Valentín - Murcia

Pongamos el supuesto de que esta gazeta ataca continuamente al alcalde de Gibraltar, con motivos, y el alcalde ataca a la gazeta y la acusa de atacar a Gibraltar.

Gibraltar cambia de alcalde y la paz entre la gazeta y el alcalde llega, paralelamente a la publicidad que el alcalde contrata en la gazeta. Son casualidades, no quiere decir que la paz se compre con dinero, ojo.

Esto es de lo que continuamente se acusa a los grandes diarios españoles, que no hablan mucho de las electricas, bancos, etc... dado que estas empresas compran espacios publicitarios a toda pagina.

Se compra el silencio? quien sabe.

La cosa es que la gazeta denunciaba con el primer alcalde los chanchullos economicos ferroviarios y con el segundo alcalde les falta palparse el ano con la punta de la nariz.