Villalfeide - León

Hermoso paisaje, dureza en el fondo y suavidad en el verde. Naturaleza y hombre, siempre van de la mano.
Saludos desde Lleida.

Y entremdias VIllalfeie
amasando piedra y naturaleza
dureza y mimo
haciendo de la tarde
el mejor de los paisajes.

Celebro, cada vez, vuele más alto tu "PAjarito, Isabel"

El Dormilón que nunca duerme

Hola Dormilón, de nuevo la vuelta al "cole".
Sabes, en cualquier imagen donde se ha puesto un pedacito de corazón, se nota. Me gustan estas imágenes donde está todo un paisaje tan amplio como tan amplias pueden ser nuestras miradas en la vida. Curiosamente yo no suelo fotografiar espacios amplios, me atrae más lo cercano, los detalles y sobre todo las personas.
Algun dia espero poder compartir mis imagenes con todos vosotros.
Visité el diario que me indicaste, pero no te encuentro.
Saludos para todos.

Ando muy cogido de tiempo, y no por la vuelta al cole, pero qué menos que contestar con agrado a tu aportación y mensaje.
La vuelta al cole es también la vuelta a la normalidad y a la rutina. La vuelta a la vida de verdad, al ring ring del despertador y al buen madrugar. ¿Conoces algo mejor y que más dure?
Tu agradable y respetuosa intervención en los foros, como siempre, me ha traído a la mente ciertos ecos que me agrada hacértelos llegar para que sigas disfrutando del paisaje en pequeño y de lo pequeño en todo su paisaje. Mientras tanto, se feliz.
Si se pone corazón, a poco que sea, se nota donde quiera que sea o se ponga. Eso sí que se advierte a vuelo de pájaro. En todos tus vuelos, si algo pones, es mucho corazón y sinceridad ofrecida a raudales en todo lo que ofreces a los demás. No otro es tu constante mensaje. Pero te diré.
La vida es el mejor paisaje que podamos captar en la retina de nuestros ojos y guardar en el carrete del alma para rebelarlo en cualquier momento en el laboratorio de nuestro corazón. Aunque ahora, con esto de las cámaras digitales, todo se recoge a vista de pájaro, a vuela pluma diría yo: lo enorme y lo diminuto, el paisaje y el macro en micro.
La persona que, gracias a Dios aun está por inventarse la cámara que sea capaz de captarla, es tanto un paisaje infinito como inmediato y minúsculo. Sólo que, cuanto más de cerca lo enfocamos, igual que pasa con el zoom fotográfico, más enorme y profunda se hace. Más nítida se nos ofrece y presenta. A veces lo hace con tanta fuerza que nos desenfoca, nos deslumbra. Justo lo contrario de lo que sucede cuando hacemos zoom con nuestra máquina fotográfica.
No es que los montes sean grandes, es el hombre más bien el que es pequeño. En la plenitud redonda de la tierra no van más allá de ser pequeños granos de pubertad que le salieron a ésta cuando era joven. Si los contemplamos desde la redondez universal, se pierden en la lejanía de sí mismos. La tierra entera es como una gota de agua perdida en la infinitud del cosmos. ¿Qué son desde ahí los montes?
Si el mar no tuviera olas y éstas no se desmenuzaran en diminutas gotas de agua contra la roca, las nubes no podrían llenar sus cántaros para luego quebrarlos con sus truenos y regar la tierra de Oriente hasta Occidente. Unos fenómenos y otros crean el paisaje. Dentro de éste y por antonomasia, está el paisaje del hombre, difícil de recoger por el ojo digital. Pues todos sabemos que en el hombre lo más bello es lo que trasciende más allá de la foto: él mismo en sí mismo. Para eso tampoco tenemos cámara aún, a Dios gracias.
“Te atrae más lo cercano, el detalle y, sobre todo, las personas”. No está mal. Pero, ya te digo, mucho y muy veloz ha de volar tu pájaro para que sea capaz de retener en el hueco del ala ese gesto entrañable, esa acogida sin cálculo que se produce cuando la persona se muestra al sol de su alma y al calor del corazón.
Que el tiempo y la vida hagan amplia y experta tu mirada para que puedas lograr todos los propósitos por cercanos y personales que sean.
Salud y bienestrar desde el paisaje de cada amanecer.
El Dormilón que nunca duerme.

P S
La otra mañana, al ver las viñas cargadas de mosto y colorido, me vinieron a la mente como la mosca a la uva, estas ideas que no dudo en ofrecerte.
Da gusto ver las ubres de las cepas henchidas y repletas. Hermosas, apetitosas. Todas ellas tiznadas por los primeros reflejos otoñales. En sus líneas o rincles, se me antojan vacas atadas al pesebre ofreciendo sus ubres al vaquero para que en lo mejor de la mañana éste las ordeñe. Así están ahora las cepas y así se ofrecen a los ojos de los hombres.
Quizá la cepa sea el paisaje y el racimo, los granos de uva, eso pequeño que a ti tanto empieza a gustarte. Pena que los racimos no hablen. Si pudieran, a buen seguro sería una conversación de lo más amigable. Pero ya no serían granos de uva, sino lenguas de hombres, quizá hablando de la vida y de sus muchos paisajes.
¿Te imaginas los granos hablando engarzados en el racimo, en realidad, dentro de la ubre de su madre? Quería amiga, ahí tienes algo diminuto y a la vez un enorme paisaje. Ya no te cuento cuando el racimo se haga vino y alegre el paladar del hombre y su corazón caldee. Entonces sí que los granos hablarán y hasta los mudos y sordos oirán de las cosas que dicen, los hombres. Por lo que podíamos concluir que, ni las cosas están tan lejos de las personas ni éstas de las cosas. Sólo nosotros nos empeñamos en estar lejos de unas y otras.
Salud.

Me dejas sin palabras, y eso que a mi se me da muy bien conversar, pero es que profundo y hay que leer muy detenidamente tus palabres porque intuyo que llevan mucha miga. Creo que largos silencios nacen estos pensamientos.
Tengo la impresión de que no debo decir gran cosa mas porque tengo que leer otra vez tu mensaje. Es hermoso lo que dices.
Respecto a la rapidez para captar una expresión, un momento irrepetible o la sensibilidad de un momento, soy bastante rápida. Como ya he dicho en alguna ocasión me gustaria comparti imágenes, por ejemplo de expresiones, pero no se si se pueden poner aqui.
Si se te ocurre algun lugar me lo dices, y así me podras dar tu opinión.
Un saludo desde Lleida, que por cierto esta semana empizan las fiestas de San Miquel. Invitados estais.
Un abrazo para todos.

buenas,este " pajarito" lo fotografie yo y no os imaginais lo que me costo subir mas de una hora metiendome entre la densa maleza y arbustos,vamos...que parecia el de supervivientes,jeje,pero al menos valio la pena,un saludo.

Como ye he comentado en alguna ocasión, todo esfuerzo tiene su premio, y desde luego que este es un ejemplo.
Perni, yo te pediria que hagas mas "esfuerzos " como este y nos deleites las pupilas con imagenes estupendas.
Saludos desde Lleida.