Villar de Acero - Leon

Acerca de la propiedad.
"La propiedad es un robo" ha escrito Proudhon, aunque luego haya matizado que solo sería ilegítima cuando se abusara de ella o se consiguiera fraudulenta y violentamente en guerra injusta.

Estimo que la propiedad privada de objetos y bienes es muy probable que siempre haya existido.

Desde los orígenes hasta el actual capitalismo o imperialismo de Estado ha evolucionado pero nunca ha desaparecido.

El animal apareable es territorial por supervivencia y fué y es seguramente este instinto ( para perpetuarse en las mejores condiciones competitivas) el príncipe y regente de todos los demás.

Y el animal humano no es excepción desde que fué expulsado por Dios del Edén del Este comunista y primigenio . Desde entonces el comunismo de más de dos, donde se ha intentado o impuesto, se ha demostrado, unas veces a la corta, otras a la larga, estéril e impracticable. Y donde aún pervive no se ven esperanzas de que alcance sus fines : la consabida sociedad sin Religión, sin propiedad privada y sin Estado.(el ni Dios ni Patria ni Rey de los ácratas siemmpre fue efímero en las células en las que se ensayó)

Aunque históricamente la propiedad ha ido siempre cambiando de dueños nunca desaparece del todo, por mucho que los regímenes como los nombrado anteriormente lo hayan intentado. A lo sumo la han reconvertido en propiedad del sátrapa correspondiente o del Estado totalitario de turno disfrutable en el 99 % por el 1 % de los regentes del correspondiente partido único.

La propiedad sobre las personas me temo que tambien sea un hecho intemporal. En forma de esclavitud ha durado hasta hace poco y aún en bastantes sitios existe aunque no sea ya en su forma clásica. Y en ciertas épocas, felizmente superadas, la explotación del semejante, se ha revestido de rigores ciertamente inhumanos.

Las esposas propiedad de sus maridos, los niños propiedad de sus padres...Todos propiedad del Sr feudal...Sociedad patriarcal, matriarcal etc.

Lo que aún no había encontrado es que los padres fueran propiedad de sus hijos.O sea ejemplares de la sociedad hijastral.

En un pueblo entrañable donde hoy la ideología dominante parece ser de izquierdas (republicana, socialista y comunista) en estos tiempos posmodernos, he sido testigo involuntario de una escena un tanto surrealista en medio de la cual escuché, en un tono de increible amenaza, y repetido varias veces, lo siguiente_ "A ÉSTE no lo toques, ni se te ocurra, ÉSTE, te digo yo que es intocable." (supongo que ignora lo de la casta inferior indú y no iba por ahí)

La frase fue dirigida por una persona, que presumo hija de este ÉSTE, cuando un amigo de la infancia y con quién ÉSTE tuvo vivencias imborrables (y en todo caso con cero discusiones) mucho antes de que viniera al mundo la presunta, le pone amigablemente la mano en el hombro para comentarle algún cambioocurrido desde los tiempos heróicos.

Mi cara de asombro casi sin poder aguantar la carcajada, cambió a estupefacción cuando ÉSTE puso un semblante de sumisa aprobación con esa orden que el amigo de la infancia se apresuró a obedecer para librarse de alguna posible bofetada femenina , pues es del dominio público que por el barrio de los hechos abunda la violencia de género en todas direcciones. Amigo ÉSTE, te felicito por tener defensas tan cojonudas. Lo que siento es no poder volver a saludarte dándote la mano sin mirar antes debajo del coche...no vaya a ser que me ocurra algo parecido a lo que estuvo a punto de ocurrirle a tu amigo de la infancia.

Este tipo de propiedad sobre las personas, es el que estimo que sobra en los pueblos civilizados. Y la propiedad de la tierra, sobre todo cuando ya casi no se vive de ella y ya está prácticamente abandonada, o al menos cuando ya su rendimiento es mínimo o nulo , no es vital su explotación y difícilmente puedan volver los tiempos en que la riqueza se medía por cuartales, no debería servir para enfrentamientos ni venganzas vecinales.

En cambio y por desgracia, estos enfrentamientos parecen mucho más comunes que en tiempos pretéritos y de escasez felizmente superados. En ellos tengo para mí que la solidaridad y ayuda mutua era superior que en el presente. ¿Es que la necesidad y la escasez une y fomenta valores humanos positivos y su falta desune? ¿O es más bien que los valores han cambiado de signo?

En cualquier caso, si esto es una ley espero que no tengamos ocasión de demostrarla en otro tiempo futuro de penuria.

Coutarego.