arca, como el de Noé? Seguimos sin limpiar los cauces, dejamos el arca de madera aparcada junto a la gasolinera y cuando llueva, que salga el Alcalde con la gramola llamando a la gente para que se suban en el barco. Pero eso sí, los perros, los ciervos y los cerdos tienen preferencia, ellos primero. Porque si en la cartilla del Ayuntamiento quedan cuatro perras, que se la gasten en los perros, que fonéticamente queda mejor, las perras pa los perros y pa los vecinos puerros.

Espero que siga lloviendo, por que es un bien para todos,ambiente,ganadería,agricultura,pantanos......Pero claro que no caigan esas trombas que causan más daño que beneficio.

Según veo, este tema no interesa comentarlo.

se te ve muy tranquilo ¿donde vives? en un segundo piso quizas ???

Y tú, ¿En la luna nº 1?