Villafer - Leon

Pasé ayer por el puente de Villafer. Bajaba el Esla ancho, crecido, pero no embravecido, a unos centímetros de saltar al parque, como en sus buenos tiempos por estas fechas. Parece que, de momento, la sed ha desaparecido.

Es una pena, que de el hayan desaparecido algunas de las especies autóctonas, pero la naturaleza si la dejamos, es lo suficientemente sabia como para regenerarse a si misma.
Río de mi niñez, de mi adolescencia, refugio, reto de mis sueños.
Manantial de perfumes, tomillo, álamo, chopo, palera... un recuerdo
un orgullo...
Un saludo desde Palma.