En memoria de una vieja burrita Unos hombres escriben libros y dedican poesias a un animal, noble e indefenso, como es el burro, otros en cambio, lo explotan, lo utilizan y maltratan hasta la extenuación, cuando ya no les sirve, cuando ya no puede cargar y deja de ser uma mera herramienta, cuando se convierte en un trasto viejo e inservible, entonces lo abandonan, lo dejan solo, viejo y enfermo. Unos se despeñan, despues de vagar desorientados, enfermos y desnutridos, otros mueren de hambre al no poder alimentarse y otros acaban en manos de desaprensivos, alimañas de dos patas que disfrutan haciendo daño y que sin motivo alguno, solo por diversión, se lian a palos con un animal viejo, enfermo e indefenso, al cual apalean hasta la muerte. ¿Que clase de malnacido puede hacer una cosa asi? Esto que cuento, viene al caso, porque en Marín, esto sucede a menudo, se encuentran muchos burros muertos, que previamente han sido abandonados por sus desalmados dueños y se apaleo a una viejita burra que aparecio por esos lares y que un buen hombre adopto, para cuidarla y darle una buena vida, merecida, despues de una dura vida de trabajo y a la que unos canallas, sádicos y salvajes mataron a sangre fria, de la forma mas cobarde y cruel. Yo nunca he estado en Marín, y lo unico que sabia de ese concello es, que es un pueblo de la costa de Pontevedra, ahora inevitablemente, cuando oiga el nombre de Marín, lo que me vendra a la mente sera, que en ese lugar se matan impunemente a los burros, se les maltrata y abandona y me imagino que el resto de animales no seran mejor tratados que los burros, sabiendo lo que algunos energumenos de alli son capaces de hacer con total impunidad. Desde este foro, quiero hacer un homenaje a esa pobre burrita, que no hizo daño a nadie y fue masacrada despiadadamente por unos desalmados y hago extensivo el homenaje a los pocos burros que quedan, porque estan en vias de extinción y si no se hace nada para evitarlo, su exterminio sera un hecho en pocos años. Tengo la esperanza de que no todo el mundo sea asi en ese concello y que denuncien a los culpables de tan cobarde acto, que no permitan que el buen nombre de su pueblo, sea manchado, por gentuza de esa calaña. Para terminar pego aqui debajo, un pedacito de la gran obra de Juan Ramon Jimenez "Platero y yo" en la que describia al pequeño burrito Platero. Platero es pequeño, peludo, suave; tan blando por fuera, que se diría todo de algodón, que no lleva huesos. Sólo los espejos de azabache de sus ojos son duros cual dos escarabajos de cristal negro. Lo dejo suelto y se va al prado, y acaricia tibiamente con su hocico, rozándolas apenas, las florecillas rosas, celestes y gualdas... Lo llamo dulcemente: "¿Platero?", y viene a mí con un trotecillo alegre que parece que se ríe, en no sé qué cascabeleo ideal... Come cuanto le doy. Le gustan las naranjas mandarinas, las uvas moscateles, todas de ámbar; los higos morados, con su cristalina gotita de miel... Es tierno y mimoso igual que un niño, que una niña...; pero fuerte y seco por dentro, como de piedra... Cuando paso sobre él, los domingos, por las últimas callejas del pueblo, los hombres del campo, vestidos de limpio y despaciosos, se quedan mirándolo: — Tiene acero... Tiene acero. Acero y plata de luna, al mismo tiempo.
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