Octavillas del jubilata Como veo que los versos de Manolo Ramírez no han sido incluidos en la sección DOCUMENTOS, aquí los tenéis, tal como fueron publicados en la revista El Puente. OCTAVILLAS DEL JUBILATA Manolo Ramírez, “El Bardo Ibérico”, natural de Villafer, profesor de Inglés en un instituto de Madrid, se ha jubilado al finalizar el curso 2006/2007. Con ese motivo, y con la chispa poética que le caracteriza, ha escrito “Octavillas del jubilata”, que, con mucho gusto, publicamos en El Puente. En sus Octavillas, Manolo mira hacia atrás y contempla el paso de los años, con sus variadas y ricas experiencias; primero, como alumno, y más tarde como profesor en distintos centros de enseñanza.¡Buena jubilación, Manolo! 1 De la escuela de mi infancia Algo reseñar quisiera, Ojalá expresar supiera El sentir del corazón. Siendo mi madre la “doña” A mí no me concernía Y la escuela recorría Lado a lado con tesón. 2 Cambié la escuela del Páramo Por otra terracampina Y allí paró la bobina; Ahora había que estudiar. La borlita en la pizarra Y grande ya el borratajo Caía el escupitajo Y vuelta a recomenzar. 3 Luego la escuela de niños Con Don Victorio Vecino. Ibas por el buen camino Si sabías la lección. Vara de fresno al amnésico Y al rompedor de bombillas. La enciclopedia en pastillas, Puntero en cada sesión. 4 El pupitre era de a dos Y en medio estaba el tintero Si escribías con esmero Te librabas del borrón. Sobre la cal de los muros Y en almagre dibujado Cervantes iba a un costado, Y Legazpi en el hondón. 5 Con saludo a la bandera Cantando el himno de España, Comenzaba la campaña Con libreto de Pemán. Luego venía el recreo Y se jugaba al balón, Siempre con gran afición Y sin quitarse el gabán. 6 A la vuelta se bebía Leche en polvo americana Transcurrida la mañana, Al llegar al mediodía. A la leche acompañaba Un queso color butano Que al manchego blanco y sano En nada se parecía. 7 La barca del pescador Asemejaba en el río La proa de algún navío Del Bajo Misisipí. Y el Esla como a Tom Sawyer Nos ofrecía aventuras Como a móviles figuras De indios fuera del tepee. 8 Después vino aquella etapa Del internado marista Que suponía a ojos vista Mengua de la libertad. Pero había sus ventajas: Se rezaba y se estudiaba, El cine allí entusiasmaba Y el deporte cantidad. 9 Al fin llegado el verano, Recordando la coplilla: “Castellanos de Castilla Nunca habéis visto la mar”, Hacia Santander partía La legión de palentinos Por intrincados caminos, El sol en su despuntar. 10 Barca de “los Diez Hermanos” Y en medio de la bahía Un botijo agua subía Por ver si tenía sal. Y así pasaban los años Y llegaba aquel Concilio. El régimen pedía auxilio, Mas pospondría el final. 11 Hippies del sesentayocho Entre Francia e Inglaterra, Revuelta en toda la tierra Y “los grises” tras ti van. ¡Generación de sinsorgos! Quizá alguien nos acuse, El libro rojo, Marcuse Y la guerra del Vietnam. 12 Y comienza la docencia Con la mili recién hecha, Promete una gran cosecha La famosa ley Villar. Las fichas de la Galino Y los célebres conjuntos Hoy son ya planes difuntos Que alguien gusta recordar. 13 Después aquella academia Del Preu y del COU lecciones Luego las oposiciones Y Emilia Pardo Bazán. Instituto femenino Junto a la calle Hortaleza, Entonces ya una rareza, Y que pronto cerrarán. 14 Gabriel Alonso de Herrera En vega talaverana. Clases de tarde y mañana Más largas que un día sin pan. Comenzaba la cruzada Contra los libros de texto: Siempre surge algún pretexto Si se quiere ser Adán. 15 Y por fin el Castelar, Aquel tribuno incendiario, Que dijo ser un sudario La gran España imperial. Luego vino el plan Solana Que erradicó hasta el arbusto Y en el lecho de Procusto Igualó lo desigual. 16 Descarriló aquel gran cuerpo De Gerardos y Torrentes Y quedamos los corrientes Reducidos al cantón. Secundaria obligatoria Es oxímoro perfecto Y si el futuro es incierto Encomiéndate al patrón. 17 Un recuerdo a la memoria Que es más que los Reyes Godos, Según sentencia de todos Los maestros del saber. O ¿ha valido alguna vez, Asegurar siendo cuerdo: “Lo sé, pero no me acuerdo” Y en un examen poner? 18 Y con esta me despido De mis ilustres colegas. Todo el éxito en las bregas Es deseo que pedí. Si el verso salió arrugado Válgame Santo Tomás Y disculpad los demás Si en algo yo os ofendí. El Bardo Ibérico
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