Articulo del Corredor del Henares con respecto a las fiestas de Campo Real CAMPO REAL / Estas fiestas habrá dos días de encierros que correrán por la calle Vilches Viernes, 03 Agosto 2012 16:04 Como prometió el alcalde de Campo Real, Felipe Morena, en su campaña, los encierros volverán estas fiestas a su recorrido histórico y la plaza de toros se instalará en la Plaza Mayor. En estos primeros días del nuevo equipo de gobierno en Campo Real, tras la moción de censura de junio, la principal urgencia es organizar las fiestas patronales de septiembre. El alcalde prometió abaratar los elevadísimos costes de años precedentes y recuperar el recorrido histórico de los encierros. La crisis económica impide hacer desapilfarros, pero el acondicionamiento de las talanqueras obliga a realizar un gasto elevado. Al parecer el antiguo vallado no cumple la normativa y hay que rehacerlo. Eso es lo que provocará una desviación del presupuesto. Aunque las cuentas no están cerradas, a los 50.000 euros iniciales de presupuesto habrá que añadir entre 15.000 y 20.000 euros más por esas nuevas talanqueras. Se aprovecharán las anteriores y el doble vallado con travesaños horizontales se ha sacado a subasta. El ayuntamiento paga 1.200 euros mensuales al propietario de la nave donde se guardan esas teleras que ahora se sacan a subasta. El montaje y desmontaje cada año de todo ese vallado costaba 28.000 euros a las arcas municipales. Las grandes cifras de estas fiestas se centran en los 35.000 euros que cuestan los 12 toros, los seguros, la UVI móvil y todo lo que lleva aparejado un espectáculo taurino. Aquí no se incluye la remodelación de las talanqueras. Habrá tres orquestas, aunque ninguna de “relumbrón” o de categoría nacional que tocarán el día de los fuegos artificiales, el día del Cristo y en el baile del sábado después de los toros. Precisamente, los fuegos artificiales será otro de los objetivos del recorte. Los 12.000 euros que costaron el año pasado, este año se quedarán en 6.000 y habrá pólvora hasta donde de de sí este presupuesto. El alcalde se guarda alguna sorpresa como el pregonero de las fiestas, que se pretende que sea alguien muy conocido. |