Ituero de Azaba - Salamanca

Hace algún tiempo atrás, leí un libro que comparaba la vida con un viaje en tren.

La vida no es mas que un viaje por tren: repleto de embarques y desembarques, salpicado de accidentes, sorpresas agradables en algunos embarques y profundas tristezas en otros.

Al nacer, me subí en el tren y me encontre con unas personas las cuales creí que siempre estarían conmigo en este viaje: mis padres.

Lamentablemente la verdad es otra.

Ella hace tiempo desembarco y el se bajara en alguna estación dejandome huérfana de su cariño, amistad y su compañia irremplazable. No obstante esto no impide que se suban otras personas que serán muy especiales para mi.

Llego mi hermano, mis amig@s y llegaste tú.

Tú has sido parte de mi viaje, y al bajar has dejado una añoranza permanente. Pero me aferro a la esperanza de que en algún momento, llegaré a la estación principal y tendré la gran emoción de verte llegar con un equipaje que no tenías cuando embarcaste.

Lo que me hará feliz, será pensar que colaboré con que el equipaje creciera y se hiciera valioso.

Tu estancia en el tren ha valido la pena, tu asiento ha dejado añoranza y lindos recuerdos a los que en el viaje aun permanecemos.

Dentro de mi te has quedado, de una forma muy presente y te echo mucho de menos.


Tu ¨chica del norte¨, te quiere y no te olvida