Jimera de Líbar - Malaga

La infancia constituye nuestra patria.
Puede ser ese paraiso que todos creemos haber perdido, el edén íntimo del que un día fuimos expulsados a un mundo donde nada volverá a significar lo que significaba, donde la realidad es capaz de descargar su peso hasta ahogarnos. Pero la infancia es también el pozo oscuro de los secretos inconfesables, de los miedos sin rostro, el infierno pétreo de la culpa del que emergen los adultos emocionalmente inválidos.

P.Giordano.

RECUERDOS

JIMERA
recuerdos
en sus calles, olor a pan nuevo
. . . y soledad, siempre soledad.

Jimera
recuerdos
de humo y retamas
. . . y soledad, siempre soledad.

Jimera
recuerdos
Setiembre, olor a tierra mojada
. . . y soledad, siempre soledad.

Jimera
recuerdos
a frio y pies desnudos
. . . y soledad, siempre soledad.

Jimera
recuerdos
a piaras de cabras y burros
. . . y soledad, siempre soledad.

Jimera
recuerdos
a cirios y madalenas
. . . y soledad, siempre soledad.

Jimera
recuerdos
a sudores en la era
. . . y soledad, siempre soledad.

Jimera
recuerdos
de. . . soledad
y siempre, siempre SOLEDAD.

FERIA DE SEPTIEMBRE
Ha pasado un dia de la fiesta, está nublado y triste, huele a tierra y pasto mojado. En la feria de Septiembre siempre llueve.
Nos hemos levantado temprano para ir a coger chumbos y de paso ir a poner unas cuantas "perchas"; aún nos rezumban en los oidos el sonido de la música y el alboroto, estamos como abombados y pensando que la escuela ya está a la vuelta de la esquina.
Con nostalgia empezamos a recordar los dias pasados, mientras observamos, a lo lejos, por la "cañá real" que suben reatas de "ganao", van a la feria de Ronda. Ahora continuan sin parar, pero hace pocos dias algunos se paraban en la "asa del Conchas", era la feria del "ganao" de Jimera.
Los hombres del pueblo iban con sus "bestias"; hablaban, gesticulaban, discutian acaloradamente. "Papà ¿se están peleando? en esas el Nene los obliga a darse la mano. Nó, hijo, están cerrando un "trato" con un apretón de manos y después iran a celebrarlo a la "Bodega" con un "montilla" o unas cervezas".
Antes que los "marchantes" aparecian los turroneros ¡que delicia! es la única fecha en que podemos comerlo y ya disfrutamos con la instalación del puesto y muchos sólo con eso. Comicalla y Borrego, uno en la esquina, el otro a un lado de la puerta de la Botica. Los puestos son de lona, adornados con turrones, garbanzos, peladillas y bolsas de muchos colores.
En la puerta de Anita la de Don José, un tirapichón; en el otro lado de la Botica, una tómbola, hecha con lonas y "aelfas"; en la avenida, las cunitas y en al "Plao", el carro de las "patás".
Bajo los arcos del Ayuntamiento, hecha de lonas y cañas y adornada con "aelfas" en flor: la marquesina, con su ambigú, su mostrador largo de Frasquita la Tienda, la estantería de Inesita, a medio llenar, con botellas de vino, cervezas, refrescos "carabina" y licores (coñac, aguardiente y el más exótico:licor de café).
Por la mañana, lo primero, diana floreada y a comer churros de Diego, después, en la marquesina,rodeados por la chavaleria y bajo el control de Juan Monte, la Banda Pavía ameniza con pasadobles la plaza, mientras tanto otros, el primer día de feria, bajamos a la Estación para recibir y acompañar a los músicos en la subida al pueblo a lomos de mulos y burros, ellos y sus bártulos. Así como las barras de nieve para las cervezas y los "helaos" de Juan Miguel.
Por la tarde: cucañas, carreras de sacos y globos de papel que subian a las estrellas. Lo que más nos ha gustado: las carreras de "cintas". D. Benigno y su yegua alazana ¡la más bonita de la comarca!.
Por el pueblo, el "Chato", ahora sin su famosa gabardina, anuncia las películas del Cine Bar La Gloria, o a "Sardiguera" en el Rancho Grande.
Por fín, los músicos, Vicente Viñolo, con su diente de oro. Nosotros, de pié, sentados en las sillas de la plaza o encima de la farola, oimos absortos aquellos hombres, uno con un violón muy grande, otros con trompetas y trombones (cacharros muy "retorcios"), sus canciones de moda: "Adelita", "Cheli, yo te quiero", "Gibraltareña", "La Linea de la Concepción", "La Cucaracha", etc., hasta que nos llamaban a la casa o el sueño nos rendía, que no pasaba mucho más allá de las doce o la una.
Al día siguiente: "el gran día", ropa nueva o al menos bien limpia y planchada y el que podía zapatitos nuevos, los reservados para ferias y fiestas.
Subida de la Virgen desde la Ermita a orillas del rio, acompañada del gentía y gran caballeria. Cohetes y más cohetes, sin miedo, no hay peligro de incendio, los campos están bien limpios y bien cuidados. Arriba nos espera "El Niño", y más cohetes y volteo de campanas. Tamb ien nos espera Isabelita la de la plaza con sus barquillos de canela, Lucía con las pipas y "altamuces". Los mayores, después de la procesión, a bailar, a hacerse una foto en la vespa de Pepe el fotógrafo o a tomarse algo en la marquesina, en el bar de Frasquito Manuela o al Rancho Grande o al Café Bar la Gloria o al bar de anolo el del Café.
El último día: procesión por la mañana y después, almendrajos y zapatitos de caramelo que nos vende Dolores, la de Canacho.
En mi casa comida especial: Pollo, melón y gaseosa "La Revoltosa"
En la calle, más música, más baile y más cohetes. Por la tarde, otra vez, baile y concursos: baile de las cartas, de la escoba, de la silla y al final de la noche: fuegos artificiales en la puerta de la iglesia, entretanto Tobalito nos deleitaba el paladar con sus dulces de Harillo.
¡Que Feria más bonita! y cuanto nos hemos divertido, aunque mis padres me hayan zurrado por romper los patalones nuevos y rozar los zapatos.
Estamos deseando que llegue otra vez.

Enhorabuena, preciosa narración de tus recuerdos y por lo que me han contado mis padres el de muchos jimeranos/as.
Un texto con mucho gusto.
Gracias por hacernos pensar en ese pasado rico en momentos y sentimientos.

Muy Bien, pero que muy bien por deleitarnos, por hacernos retroceder en el tiempo al leer estos temas. Ya que he tenido la suerte de vivir algunos de estos lances.

Te doy mi Enhorabuena, aunque no sepamos tu nick, para felicitarte.

Sigue asi amigo.

muy bonito el poema, y no eres de los poetas oficiales de Jimera ¿verdad?

FERIA DE SEPTIEMBRE. Felisitaciones para el autor del poema o narracion o lo que sea porque lo asbordao, es fabuloso y se puede estrapolar a todos los pueblos de la comarca solo hay que cambiar los nombres propios.

No, no soy de los "oficiales" de hecho esta faceta mia no la conocen ni mi propia familia. Gracias.
He abierto esta página para animar a que escriban narraciones, cuentos, poesias, etc. relativas a Jimera, tanto propias como de otros autores, pero,por favor, sin incluir la politica, para eso esta "barreras rotas"

FLORES DE JIMERA

En Jimera hay una casa
en la casa un balcón
y en el balcón una "gitanilla"
que es la dueña de mi corazón.

Y me la quiere robar
un clavel reventón,
la clavellina, celosa,
llora por su amor.

Por la "villa" se enseñorea
una roja buganvilla,
mientras la "pescaera" cuchichea
con su comadre la campanilla.

En el callejón vive una glicinia,
criada con esmero,
como a su propia niña,
por las mujer del cartero.

Un coleo, por la calle Peña,
corteja una margarita,
asomada trás una reja,
con permiso de Rita.

En la plaza, una algarabía,
hoy hay una boda,
los bendice un nieto de Rosalía,
se casan un nardo y una rosa.

Muchas flores las invitadas,
caireles, petunias, azucenas,
trompetas y calas,
en la iglesia "pilistras" y hierbabuena.

Los geraneos juguetones,
colgados de balcones,
asiten como mirones.

Las adelfas bajan al arroyo a lavar,
con lirios, azulete le dan,
la colada sobre romero,
para poderla perfumar.

Un jazmín requiebra una "dama",
en sus amores llenan de fragancia
la noche jimerana.

Flores de Jimera,
que cosa rara,
florecen por primavera.

¿PUEBLO DE LOCOS?

Mañana fria, muy fria, típica mañana de invierno jimerano, se han congelado los charcos en la plaza y el "abrevaero" de la fuente.
Muy temprano, al alba, se oyen voces, carreras y por las esquinas sonar de cencerros y caracolas. Mozos con la cara tiznada de espesa barbas y pobladas cejas, boina metida hasta las orejas, rozando lo esperpéntico, armados con garrotes, corren trás todo lo que se mueve e incluso entrando en las casas por la fuerza. No respetan a nada ni a nadie y al que se resista: a la cárcel.
¿Que pasa?. ¿El pueblo se ha vuelto loco?. ¿Es la guerra?
Nó. Son los Inocentes, mozos llamados a filas. El alcalde le ha entregado la "vara" del pueblo y ese día tienen carta blanca, exigen un impuesto a todo el mundo y el que no pague al "trullo", en los bajos del ayuntamiento, hasta que alguien lo haga por él. A veces ocurre que por su afán recaudatorio dejan sin vigilancia la cárcel, lo que aprovechan otros para abrirla con un cuerno de cabra y los pájaros vuelan dejando el nido vacio.
Las personas mayores, como no pueden correr, invitan de buena gana en sus casa a los Inocentes, dandoles mantecados, rosquillos, "suspiros" (esos eran los únicos dulces de navidad) acompañados de mistela, coñac, anís o lo que caiga. En cierta ocasión, un vecino con guasa, en vez de darle anís les puso en la copa agua de carabaña (liquido espeso y transparente a la vista parecido al anís, pero con sabor a rayos). La cuestión es que cuando el primero lo probó , se calló el muy zocarrón, el segundo también y así sucesivamente hasta el último. Una vez dañada la honra había que compartirla entre todos.
La recaudación del día, para una comilona en "ca" Frasquito Manuela o en el Rancho Grande. La "olla" está vigilada por que corre el riesgo de que algún espabilado gaste una broma, era el día propicio, y se la lleve, como ha ocurrido en otras ocasiones, dejando a los Inocentes sin pluma y cacareando.
Hce poco ha sido Nochebuena, antesw de que el gallo cante en su misa, las pastorales recorren el pueblo cantando villancicos, uno de ellos comienza:"A tu puerta hemos llegado, cuarenta en cuadrilla, si quieres que te cantemos, saca cuarenta sillas" villancico muy gracioso, pués nadie tiene cuarenta sillas, pero los "joios" a pesar de no sacarle las sillas, no se iban, claro, como después venía la invitación, pués cantaban, aunque fuera de pié.
Después de la Misa, viene la Candelaria, en la esquina del "Prao", justo enfrente del colegio.
La Candelaria es una gran fogata, alrededor de la cual se junta el pueblo para cantar, hablar, reir, calentarse y los "chaveas" a fumar cigarrillos de matalahuga (primeros porros) liados con papel de "estrasan", el de liar los "mandaos". ¡¡cogiamos unas "turcas"!!.
El fuego se hace a base de "ramones" de las talas de los olivos, la chiquillería se encarga de ir traerlos y amontonarlos durante varios dias antes y vigilarlos, para que nadie los haga mermar. La misma noche que nadie ose tener haces de leña a la vista, ni siquiera "Mollete", pués le desapareceran, como así ocurrió a un paisano que estando en la hoguera ve venir a unos chavales corriendo arrastrando un haz cogido por una buena cuerda y perseguidos a distancia por una señora gritona. El buen hombre, cuando ve lo que ocurre, se presta a echar una mano a los "zagales": echarlo con "zoga y tó". Gritaba. Una vez hecha la fechoria, se dá la vuelta y con asombro se dá cuenta que la señora, era su señora, la leña, su suya y la "zoga" swu "zoga". Risotadas de todo el mundo y a aguantar burlas y reprimenda. Que le vamos a hacer, es la norma.
Varios dias después viene lo mejor: los Reyes Magos. Vienen sin avisar, no hay cabalgata y traen cocinitas, estuches con lapices de colores, muñecas, pistolas de pasta,casitas, pelotas, caramelos, calcetines. etc., pero nunca lo que uno quiere, aunque hubiese estado colgado dias y dias en la tienda de Alonso o en la Botica.
La mañana de Reyes, todos a la plaza, a enseñar orgullocisimo, lo que han traido, lo que fuera, aunque no lo hayamos pedido. Con las pelotas hay que tener especial cuidado, si se meten en "cá Perniles" o en "Cá Miguel", (ese hombre que no sale nunca,¿por qué será?) la primera vez la devuelven pero después nó. ¿Se las quedaran para sus hijos? ¡¡Pués como se la vea se van a ENTERAR !!

Jimera, esbelta garza,
al Guadiaro asomada
niveo vientre
dorso de plata,
corazón frio
fuego en la mirada,
cielo azul
sobre verde esmeralda.
Amores furtivos
bajo la noche estrellada,
hermosa damisela
que a los suyos
el corazón congela
y al extraño anhela.

TIEMPO DE MADALENAS

¡¡Por fín el sol fuera!! Ya está aquí la primavera después de un largo y crudo invierno. Los campos se llenan de colores, parecen enormes alfombras con diferentes tonalidades de verdes. Amarillean los jérguenes y las retamas.
Todo el mundo a escardar las hazas, a quitar las malas hierbas de los trigales y la cebada.
Mientras en el pueblo otros se afanan en pintar y asear las casas.
Mi madre, junto con otras mujeres han ido al horno con las latas llenas de platillos. ¡¡que buenas están las magdalenas!!
Es Semana Santa y no sé por qué razón no se puede comer carne, sólo potajes, arroz, bacalao (frito, con tomate, en pavias o en tortillitas de acelgas) y barbos en adobo (Carrillos el viejo, el de la "posá" es un especialista en cogerlos). A mí no me gustan mucho, pero bueno, después lo compensamos con el arroz con leche o las natillas y "pá" merendar roscones y hojuelas en miel ¡¡humm, que ricos!!
El Domingo de Ramos hay una procesión por la mañana, la gente llevan ramitas de olivo y hay que estrenar algo. Yo, unos calcetines y unos zapatos de la marca "gorila", con ellos venía en la caja una pelotita verde para jugar en la plaza, aunque los niños ahora prefieren jugar al palicache, o a "me las estiro", o al "perro", o a "alerta está" y las niñas al diabolo y la rayuela.
El Jueves por la tarde, sale la procesión del "crucificao". La componen primero tres monaguillos, vestidos con sotana y roquete, portando una cruz y dos cirios sobre soportes plateados, después va la chiquillería seguida de las mujeres, a continuación el Santo sobre unas pobres andas que parecen más unas parihuelas que un trono, adornada con flores del terreno, le siguen dos tambores roncos pintados, uno con los colores de la bandera de España y otro con los colores de la bandera de la falange, trás ellos el cura y un monaguillo echando incienso, las autoridades y al final los hombres, todos destocados. De vez en cuando una saeta, mientras los bares están cerrados mientras dura la procesión.
El viernes ha muerto el "Señor", no se pueden tocar las campanas; los toques se hacen con matracas (instrumentos musicales, de madera para los ricos y de caña para los pobres. Están compuesto por una rueda dentada y una cajita de madera o caña, que hacen un ruido infernal). El trono, sobre el que va un ataud de crital con el "Señor" dentro, va escoltado por dos guardias civiles con traje de gala y el fusil hacia abajo.
Por la noche sale "La Soledad". Esta es la procesión que más me gusta. La virgen es la más bonita, va de negro y la gente en absoluto silencio. Las luces del pueblo apagadas, nos alumbramos con velas que van protegidas por un cartón para no mancharnos ni quemarnos. A esta procesión le acompañan los penitentes de túnica y cucurucho negro, son unos treinta o cuarenta, algunos descalzos y tres o cuatro con campanilla y capa blanca, los jefes.(cuando era más chiquitillo me daban miedo, ahora nó).
El Sábado la iglesia está abierta las veinticuatro horas y hay un "currincheo" de gente a todas horas, de día y de noche.
El Domingo de Resurreción. otra procesión: "El Resucitao". Un "Cristo" muy grande con el corazón fuera.
Una vez terminada, en la plaza cuelgan el "Juas", (un muñeco relleno de paja) entre la botica y la carnicería de Juanico, y a fuerza de dispararle tiros le prenden fuego.
Después, los mismos escopeteros, se van a la haza del "Prao" y allí han enterrado un gallo dejandole la cabeza fuera. Disparan sobre él por turnos y se lo llevará el que consiga arrancarle la cabeza de un disparo. ¡¡QUE SALVAJES!!

HOMENAJE A UN JILGUERO

Pobre jilguerillo,
ya no se oyen tus trinos,
cuervos azules
han cercenado tu pico

el sol se ha oscurecido,
en el nido te han sorprendido,
has vuelto por amor a tu jilguerilla
y al calor de tu hijos.

A tu jilguera han pelado,
para curar, ricino, le han dado,
su delito:
el amor a su pájaro.

En el nido de un buitre
te han torturado,
¡maldita envidia!
que tanto daño ha causado.

Llora un verderón gitano,
a hacer un hoyo,
le han obligado,
allí tu cuerpo han depositado.

Seis claveles rojos
en tu tumba han reventado,
mientras, en Jímera, ya no se oyen trinos,
sólo graznar cuervos y grajos.

Un día llegará
en que otros trinaran
y en Jímera
el sol, de nuevo, brillará.




c

No registrado, podias registrarte con algun nombre para saber si el que escribe estos poemas es la misma persona, son buenisimos ni una maquina del tiempo lo haria tambien. (SALUDOS CAMPEON)

Siguiendo la invitación del jimerano escritor y poeta quiero aportar mi granito de arena pasando a escribir un pequeño relato de un escritor malagueño de finales del siglo XIX y principios del XX, NARCISO DIAZ DE ESCOBAR, y situado en nuestro pueblo. De camino agradecer al jimerano anónimo los gratos recuerdos que nos trae a la memoria y así deja constancia de como era la Jimera de mediados del siglo pasado.
Se títula así: ¡ QUE LO CONTE EN SECRETO!
"Vivía en el pueblo de Jímera de Líbar, delicioso caserío de la Serranía de Ronda, donde por rara avis, hay buenos alcaldes, inmejorable administración y gente muy simpática, un leñador llamado el tío Roque, natural de la Línea de la Concepción, que era muy querido de sus vecinos.
Estaba casado con Caridad Jímenez, una serrana del propio Montejaque, hermosota, de carnes apretadas, con caderas exuberantes, ojos grandes y negros y cara redonda.
El matrimonio se había llevado bien hasta hacía unos tres o cuatro años antes, en que, penetrando en aquel lugar Joselillo el Contrabandista, tuno de mucha suerte, primo de la Caridad, los disgustos se hicieron diarios, too por curpa der primo, según manifestación del tío Roque.
No era éste hombre capaz de matar una mosca ni menos de darle un par de garrotazos a su jembra que la enseñase a jugar limpio. Se limitó el leñador a pasarse el día en la soledad del campo y a hacer pucheros cuando nadie lo veía.
Su mayor temor era que trascendiesen sus rencillas matrimoniales y las causas de estos efectos a las casas de sus convecinos, pués con razón temía a las lenguas de las comadres, que en la sierra de Ronda, como en los Pírineos o como en el Tonquín, son capaces de desesperar al más bueno si me lo cogen por banda.
Después de horas y horas de meditación, el tío Roque acordó ir a consultar sus penas con el cura del pueblo, sacerdote muy cariñoso y muy santo.
El padre cura le oyó con atención y supo como aquel primo, que desvelaba al tío Roque, había sido novio de su Cariá y como cierta noche, al regresar del monte el pobre leñador, sorprendió cierto coloquio del cual no salía bien parado el marido de la chica de Montejaque.
El sacerdote, con bonachona sonrisa, le dijo:
-Vamos, hombre, ten resignación, que apenas pasen estos días de Cuaresma me ocuparé yo de la Caridad y la haré entrar por vereda.
-Muchas gracias, pae cura- añadió el tio Roque, besandole las manos.
Una hora después estaba el leñador en la iglesia oyendo el sermón que el cura predicaba sobre las virtudes teologales y cardinales.
El templo se encontraba lleno de fieles que, absortos, oían la santa palabra.
De pronto dijo el predicador:
-Me he ocupado de la Fe y de la Esperanza. Voy, hermanos mios, a ocuparme de la Caridad.
El tío Roque sintió un malestar muy grande en todo el cuerpo y subiendose en un banco, gritó:
-¡Pae cura! ¡Pae cura!... Que lo de la Cariá se lo ije en secreto."

Un saludo a todos los jimeranos de bien y animaros a escribir algo, que siempre algo habrá.
S.O.

Invitado por el paisano anterior hoy me atrevo a escribir algo que lo llamo:
YO NO HE SIDO . . .

Allá, a mediados del siglo pasado, cuando los colegios se llamaban escuelas y los profesores maestros, el Ministerio de Enseñanza tenía a bien enviar unos inspectores a los centros escolares, a fín de controlar la buena educación y la cultura del alumnado. Ejercicio que debia hacerse anualmente y sin previo aviso.
Debido a las carencias de personal y la lejanía, a Jimera de Líbar nunca le tocaba, por lo que los maestros se distendian hasta tal punto que alguno que otro se iba de cacería en horario lectivo, dejando las clases en manos de un alumno aventajado.
Sucedió un día, que de improviso, se presentó un inspector, en la escuela. Educadamente solicitó, desde la puerta, permiso para entrar. Obtenido el permiso, al entrar y dar los buenos dias, observó , con agrado, que los niños respondían al "buenos dias" levantandose de sus asientos, como mandan las normas de buena educación.
Trás hacer la presentación, el inspector ante el sorprendido maestro, comienza a efectuar la evaluación en cultura general, nombrando uno por uno, sobre las diversas materias: Geometría, Aritmética, Religión, Historia, Geografía, Ciencias Naturales, Formación del Espiritu Nacional y por último Literatura, para lo cual llama a un tal Manolo, chico avispado donde los haya.
- A ver Manuel, ¿podrías decirme quien escribió El Quijote?
- Yo nó, señor inspector. Contestó el zagal, pensando para sus adentros "a mí no me echan este muerto".
Ante tal respuesta, el inspector mira al maestro y éste, con toda tranquilidad, reponde:
- Si Manolito dice que él no ha sido, yo que le conozco muy bien, acredito que él no ha sido.
El inspector, atónito, da la visita por terminada y va al Ayuntamiento, pués era preceptivo que la autoridad competente le sellaran la acreditación de la visita. En eso, entabla conversación con el alcalde y le comenta lo sucedido con Manolito y el maestro, a lo cual el alcalde le responde:
-Yo, también puedo acreditar que Manolito no ha sido, es un chico de muy buena familia y adscrita al Régimen. Pero no se preocupe, que nosotros encalaremos y todo quedará limpio, igual que estaba antes.
Totalmente abatido, el señor inspector, se va a la estación de ferrocarril a fín de coger el tren y en el camino se encuentra a la pareja de la guardia civil, que, como era su deber, solicita la documentación del forastero. Sin ningún problema, éste se la da y a su vez se presenta, soy el inspector de enseñanaza...
Los guardias civiles le devuelven la documentación, saludandole a su vez y tratando de ser amables le preguntan como le ha ido por el pueblo, entonces, a forma de queja, el inspector le relata todo lo sucedido.
El cabo, jefe de patrulla,muy serio, intentando reconfortarle, le dice:
- Vayase tranquilo, nosotros nos encargamos de encontrar al culpable y un més de cárcel no hay quien se lo quite.

Cosas de mi pueblo, al cual quiero mucho.
Un saludo a todos los jimeranos

Por todos los mensajes que me preceden, por todas estas vivencias que yo no se expresar pero si he vivido y me emocionan al recordar (no me importa reconocerlo en publico) por ellas, deciden gran parte venirme a vivir Jimera. Gracias a vosotros mis paisanos que sabéis y podéis plasmar en este medio de comunicación esas vivencias que comparto con tanta satisfacción. Fuertes abrazos a esos Jimeranos. Eugenio Becerra.

Y esos colchones de sayos, Que de palmas que hemos segao.....que buenos recuerdos,, y la refrescante casera "Carabina"


Muchas gracias.

Desde esta página hago una propuesta a todos los jimeranos que quieran colaborar y creo que serviria para que no se perdiese nuestra forma de hablar tan peculiar. Realizar un DICCIONARIO JIMERANO, tanto de formas de expresión como de lugares genuinamente jimeranos. Empiezo yo con cuatro palabrejas:
Artezuelas: significa Huertezuela.
Emberca : Alberca
Montijón: Monte Sión
Ifren: Cafre

¡¡ Animo !! Es un tema bonito y sin peleas.

ruilla: trapo de fregar
jozifar: limpiar el suelo
puciarriba: Hacia arriba
Martijin: Martin Gil

Hola a todos, una sugerencia, se podría hacer mención también a los diferentes motes existentes en Jimera.
Buenas noches