Cuevas de San Marcos - Malaga

MAÑANA SE VAN LOS QUINTOS

En tiempos de la oprobiosa dictadura, cuando les llegaba el día de partir hacia el campamento a los mozos que habían sido reclutados para la prestación del servicio militar obligatorio, era costumbre reunirse todos los del mismo llamamiento el día anterior para agasajarse con una buena comilona, a base de chorizo, morcilla, lomo y demás, todo ello bien adobado con bastante vino y cerveza (más de lo primero, porque hacía más efecto).

Concluido el hartazgo, quienes se habían pasado un poco (o un mucho) en la bebida daban fe de su incorporación a filas, cantando por las callejuelas del pueblo, agarrados todos por el hombro (para evitar caerse), un canción en bucle, cuya letra, reiterada mil veces, era esta:

Mañana se van los quintos,
mañana se van los quistos
y se llevan a mi Pepe,
ya no tengo quien me compre,
ya no tengo quien me compre
horquillas para el "roete".

Quinto peluso,
no llores más,
mira a tu padre,
mira a tu madre,
qué alegres están.

* * *

SeVe.

Los “quintos” mañana se van, de vez en cuando al repasar las fotos antiguas aparece la foto de los quintos casi todos tenemos una de esas fotos posando como un equipo de futbol un grupo de diez o doce jóvenes, la primera fila agachados y los de atrás de pie una mano en el hombro del compañero y la otra con la botella levantada celebrando “ mañana se van los quintos” era más o menos como se hacían la foto para el recuerdo cantado todos al mismo tiempo con tono subido y como siempre señalado que esa quinta era la mejor. Desgraciadamente la mayoría de mi quinta ya no nos vamos mañana algunos ya hace tiempo que se fueron y nunca volverán.

Me sortearon con el hijo del patron
y a los dos nos había tocao a Melilla,
y como el otro tenía dinero
se había quedao a serví en Sevilla.

¡Qué desgraciao es el hijo del obrero!.

Hablar de la marcha de los "quintos "daria para escribir muchas historia
y todas estarian relacionadas con bromas (algunas muy brutas) y casi siempre acompañadas material "etilico" osea borracheras.
A lo mejor tenemos opcion a leer algunas si los foreros de aqulla epoca les da por contarlas.En las ciudades casi pasaban desapercibidas pero no asi en los pueblos donde se hacian burradas.
Un saludo a la Cia.(aqui seguimos en follones con los Robot-Korps)
ah,una pregunts,??por que se les llamaban QUINTOS.¿¿

Buenas noches: ¿ De que quinta sois.


Porque cuando yo me talle,y de estos hace ya unos años,no era asi.


Pero bueno si estuvisteis en la guerra de Africa ,me callo.

Pariente

¡¡ de que guerras hablas ¡¡que cuando tu fuistes a la mili no lo celebraras no quiere decir que no fuera dia seÑalado cuando te tallaban,
?de que milenio eres tu¿yo soy de la quinta del 65 creo y no estube en la guerra de africa ,esa epoca pertenecio al tiempo de la republica,asi que haber si te centras un poco.salvo que sea la de la isla del perejil donde las heroicas fuerzas espaÑolas detuvieron a las famosas cabras que alli pastaban alegremente y que fueron condecoradas las famosas cabras por aguantar heroicamente a las fuerzas de ocupacion espaÑolas.
He dicho.

Contestando a "7312berrocal", que se ha interesado por el origen del nombre de “quinto”, le informo de que tal nombre tiene un origen muy lejano en el tiempo, hasta el punto de no corresponderse el significado de origen con el actual.

Desde luego, con la palabra “quinto” siempre se llamó al joven que, al cumplir la mayoría de edad, era obligado a la prestación de un servicio militar en el ejército del rey (o de la nación, como se prefiera). Pero ¿por qué se le dio a ese mozo el nombre de “quinto”?

El nombre de “quinto” proviene de una antigua expresión medieval, correspondiente a una pragmática real “Contribución de Sangre a la Corona”, que se traducía en una obligación de incorporarse al ejército real de manera totalmente gratuita, durante un determinado periodo de tiempo.

Esta disposición real fue implantada, por vez primera, a comienzos del siglo XV; concretamente, en tiempo del rey de Castilla Juan II, y consistía en que “uno de cada cinco varones” de una misma familia estaba obligado a enrolarse en el ejército durante un tiempo. Recordemos que las familias de antes acostumbraban a tener muchos hijos, lo cual no implicaba más trauma que el de una separación familiar pasajera (salvo que el ‘quinto hijo’ tuviese la mala suerte de fenecer en un combate).

Esta disposición real fue abolida con la muerte de este rey y olvidada unos cuantos siglos, hasta que Felipe de Anjou (futuro Felipe V) la retomó, en 1705, durante la llamada Guerra de Sucesión. La carencia de soldados obligó a este pretendiente al trono de España a restaurar algo que ya estaba más que olvidado. Y, aunque no se aplicó a ‘uno de cada cinco’, sino a ‘uno de cada familia’, salvo que fuese hijo único o concurriesen circunstancias determinantes de exención, el nombre de “quinto” continuó entre nosotros vivito y coleando hasta la implantación del Ejército profesional, no hace mucho de esto.

Esta es la esencia de la cuestión. Hay matices, pero ahora no vienen al caso. Se alegaría mucho la respuesta.

SeVe.

SEVERINO

Muy bien,aclarado el tema y agradecidido por la informacion.
Pariente,que note enteras,con lo que tu sabes de historia,a ti sacandote del"troski,Bancuni y del Eroski"estas perdido.
Un sdaludo

Yo me hice una (o dos, no recuerdo ahora bien). Era raro no hacérsela. No diré el remplazo al que pertenecí ni el año en que fui tallado. Quizá más adelante... En la foto, recuerdo que yo aparecía en la primera fila, con una rodilla apollada en el suelo y ambos brazos agarrados al cogote de dos quintados más. Era evidente que tenía los ojos como las brótolas, o sea, que hube de darle bastantes palos al hígado. La he buscado por cielo y tierra y no he logrado encontrarla: me he enconrado muchas otras, ya vestido de soldado, incluso una de mi último día en el cuartel. Yo fui a para de cabeza a Ceuta, tras pasar un largo y cálido verano por Camposoto. En fin... ¡quién pudiera volver a hacer otra vez la mili...! ¡Quién pudiera volver otra vez a aquellos años...!