Moratalla - Murcia

Ya ha llovido mucho desde que los maestros colocaban, como castigo por no estudiar o comportarse mal, un libro en cada mano, libros que debíamos sostener en un precario equilibrio con los brazos en cruz; o ese otro que consistía en poner al alumno revoltoso de rodillas sobre unos pocos garbanzos que el hambre hacía que poco a poco pasasen de las rodillas a nuestro desconsolado estómago, lo cual desembocaba en un buen coscorrón. Sin embargo, a pesar de los cambios tecnológicos y de los avances pedagógicos aún no hemos logrado dar con la “tecla”.

El mayor activo que tiene una sociedad está en la capacidad, la iniciativa y la imaginación de la juventud. Pero todos estos valores los anula un sistema educativo impropio de un país avanzado. Ellos son muy jóvenes para decidir sobre su futuro, y la maquinaria educativa (padres, profesores y legislación) no sabe encontrar sus verdaderas actitudes. El joven carente de perspectivas y de oportunidades, se limita a vegetar, ya que somos incapaces de ofrecerle oportunidades. Les encasillamos, bautizamos sus tendencias y limitamos sus iniciativas. Les hemos convertido en el problema desviando hacia ellos las culpas de nuestra propia impotencia. Y nosotros somos los verdaderos culpables; padres, centros y profesores, atrapados por leyes educativas ideadas por incapaces legisladores. No es de extrañar que nuestros hijos se refugien en botellones y abandonen su voluntad al alcohol y al consumo de drogas, que se borren, en definitiva, de un mundo que no es cosa suya. Se aburren con todo, pues todo lo tienen, y buscan divertirse de la manera más fácil y también de la más económica.

La oferta cultural es cara, con lo que cuesta una entrada de cine para dos, se colocan diez, y por el precio de un refresco en un local se compran una caja de cervezas; puede ser que suspendan matemáticas, pero saben sumar.

Macho, preséntate a las elecciones que te voto aunque vayas en la candidatura del PSOE.

Abundio eso lo llevo diciendo desde tiempos inmemoriales.

¡TIRANDO A DAR PA ALCALDE!, HOSTIS.

Pues porque sé que los hombres no lloran (y los jóvenes tampoco)... si no ahora mismo estaría llorando a lágrima viva.
¿Tirando, en serio crees que no es culpa nuestra?, ¿que después de media vida pensando y haciéndonos pensar que no somos mas que unos parásitos inútiles, los despojos de nuestra propia falta de imaginación, superación, inventiva, esfuerzo, sensatez, etc, etc, etc, etc, etc, etc, etc... ahora resulta que somos inocentes de todos (o casi todos) los cargos?...
Permíteme que en nombre de todos los jóvenes te diga: ¡TE QUEREMOS TIRANDO, TE QUEREMOS!... y que voy a enseñarle a mis padres tu reflexión a ver si viniendo de boca de un adulto (eres adulto ¿no?) creen algunas de las cosas que yo he intentado explicarles en alguna ocasión sin ningún exito ni credibilidad...

Es cierto que los jóvenes tenemos miles de defectos y que muchas de nuestras conductas no tienen defensa ni justificación posible, pero me alegro de que alguien sea capaz de pensar que no toda la culpa es nuestra, que hay alguna posibilidad de que seamos el resultado de algo que no funciona como debiera y que sería bueno empezar a trabajar en ese sentido.

Pero hay algo en lo que no estás del todo acertado, no te creas que nos salen tan baratas nuestras juergas... No te puedes imaginar lo que cuestan 10 euros de polen... y con eso no hay para toda la "colmena". JUAJUAJUA, esto último es broma, (o casi).

Y a ver si fuera posible que no nos dejes abandonados tanto tiempo...

LOS JOVENES DE HOY EN DIA.Les Luthiers

Les Luthiers, geniales como siempre.

Muy bien Tirando, pero no puedo estar deacuerdo en una cosa, los jóvenes, jamás en nuestra historia, han tenido más y mejores oportunidades y mejores perspectivas que en estos años... ¿quién limita sus iniciativas? nunca se han dedicado tantos recursos a la educación, hay menos alumnos por aula, mejores instalaciónes, pistas deportivas, ordenadores, internet, calefacción, oferta educativa para aburrir... así que, si no estudian quizas sea porque... ¿no quieren?

Bien Tirando-a-dar, has esbozado el problema con los tópicos de siempre cargando las tintas sobre los padres, los educadores, el sistema en general... No dudo que tengas razón en algunas cosas, pero ahora, te pediría que hablaras un poco de la responsabilidad de los propios jóvenes, si es que crees que deben tener alguna responsabilidad sobre su propio futuro...

Pues hasta que he leído el comentario de Tirando yo siempre había pensado que el tópico era justo lo contrario... vamos, que las tintas (como tú dices) siempre se cargaban contra los jóvenes.
Pero bueno, puedes seguir esperando que un chaval de 16, 17, 18... o incluso algún añico más, se preocupe por él mismo de su futuro con vistas más allá del próximo fin de semana... que vas apañao.

Chimes, parafraseandote... cuando dices que "jamás en nuestra historia los jóvenes han tenido tantas y mejores oportunidades y perspectivas que en estos años, que nunca se han dedicado tantos recursos a la educación...". Lo único que se me ocurre pensar es que debió de haber unos tiempos verdaderamente pésimos, pero que sepas que por mucho que hayan mejorado... no es que crea que son suficientes tales mejoras, es que incluso me atrevería a decir que todavía son muy deficientes.
Es posible que las aulas tengan menos alumnos que antaño, pero eso no quiere decir que no estén masificadas.
Las ayudas económicas para los estudios (las becas de toda la vida), son infinitamente inferiores a las de cualquier país europeo, los máster valen un huevo, y la verdad... no sé cuáles son esas perspectivas que les esperan a los miles de licenciados que acaban cada año una carrera y vuelven a casa de sus padres sin trabajo y sin forma humana de encontrarlo en sus respectivas especialidades...
Los profesores han perdido toda o gran parte de su autoridad con el permiso y beneplácito de padres y administraciones (y con esto no digo ni por asomo que deban volver los garbanzos bajo las rodillas que nos ha contado Tirando)...

Me gustaría que viérais a chicos de otras nacionalidades que vienen a estudiar a España y que con 19-20 años ya hablan perfectamente tres o cuatro idiomas cuando nosotros ni siquiera hemos aprendido todavía a chapurrear y escribir en el nuestro... A mí se me cae la baba...
Supongo que los jóvenes extranjeros son más responsables que nosotros.

La única asignatura pendiente que hay es la propia educación, sus cimientos, los fundamentos sobres los que se erige, las propias raices que la anclan a la sociedad.

De nada vale hechar la culpa a los jóvenes, pues ellos son el mero reflejo de la situación actual que viven, tanto desde el punto de vista educacional como social y familiar, pues desde la sociedad en que se desarrolla el individuo se han perdido todos los principios básicos, los cuales se debe de recordar que no entienden de modas, ya que la educación y el respeto es algo atemporal. Por otro lado y por sino fuera suficiente, existen multitud de padres cuya convicción y base de una buena instrucción a su prole consiste en comprarle todos aquellos caprichos que deseen, compensando de esta manera la falta de atención prestada.

Posiblemente deberíamos también de mirarnos un poco el ombligo y asimilar que también somos frutos de la denominada como sociedad de bienestar que hemos creado, alzada en torno "a quién tiene más".

Por último, en contradicción con xapulincolorado no creo que los jóvenes extranjeros sean más responables que nosotros, a la vista están las fiestas erasmus, simplemente según yo he podido observar a lo largo de mi trayectoría es que poseen más oportunidades y lo que es más importante, información.

Un saludo y a intentar mejorar.

No Trieta, no estás en contradicción conmigo, lo que pasa es que a veces olvido que en un medio de comunicación escrito como es el foro, no siempre el emisor es capaz de hacer llegar la verdadera intención de sus palabras... En este caso en concreto, cuando he dicho que los jóvenes europeos son más responsables que nosotros, pretendía dar a entender que eso no es así, pero que de alguna manera sí que están mucho mejor preparados que nosotros pese a ser igual de "gamberros".

Como muy bien dices... Un saludo y a intentar mejorar.

Odoacro, por supuesto que los jóvenes tienen una parte de responsabilidad en sus actos, pero a mi me gusta ir al fondo del problema y creo que en ese fondo está la responsabilidad y el ejemplo de los adultos. La falta de modelos para los jóvenes es un argumento que me parece determinante: ¿los mayores que también se emborrachan y terminan peleándose a la salida de un restaurante pueden ser modelo de alguien o de algo? ¿O esos padres que cuando están en casa golpean y deshacen la paz familiar, o esos otros aficionados violentos de los campos de fútbol?. Vivimos en la misma casa, pero no estamos lo suficientemente cerca de nuestros hijos, y ellos quieren tenernos a su lado, desean unos padres que los comprendan, que los quieran, aún cuando ellos no lo merezcan. Se sabe que no siempre nos reciben bien, que a veces nos ven como gente de otro tiempo, pero nos echan en falta, necesitan alguien que se interese por ellos, y al mismo tiempo hay que saber poner límites, ser exigentes, ser claros en las condiciones. Lo necesitan, lo piden. Quieren que alguien les oriente sobre lo que está bien o mal. Quieren que los padres les dediquen tiempo, en cantidad y calidad. Debemos atrevernos a decir lo que está bien y lo que está mal. Que pegar está mal, que el alcohol o las drogas no son el camino, que nada se consigue sin esfuerzo, y sobre todo hablar de las consecuencias. Hay que dar líneas claras de comportamiento, valores, normas. Al mismo tiempo hay que admitir que es difícil ser padre de jóvenes y por ello debemos ayudarnos entre nosotros, compartir experiencias y dificultades. Todo esto también lo podemos extrapolar a la educación porque como adultos no hemos sido capaces de ofrecer un modelo. Somos nosotros los que controlamos los medios de producción, la televisión, la industria de los videojuegos, etc. y ¿qué les ofrecemos? contratos basura, programas de televisión que pugnan por ver quien insulta más y mejor, y violencia, mucha violencia, sería una falacia decir que ellos son los responsables de la sociedad que nosotros controlamos y ofrecemos envuelta en un bonito y superficial papel de regalo. Y con la educación pasa tres cuartos de lo mismo; nos interesan los resultados pero no prestamos atención al cómo, despojamos de autoridad a los maestros y hacemos programas de estudio acomodados a la incompetencia de los legisladores; sin duda los jóvenes puede que sean vagos, irresponsables y egoístas, pero son el resultado de una sociedad vaga, irresponsable y egoísta.

¡Jo tío!, me has llegao al alma.

¿Me adoptas?, eso sí, me tendrías que comprar un buga...

Estamos en un momento educativo de crisis si entendemos por crisis un momento decisivo de un asunto grave y de consecuencias importantes. La escuela ya no es lo que era, hace un tiempo el alumno entraba en un aula y se sumergía en un mundo de conocimiento, disponía de un mapa mundi, esqueletos, microscopios, minerales….; todo esto ya no es suficiente hoy en día; el niño encuentra estímulos más atractivos fuera del aula que dentro de ella, Internet ,televisión ,nuevas tecnologías en general ,nos presentan un mundo de conocimientos impensable hasta hace unos pocos años y todo eso lo tiene el niño sin necesidad de salir de su casa. Por todo esto la escuela debe volver a ser atractiva para el niño, debe motivarle y ofrecerle los conocimientos que demanda. Una solución sería que el estado tuviese claros los objetivos educativos y que estos se mantuvieran, independientemente de quien gobernase.

Yo entiendo perfectamente que ser padres de un adolescente no debe de ser tarea fácil... que de un año para otro (y sin intención de generalizar), tu niñito del alma se convierte de pronto en un ser egoista, irreflexivo, autoritario..., alguien que es capaz de poner en duda si realmente es hijo tuyo o ha sido engendrado por el mismísimo Príncipe de las Tinieblas... Pero eso no es nada nuevo, es algo que cualquier adulto ya debe (o debería) tener muy claro que va a ocurrir si se es padre. Lo curioso es que todavía haya gente a la que le pille por sorpresa y que después de tanto tiempo, la sociedad siga arrastrando el mismo problema, con las mismas quejas y escasez de soluciones... Aunque más que escasez de soluciones me atrevo a decir que también hay cierto grado de irresponsabilidad por parte de los padres... Cuando una pareja va a tener su primer niño, nunca falta en casa bibliografía al respecto, se asisten a clases de preparación al parto, se prepara su ropita y demás enseres con mucha antelación... todo correcto. Bien, pues la misma oferta educativa se encuentra también para padres de adolescentes... ¿pero se usa?.

Nueve ha dicho una cosa que me parece muy interesante: "el niño encuentra estímulos más atractivos fuera del aula que dentro de ella..."
Eso es una verdad como la copa de un pino y una de las principales razones de fracaso escolar (por lo menos a mi modo de ver). Es fundamental equiparar lo más posible esos estímulos o por lo menos que no se accedan a ellos sin haber cumplido una serie de objetivos... Me explico:
Todos sabemos por propia experiencia que la cabeza de un adolescente está en una escooter, un coche, una play, el aumento de tamaño dentro del escote de la Mari...
¿Qué pasaría si los carnés de conducir (con sus práticas correspondientes) sólo se pudiesen conseguir en los colegios y con un expediente académico decente (algo así como los créditos universitarios)?... Obviamente esto es sólo un ejemplo disparatado, pero seguro que más de uno se pondría las pilas si quiere conducir su flamante Suzuki Katana...

Y por favor, si a alguien se le ocurre la manera de acceder al interior del escote de la Mari, que me lo comunique ipso facto... le estaré eternamente agradecido.

Los comentarios que habéis hecho sobre la situación de la juventud actual son bastante atinados. Pero si un chaval se asoma por este foro (y me imagino que serán muchos los que lo harán) puede sacar la conclusión de que está envuelto en un ambiente que lo aboca a un futuro sin esperanza, y de alguna manera desistir de su responsabilidad de abrirse camino, pese a todo. Porque salida la hay. Por muy complicada que sea, también encontramos jóvenes que se labran un camino y contribuyen a mejorar esto.