De seguida me enamoro Después de unos dias de tener vestido de luto mi corazón, hoy la he visto: Estaba de compras en Carrefour y no sé por qué me he parado a su lado. Cuando mi mirada se ha posado sobre ella, en mi estómago revoloteando miles de mariposas. Es ella, estoy seguro. Con ella quiero viajar a las islas más remotas, a los picos más escarpados, a los países más lejanos. Quiero que me enseñe la Grecia Antigua, los fiordos noruegos, la sabana africana o el oriente más moderno. Volar sobre las Montañas Rocosas o los atolones del pacífico, las pirámides de Egipto o los bosques canadienses. Es joven, quizá demasiado, pero yo le aportaré el sosiego necesario para que iniciemos una andadura larga y venturosa. No es muy grande, es más bien menuda, pero tiene una figura..... ¡muy hermosa, y muy luminosa!. He vuelto a casa con ella (¡qué impulsivo!, de seguida la meti en el dormitorio) pero no he podido evitarlo. Tengo “mono” y estoy cansado de ir de una a otra, siempre pidiendo favores. Su nombre….¡ah!, ¿es que no lo he dicho?, ¡que torpe!....se llama Hacer, portátil y ligera, una computadora que puedes llevar a todos sitios. Que bonito es copiar y pegar. |