Mollina - Malaga

La lucidez, la memoria viva de los últimos cien años de la historia de España, se apagó para siempre.

Palabras mayúsculas para un hombre mayúsculo, Santiago Carrillo. El hombre que durante toda su vida fue un icono de la izquierda, el histórico líder del Partido Comunista de España (PCE), el dirigente que desde la clandestinidad abanderó la lucha contra el franquismo, el político imprescindible de la Transición, murió esta tarde en Madrid. A los 97 años. Sobre las 17.30 horas. Y con los suyos, con su familia, en su casa de la capital madrileña.

Nunca perdió su extraordinaria lucidez, ni tampoco dejó nunca de hacer política, pero su salud sí se fue desgastando. Especialmente en los últimos meses, cuando sufrió un ictus y cuando fue intervenido de apendicitis. Hasta que su pulso se agotó.

Mi más sincero pésame a la familia y al Partido Comunista.

Santiago Carrillo

Hoy creo en todo lo que creía a los veinte años y tengo, también en esencia, las mismas ilusiones de entonces, pienso que con mayor fundamento todavía. Me producen pena y decepción los que las han perdido.

Santiago Carrillo ha muerto al no poder soportar el pacto de Mollina entre IU y PP.

Mi más sincero pésame, hoy la izquierda ha perdido un gran político.

Que bueno desde el pacto el pobre no levanto cabeza

Borrado por Foro-ciudad.com

Borrado por un Moderador.

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Santiago Carrillo era un hombre de Estado. Creo que es lo mejor que se puede decir de una persona que dedicó gran parte de su vida a la actividad política, sabiendo siempre estar por encima de ella para servir a los intereses de la patria. Una patria que dejó atrás muchos más años de los que hubiese querido y de los que imaginó cuando cruzó la frontera con los derrotados de la guerra civil.

La vida del exiliado, a la que fueron condenados tantos y tantos españoles, no fue un impedimento para que su discurso de la reconciliación nacional calase hondo en este país, hasta terminar desembocando en nuestra transición política desde la dictadura a una prometedora democracia. A él le debemos ese paso adelante en el vacío que significaba abandonar las trincheras propias para elevar la mirada y poner el foco medio siglo más adelante. Para trabajar para la próxima generación, sabiendo que el mejor legado que podía dejar era un país alejado de los extremismos que en ese mismo siglo provocaron un conflicto que debe quedar siempre en nuestra memoria. Precisamente en esos extremos habitaron y habitan sus enemigos más acérrimos, que lo son también de la libertad y la democracia.

En mi responsabilidad como Secretario General de las Juventudes Socialistas de España, allá por el año 1992, tuve la oportunidad de vivir con Santiago un proceso muy parecido al que le llevó a él a dirigir las Juventudes Socialistas Unificadas en tiempos de la Guerra Civil. Si en aquellos años terribles jóvenes socialistas y comunistas se unieron para hacer frente juntos al enemigo fascista, durante la década de los noventa la integración de la formación política que fundó, el Partido de los Trabajadores de España - Unidad Comunista, en el PSOE, nos llevó a los jóvenes, y a un Carrillo joven de espíritu, a firmar y conversar sobre cómo la historia se repite, incluso algunas veces para bien, en una conocida taberna del barrio madrileño de Cuatro Caminos. Estaba ya alejado del Partido Comunista español, con el que sus diferencias eran públicas, como lo fueron las de notables socialistas históricos que no olvidaban sus rencillas con el viejo líder.

Y es que nunca tuvo problemas Santiago Carrillo para expresar alto y claro sus dudas y cambios de postura, cosa impensable en la política que conocemos hoy. Por eso condenó sin miramientos la entrada de los tanques soviéticos en Praga, e intentó evolucionar su partido hacia lo que se dio en llamar eurocomunismo. Más pragmático, menos utópico, pero con el mismo compromiso social y político de siempre.

Al conocerse la noticia de su muerte, el Congreso de los Diputados le ha rendido un sentido homenaje en forma de aplauso unánime. Ese mismo hemiciclo en el que aguantó firme y sin agacharse los tiros de los golpistas un día de febrero. Entró y salió de España durante muchos años ayudado de una peluca para despistar a los que querían encerrarlo por sus ideas, y hoy toda España se descubre ante el político que siempre quiso ser ingeniero de caminos, canales y puertos. No le hizo falta la carrera para construir los puentes que hoy entrelazan las estructuras más profundas de nuestra democracia.

José María Crespo.
Público.es

Cascajales, te pediría que no me catalogues a la ligera ni me compares sin sentido con nadie de este foro puesto que no me conoces. Solo he pretendido hacer un sencillo homenaje, sin más, a mi manera; si no lo entiendes así, bueno, qué le vamos a hacer, no pasa nada.

Paquichocho, para una persona que hace tres día me tachó de "espabilao", tu comentario, conociéndote como ya te conocemos, resulta ridículo. Mira, hija, en tu vida privada seguro que eres la mejor persona del mundo, no lo juzgo y puede hasta que sea así. Pero por los comentarios que haces en este foro, por la forma en la que te expresas y por lo paquichocha que eres, por supuesto que te catalogo, como tu lo haces conmigo y con los demás: Buenos y malos, que es lo que a ti y a la gente como tú, os gusta.

Vaya por delante mi respeto para Santiago Carrillo, asimismo ofresco mis condolencias a su familia. El mérito que le reconozco, no es otro que, cuando volvió del exilio, oponiéndose a su propio partido, abandonó la tesis de la dictadura comunista, que conocía muy bien, facilitando con ello la llegada de la democracia a España.
Eso mismo hicieron otros dirigentes que venían de la dictadura de Franco y optaron por la democracía: Suárez, Fraga, Herrero de Miñón, etc.,incluso el propio Rey Don Juan Carlos, que fue educado por Franco y nada más morir éste, con su actitud y comportamiento también facilitó la llegada de la democracia.
Aunque lo pasado, pasado está, hay que decir que Santiago Carrillo hasta cumplidos los 50 años de edad, siempre luchó en defensa de la dictadura comunista. Dictadura tan excecrable como haya podido ser la dictadura militar de Franco.

Perdonad que os exponga mi opinión. Los dirigentes políticos de la Transición tuvieron el enorme acierto de abandonar parcelas de su ideario en beneficio de la reconciliación y la pacífica convivencia del pueblo español, que vivió una etapa de su historia porque asi le tocó vivirla, por cuya razón nadie estaba autorizado a revivir en ese pueblo español de 1975 los avatares de lamentables etapas ya superadas. Todo ello hizo posible que emprendiéramos una etapa democrática que nos ha traido hasta donde estamos. El balance histórico, como podemos observar, ha sido positivo.
Santiago Carrillo fue un protagonista más de aquella Transición y merece el reconocimiento de los españoles que la vivimos. A un lado quedan las sombras que los historiadores aportan sobre su trayectoria de juventud en la guerra civil y en el exilio comunista. Pero eso queda para la historia, ahora nos queda ver esta España del siglo XXI, tan maltratada por la crisis y los políticos actuales.
Hay mucha corrupción, hay mucho egoísmo, hay mucho descaro.
Y tenemos que plantarnos y ver hasta dónde nos quieren llevar algunos insensatos. Como esos nazionalistas de Cataluña, que, no contentos con haber arruinado a sus ciudadanos y haber contraido deudas descomuinales para sus delirios identitarios, ahora amenazan al resto de los españoles con hacerse independientes, si no se les dan cinco mil millones que necesitan y que dicen que son suyos. Pero ¿de qué van esos trielros?. Si desde hace ya casi más de un siglo han acudido alli andaluces y españoles de otras regiones para trabajar, generar riqueza, engendrar hijios catalanes, consumir, en suma, hacer grande y próspera a Cataluña... ¿Así nos lo pagan?. Espero que en las proximas elecciones los españoles catalanes muchos de elleos descendientes de andaluces sepan utilizar su voto con inteligencia y darle un soberano soplamocos en las urnas a ese señor Mas que debe quedarse en MENOS.
Bueno, un saludo a todos.
Y ahora más que nunca debe salirnos del alma ese grito que lo significa todo:

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!!!!

Para enmarcarlo. Te doy un sobresaliente José de la Roda. España se merece nuestro sacrificio, como lo hicieron nuestros padres y abuelos.
Políticos inteligentes y honrados como fueron la mayoría de los de la transición ahora no existen. Solo tenemos una camada de políticos de tercera que solo buscan su propio interés personal y partidista.
¿Como es posible que socialistas y populares no se pongan de acuerdo, para plantarle cara a los nacionalistas y sentarlos de culo de una vez por todas que, con la que está cayendo, solo buscan el desmembramiento de España en beneficio propio y de los suyos, como por ejemplo Ibarreche, Arturo March, Carol Rovira (nacido en Huesca e hijo de Guardia Civil)y otros que por mandar se echan en sus brazos como hizo el cordobés Montilla, sin importarle para nada Cataluña ni los catalanes, llevándola a la ruína más profunda?
¿Como es posible que para políticos de esa calaña no haya leyes que los castigue como se merecen? Saludos José de la Roda.

Amigo larra2002: claro que hay leyes y ya se están empezando a poner en marcha. Por lo prontro, al señoret Artur Mas ya le ha parado los pies el señor Rajoy en su entrevista de ayer en la Moncloa. Y los partidos empiezan a cerrar filas y a ponerse en posición de alerta. El artículo 155 de la Constitución empieza a desplegar las alas, por si hay que aplicarlo.
De todas maneras, parece que el mentón de Artur Mas se ha encogido. Recuerdo la anécdota de otras elecciones (creo que las del 2006) en las que el señor Mas repartió por todos los buzones un acta notarial en la que prometía que jamás pactaría con el PP. En aquellas elecciones Montilla y su tripartito le levantaron la camisa y le arrebataron la presidencia de la Gweneralidad. Y cuatro años más tarde, Mas tuvo que aceptar los votos del PP catalán para llegar a presidente, porque no logró mayoría absoluta. Ese detalle demuestra la catadura del fulano ese del mentón mussoliniano.