Rivas-Vaciamadrid - Madrid

Esta es la historia de una gran desilusión, y a la vez de una enorme duda. Yo soy una mujer casada y vivo desde hace pocos años en este pueblo. Un día conocí a una mujer encantadora, también nueva aquí, con la que desde el principio trabamos una gran amistad. Se llama M. M es la típica ama de casa que vive única y exclusivamente para sus hijos y para su marido, G, un ejecutivo, bien parecido, que viaja constantemente a Londres y a Portugal por motivos de trabajo. Hace poco estuve con otra amiga de la infancia a la que también adoro, E, aunque no lo sepáis es la inicial de un nombre muy apropiado para una madre soltera, que desgraciadamente ha tenido que sacar fuerzas de la nada y hacer de todo para sacar a su hijo adelante. Y espero que se me entienda con lo que he querido decir. En fin, lo que viene a continuación ya casi se puede intuir. Se trata de un asunto de infidelidad. La cuestión es que me fuí a tomar un café con E y hablando hablando llegamos a la conclusión de que ella conocía a este matrimonio... porque él fué su amante durante varios meses. Al parecer G le hacía tantas "visitas" que terminó por convertirse en algo más para mi amiga, quien lógicamente al enamorarse dejó de cobrárselas. Y, bueno, pasó lo de siempre: durante un tiempo él le prometía que iba a dejar a su mujer, promesa que nunca cumplió, y E un día se cansó, cogió sus bártulos, a su hijo y se cambió de domicilio. Desde entonces no sabía nada de él hasta el día en que nos fuímos a tomar el café. Para que luego digan que el mundo no es un pañuelo.

Esa es la parte de la desilusión, y ahora viene la parte de la gran duda: ¿qué hago? ¿Se lo digo a M? Yo entiendo que realmente éste no es mi asunto, pero me molesta mucho que en estos casos siempre pierdan los mismos: los que dan más por los demás. Además, las dos mujeres que han sido víctimas del "affaire" son mis amigas y no hace falta ser muy lista para intuir que ni es la primera vez ni posiblemente sea la última que G tiene una aventura, pagada o no, sustentada en la mentira. Bajo esa apariencia de hombre enamorado y familiar se esconde alguien completamente desconocido incluso para sus seres más queridos...

Bueno, ya termino. Estoy hecha un mar de dudas y sólo quería dejar constancia de la desazón que me conmueve desde que me enteré de la noticia. A pesar de los pesares, y cuando te toca tan cerca, una nunca se acostumbra a estas cosas. Ni siquiera como simple espectadora. Un beso y gracias por compartir conmigo esta historia. C.

Yo no les diría nada.Primero porque considero que lo que una amiga te cuenta es secreto. segundo porque sería abrir la caja de pandora.Ahora hablaría con G sobre todo si sigue con tus dos amigas más que nada para evitar contágios y para que él recapacite y se sienta pillado en falta. suerte