Cenicientos - Madrid

Replicando al culebrón de título "Antidemocrático".
A principios de los años 30, del siglo pasado, este país tuvo la oportunidad histórica de cambiar, progresar, modernizarse y democratizarse
Cierto es que la culpa, de que esa esperanza se abortara, la tuvo un aborto pequeñito, con bigote y sus secuaces. Pero algo de responsabilidad tuvieron los que, aún queriendo cambiar y progresar, se enzarzaron en trifulcas dialécticas (y no dialécticas), como la que tenéis vosotros en esta conversación. Enredados en sus diatribas internas, ellos no vieron al verdadero contrario.
Si hay alguna esperanza de cambio en Cenicientos, la estamos malogrando con enfrentamientos intestinos como este. Os confundís de rival. Los enemigos son el inmovilismo, amigismo, nepotismo, servilismo, caciquismo, los profesionales que entienden la política, como un trampolín para alcanzar sus egoístas objetivos personales y nunca la entienden, como una herramienta para mejorar, pasito a pasito, la sociedad que dirigen.
Con tantos enemigos a los que hacer frente en todas las direcciones, nos ponemos a discutir entre nosotros. Esto no va a mejorar atacando en masa “al Toti”, descalificando a los socialistas, los socialistas a los anarquistas, estos a los comunistas y estos últimos cierran el círculo vicioso contra “el Toti”. Solo se me ocurre una fórmula, trabajo, unidad y diálogo.
Con mis mejores deseos de salud y libertad ¡Hasta pronto!

Que decir de lo expuesto, quizás no supe expresar mis ideas, o las exprese inadecuadamente, al menos me alegra que alguien que quizás no comparta mis ideas, al menos entienda que vivir en un idealismo no es tan malo, que entender la vida de otra forma no es de locos y que si eso es una locura, como dijo aquel "bendita locura". De lo demás, ninguna pega. Saludos