recordatorio Siempre que falta alguien en el pueblo, recibo un gran mazazo. En el caso de Belarmina, el golpe ha sido mucho más duro, siempre he sentido mucho cariño a esta familia, de pequeña para mí era una fiesta cada vez que venían de Madrid siempre había regalos para mí, juguetes, ropa. En especial recuerdo un vestido con muchas flores después de casi cuarenta años recuerdo como era. La primera vez que vi una piscina fue con Gerardo, Belarmina y su familia en una merendola que organizaron en Boñar. La de quilos de magdalenas y bollos de unto que Hacían en mi casa mi madre y ella para la fiesta de S. Félix. Todos los años, cuando iba de vacaciones el primer saludo que recibía era él tullo, este año ya no lo tendré, ni te veré todos los días dando el paseo que acostumbrabas por la vía. Siempre te llevaré dentro de mi corazón con todos esos recuerdos de niña que nunca se borraran, gracias Belarmina
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