he dejado de leer "EL PAÍS" Buenas tardes: A la muerte de Polanco vinieron cambios cuyas consecuencias están siendo ahora muy palpables. El deseo de crear un periódico "global" se ha conseguido, pero a costa de que deje de ser "independiente", como se hacía llamar en sus buenos tiempos. Parte de la deriva de "El País" hacia posiciones conservadoras la tuvo también la falta de tacto del gobierno Zapatero a la hora de favorecer la entrada en acción de una nueva plataforma mediática, la MediaPro de Jaume Roures. A largo plazo, España saldrá favorecida del proyecto MediaPro, pues ha aumentado el grado de pluralismo del panorama informativo. Pero a corto plazo, como ya advirtió el entorno del propio Felipe González, la izquierda ha salido muy dañada, pues hemos puesto a algunas de las mejores plumas que teníamos a hacer la guerra entre ellas cuando el enemigo real era el tsunami de tijeretazos sociales que se nos estaba viniendo encima. La gota que ha colmado el vaso ha llegado hoy, cuando al producirse una de las manifestaciones más grandes de los últimos meses, el diario de PRISA, en su versión electrónica, se ha obstinado en dar durante toda la tarde la misma cifra de manifestantes que el gabinete de Rajoy: "Unas decenas de miles" o "65.000 personas". Seguramente el número de asistentes tampoco ha sido tan alto como claman algunas de las instituciones organizadoras. Pero la cifra de 65.000 es sencillamente ridícula. ¿A qué teme PRISA?. ¿A que se le estropee un nuevo maridaje, esta vez con la derecha? ¿A que se le acabe el chorro de financiación que le llega de esos "conocidos grandes almacenes" que marcan, vía publicidad, la neo-censura de tantos medios?. Las organizaciones que han convocado las manifestaciones del día 15 de septiembre son perfectamente legales y respetuosas con el sistema democrático. Si desde un periódico que se dice "serio" se trata de silenciar el que las protestas de la sociedad se canalicen por esos medios, se está cometiendo un acto de irresponsabilidad brutal, pues se van a dar alas a las otras manifestaciones, las del 25 de septiembre, que pretenden una ruptura directa con el statu quo político de 1978 y pueden estar infiltradas por grupos de reventadores o de violentos. De la toma del Congreso que se anuncia para el 25 puede salir cualquier cosa. Puede salir una nueva República (sería lo deseable a estas alturas) pero también un nuevo fascismo. Lo siento enormemente por personas como Javier Marías, Maruja Torres y tantos otros, que ahora mismo son parte de la conciencia crítica de España. Pero sus actuales superiores jerárquicos han bajado el nivel de una manera pasmosa en comparación con otros tiempos. Los sindicatos tradicionales han sufrido un desprestigio enorme en los últimos años, -unas veces con razón y otras sin ella-, y por ello hoy se han visto pasar globos y banderas de gente que se ha decidido a pasar de la indignación a la acción y a hacer aparecer sindicatos hasta la fecha desconocidos. (L. de Red) El mundo al revés: Pedro J. Ramírez dando caña a Rajoy y el Grupo Prisa, haciéndole la pelota y dándole vaselina ¡¡ Caraduras !! Salud y suerte P.D.: Si alguien quiere leer prensa independiente digital, no tengo inconveniente en daros las cabeceras de ellas. |