Salamanca - Salamanca

Compañeras, compañeros:
Se acerca el primero de Mayo y otra vez saldremos a la calle. Otra vez saldremos a reivindicar este día de lucha para el conjunto de la clase obrera. Pero este año las circunstancias que nos acompañan son aún, si cabe, más sangrantes que años anteriores: más crisis, más paro, más recorte de derechos, más explotación más reforma laboral, más silencio por parte de los sindicatos burocráticos…
Recientemente el Gobierno ha puesto sobre la mesa un nuevo proyecto de Reforma Laboral en el que como siempre los trabajadores y trabajadoras salimos mal parados. Pretenden modificar los modelos de contratación con el consiguiente aumento de la inestabilidad y temporalidad, abaratamiento del despido, aumento de la edad de jubilación…
¿Para cuando una Reforma Empresarial? Una reforma que acabe con los destajos y las horas extras, en la mayoría de ocasiones pagadas “en sobre” de las cuales obtienen gran beneficio y contribuyen a generar más paro.
Una reforma que acabe con los contratos fraudulentos de eventualidad, de obra y servicio, de prácticas y formación que solo contribuyen a la inestabilidad.
Una reforma mediante la cual cumplan algún convenio de los que firman y que incumplen reiteradamente con el beneplácito de “sindicatos oficiales”.
Ellos se han enriquecido y han provocado una crisis económica que nosotras/os padecemos.
Y ante esto ¿Qué nos queda a l*s trabajadoras/es?
Nos queda el retorno a un verdadero sindicalismo, un modelo distinto del actual, en el que decidamos nosotros en asambleas, sin elecciones sindicales ni comités de empresa que defienden eso, los intereses de las empresas. Nadie trabaja por nosotros, que nadie decida por nosotros.
Un sindicalismo sin liberados, profesionales del sindicalismo, entes ajenos a la realidad de los tajos, que en la mayoría de los casos buscan un inmediato beneficio personal. Se lucha para vivir, no se vive de la Lucha.
Un sindicalismo sin jerarquías; independiente de todo poder político, que no reciba subvenciones y que no se centre en mendigar mayores migajas sino en luchar por nuestra dignidad como trabajadoras y trabajadores y encaminado hacia una transformación social en clave de justicia e igualdad.
Ese sindicato existe. Se llama CNT.