Valderas - Leon

Sobre los terribles atentados que sufrió España el 11 de marzo de 2004 en los trenes de Cercanías de Madríd, hay una serie de cuestiones que lejos de estar aclaradas, en mi opinión, se han enturbiado más con el paso del tiempo.

Para empezar, y precisamente con la perspectiva que concede esa cierta distancia en el tiempo, resulta muy evidente que la fecha de las elecciones generales en aquel 14 de marzo, precisamente tres días después de esos atentados, es un dato a tener muy presente y que no se puede eliminar de la investigación; pues está meridianamente claro que esos atentados alteraron el resultado electoral, y nadie que se acerque al conocimiento de este asunto con honradez y ausencia de prejuicios puede obviarlo. Sin los 192 asesinados y más de 1.700 heridos, el resultado electoral hubiera sido totalmente distinto.

Otra de las cuestiones previas a observar para tener una idea aproximada de por qué se produjo ese atentado terrorista es el conocimiento de las conversaciones entre la banda terrorista ETA y destacados socialistas vascos, llevadas a cabo, según propia confesión, desde el año 2001. ¿Qué tendrían que hablar o negociar determinados socialistas y los etarras? Más aún: ¿por qué iba a negociar nada la ETA con un partido político que estaba entonces en la oposición y, tras la cercana mayoría absoluta de Aznar, tenía todas las papeletas para seguir estando en la oposición tras las elecciones del 2004?

En otro aspecto, es destacable la "coincidencia" en que una parte muy importante de los responsables policiales de la época fueran ascendidos o promocionados por el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Y es igualmente inherente este hecho para mandos de la Benemérita, de la Policía Nacional y del Centro Nacional de Inteligencia, comenzando por su entonces director, al que se encomendó el puesto envidiado de la embajada en Roma.

En la segunda línea del primer párrafo se debe entender: "Cercanías de Madrid".

La primera incógnita sin resolver sobre los atentados del 11-M ha sido el papel jugado por la furgoneta Renault Kangoo aparecida en la mañana de los atentados en las inmediaciones de la estación de Alcalá, con un periplo muy "curioso".

Sobre las declaraciones iniciales del denunciante ante la policía de la sospecha sobre esa furgoneta, sólo cabe hacer hincapié en una frase pronunciada en la misma mañana de actos, puesto que ese tal portero Garrudo está contaminado por un socialista que él mismo delató en la comisión de investigación, y no cabe rectificación alguna que nos quieran vender el tal "portero automático" o su "progre-teledirector". Las palabras fueron que "de la furgoneta salieron tres hombres grandes y altos como los vascos, y tapados con gorros como los terroristas que salen en la tele". Interesante de todo punto esta introducción.

Esos tres hombres se dirigieron a comprar unos billetes de tren y la expendedora de dichos billetes dijo textualmente que "hablaban en español con acento de español". Un detalle: estas declaraciones han sido silenciadas por todos los medios afines al Partido Socialista -casi todos-, obviadas en la comisión de investigación parlamentaria y despreciadas en el primer juicio del tal Bermúdez. ¿Y qué hay de la tarjeta de Grupo Mondragón del salpicadero de la furgoneta?

Pero lo realmente grave y que debería llevar a la reflexión de más de una persona, y más de un "responsable" policial, es la siguiente cuestión: ¿por qué los perros policía no olieron explosivos en esa furgoneta y los policías que, incluso entraron en ella para poner la palanca de velocidades en punto muerto, dijeron que "estaba vacía", y tras ser examinada unas horas después, y una vez que esa furgoneta se hallaba ya en el complejo policial de Canillas, resulta que se encuentran en ella "casualmente" hasta un total de 61 "evidencias", restos de explosivos y detonadores incluidos? ¿Qué raro, no?
¡En esta historia de la Kangoo hay gato encerrado... seguro!

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Resulta muy interesante repasar lo dicho durante todo aquel día 11 de marzo de 2004 por el llamado entonces ZP -hoy, el "nieto de Rousseau"- y ponerlo en relación con lo difundido por la Cadena SER aquella jornada.

Pocos minutos después de las 8:00 horas, el tal Iñaki Gabilondo, en la SER, atribuye a ETA el atentado, mientras ZP, al habla con Federico en la COPE, asegura la autoría etarra y pide la "unidad de todos los partidos".

A las 8:45, la SER dice que "la policía confirma que no ha habido llamadas de aviso y que es la primera vez que ETA no avisa de un atentado". Esto último es una mentira conscientemente difundida por la SER; la primera de una "larga cadena".

A las 9:00, los contertulios de la SER ya están pidiendo "que nadie cambie el voto y que nadie trate de aprovecharse del atentado".
A las 9:30, ZP vuelve a condenar el atentado de ETA en TVE.

A las 10:00, la SER informa de que, "según fuentes policiales", ETA está detrás del atentado, y a las 12:00, citando "fuentes jurídicas de toda solvencia", atribuye otra vez el atentado a ETA.

A las 14:05, ZP califica como "los atentados más horrendos que haya cometido nunca ETA", y a las 14:15 declara su apoyo a la manifestación convocada.

A las 15:30, Ana Terradillos, en la SER, informa de que "las bombas estaban compuestas por Titadyne y dinamita reforzada según fuentes del Ministerio de Interior". Y señala que es el "modus operandi de ETA".

A las 18:30, ZP vuelve a condenar el atentado de ETA en TVE.

A las 19:00, en la SER, Carlos Llamas dice que todo apunta a que ha sido ETA y que el portavoz de la Casa Blanca ha dicho que no tienen nada que apunte a que pueda haber sido Al-Qaeda.

A las 20:00, Aznar informa a ZP del "contenido" de la Kangoo, y éste le responde que "a través de gente cercana a Kerry, le ha llegado (por medio de Miguel Sebastián) la noticia de que pueden ser islamistas", ante lo que Aznar pide a los suyos que se confirme esto con Estados Unidos y le contestan que no saben nada.
A las 20:06, la SER dice que tiene las fotos de los etarras que podrían haber perpetrado la matanza, según la Comisaría General de Información.

A las 21:00, Javier Álvarez dice en la SER que "el explosivo no es Titadyne sino dinamita", y comienzan a decir que "Acebes no informa con suficiente rapidez". Hoy sabemos que tanto una cosa como la otra eran falsas.
A las 21:30, ZP llama a Pedro J. Ramírez para decirle que "había dos suicidas entre los muertos de los trenes". Falso de toda falsedad.

A las 22:00 en la SER: "Tres fuentes distintas de la lucha antiterrorista han confirmado a la Cadena SER que en el primer vagón del tren que explotaba antes de llegar a Atocha iba un terrorista suicida. Interior no lo confirma"; y a partir de ese momento, comienzan a producirse en la SER las alusiones a la guerra de Irak. Nadie de esa Cadena ha pedido diculpas jamás por la difusión de aquel bulo.

Entre las 23:15 y las 23:37, en la SER, Llamazares pide explicaciones "antes de que vayamos a votar" a Acebes, y Rubalcaba acusa veladamente a éste de "haber dado información falsa", pretendiendo con ello disculpar las condenas a ETA que el PSOE había realizado durante, prácticamente, todo el día.
Y a las 23:45, la SER difunde otro bulo más: que "el Gobierno español habría solicitado ayuda para identificar los restos de las víctimas mortales del atentado".
Faltaba apenas una hora y media para concluir las autópsias en IFEMA sin que apareciese ningún suicida. La SER nunca rectificó aquella grosera mentira.

A pesar de lo ya sabido a esas alturas, a las 6:00 de la mañana del día 12, el tal Gabilondo, con tanta desfachatez como necedad -lo propio en él-, continuó con el bulo de la SER: eso sí, con "más datos", como el famoso "suicida con tres capas de ropa interior". Jamás pidió perdón por aquella mentira el tal "cara de rabiado".

Al igual, por cierto, que nunca hemos oído una disculpa pública del tal ZP acerca del motivo por el que él mismo inició la propagación de la intoxicación del suicida.

Con tales ingredientes, no resultaría difícil continuar extendiendo bulo tras bulo durante los días posteriores, hasta el propio domingo electoral, con el altavoz mediático del grupo PRISA, la SER mediante y El País, el Canal+, Localia, etc., etc., contribuyendo a la causa difamatoria socialista.
¡No van a dejar que la verdad les estropee sus manipuladoras noticias!

¡Apuesto a que ciertos "ensucia-artículos" de estos que pululan por este foro... escuchan la SER! ¿Serán "socia-listos"?
¡Claro que hay algún "valiente" que se autodefine como "de derechas" que a buen seguro... sintoniza la SOEZ! ¡Digo..., la SER!
¡Quizá sea para ayudarles a buscar al de las tres capas de calzoncillos!

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El 13 de marzo de 2004 ha pasado ya a la historia de España como la consumación de la patraña: el tal Rubalcaba diciendo por la televisión que "los españoles no se merecen un gobierno que mienta". ¡Qué profeta, el... tío!
Creo que es la única aseveración de tan siniestro personaje con la que estoy de acuerdo. A día de hoy aún resulta reveladora aquella afirmación del que fuera portavoz del gobierno de los GAL, pues desde el día siguiente a esa fecha, los españoles "tenemos lo que nos merecemos": ¡un gobierno que no dice una verdad!

¿Se acuerda alguien a día de hoy de las espectaculares y televisadas detenciones (cual cargos del PP en esta malhadada época socialista) de los "dos hindúes y un morito" de aquella jornada del 13-M?
¿Alguien con dos dedos de frente puede entender qué pinta un supuesto extremista islamista con unos hindúes cuya religión ha estado históricamente enfrentada con el Islam? ¿Sabe alguien la relación con el 11-M de esos hindúes? ¿Los condenaron?

Toda respuesta que no sea un NO rotundo a estos interrogantes sólo puede entenderse desde el punto de vista de una mente lanar o un pensamiento borreguil.

Por si estos dos hechos fueran insuficientes, aquella aciaga jornada del 13-M culminó en otro capítulo de auténtico esperpento valleinclanesco con la "aparición" de una supuesta cinta de vídeo con la reivindicación de los atentados:
-As Salam Alaykum..., ¿que... si eres la telefonista marroquí de Telemadrid?
-Sí, dígame.
-Que hemos dejado una cinta de vídeo en una papelera de la M-30.
-Ah, vale, ya aviso a mi padre, que es policía jubilado y vive allí cerquita, para que vaya y la recoja, ¿eh?
-Pues ya cuelgo.
-Oye, papá, que ya avisé a la policía, pero vete tú antes y coges esa cinta porque es un vídeo de unos islamistas malísimos que han hecho lo del jueves.
-¿Los terroristas? Pero... ¿y si hay una bomba en vez de un vídeo?
No, tranquilo; si son más buenos... ¡Son árabes!, ¿sabes?
-Bueno, pues yo la cojo y se la entrego al primer policía que llegue, ¿vale? ¡Que yo de esto sé mucho... y nunca hay una bomba en una papelera!
-Vale, papá; te dejo que me tengo que limar las uñas mientras veo por la tele cómo se la das a los policías. ¡Chao!
-¡Adios, hija! ¡Ah..., y gracias: mira que si por esto me dan una pensión mayor!

¡Vamos que ya podía el bueno de don Ramón María ponerse a escribir con humor desgarrado e imagen grotesca! ¡Un aprendiz, al lado de esta familia!

Eso sí: lo que no fue "esperpento" es que el PSOE violó de manera consciente y deliberada la jornada de reflexión y alentó, enviando millares de mensajes de móvil desde su propia sede, a que numerosos energúmenos se concentraran, cual alimañas rodeando a su presa, frente a las sedes del Partido Popular para culpar a este partido de atentado, olvidándose de los terroristas y berreando aquello de "asesinos".

Claro... ¡había que saber! Pero, después de votar... ¡apología de la ignorancia!

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SA

La jornada electoral del 14 de marzo de 2004 se vio alterada en gran medida por la actuación de algunos votantes, sobre todo socialistas aunque también de Izquierda Unida -los cuatro que quedaban- y de la Ezquerra, con los insultos típicamente soeces de tales maleantes; pero el extremo de la infamia lo pudimos presenciar en nuestra Villa valderense cuando unos pocos exaltados profirieron aquello de que "los que votan al PP tienen las manos manchadas con sangre de los niños de Irak y de los muertos en los trenes de Madrid".

Como tales injurias sólo pueden alcanzar a entenderlas quienes en su alma sólo albergan odio y tienen el resto de su ridículo cuerpecillo cargado de veneno, pasaremos a otro asunto más interesante aunque igual de maloliente.

Por si hubiese sido pequeño el esperpento del supuesto vídeo reivindicativo de los atentados, para tratar de conseguir el efecto narcótico en la opinión pública (a fe que en un sector más bien lanar lo consiguieron) se monta otro "paripé" en las vías del AVE el 2 de abril con un artefacto simulado que estaba preparado para no estallar -no sé a qué me recuerda: ¿Azorín, la "13"?-, pero que llamaba lo suficiente la atención como para ser detectado con facilidad.
Eso sí, esta vez con mucha parafernalia: perros policía para detectar explosivos, robot teledirigido para "tantear" el artefacto...
¡Claro, es que era en el campo, no había habitantes y sí había muchísimo espacio donde cobijarse! ¡No iba a ser igual que en el episodio de la "13", que "un sólo hombre" se enfrentó a ella a "cuerpo gentil"!

El 3 de abril se produjo la controvertida "explosión de Leganés". Recuerdo que estaba aquel día con mi familia tomando un vino en el bar del jubilado cuando, antes de las 9 de la noche, mi cuñada recibió la llamada de un amigo informándola de que "los islamistas de los trenes habían reventado un piso en Leganés con ellos dentro cuando iba a entrar la policía".
Atentos al Telediario que comenzaba a esa hora no vimos ni oímos nada hasta bien pasadas las 9:30, cuando, sin imágenes aún, se dio la noticia.

Hago esta referencia familiar porque me parece esclarecedor el detalle de que ya estuviese corriendo la noticia antes, incluso, de anunciarse en TVE o en emisora de radio alguna -como hemos sabido después-, y, sobre todo, porque resulta muy significativo tal coincidencia con la versión oficial, pues el amigo era... un agente de policía.

La verdad de este asunto de Leganés es muy otra: es falso de toda falsedad que allí se "inmolase" terrorista ni islamista alguno. Esta es mi opinión.
Con toda seguridad se puede afirmar que en ese piso no había nadie vivo antes de que se produjera la explosión que, ¡oh casualidad!, fue grabada convenientemente por la cámara de un vecino que "se olía algo raro allí".

El 3 de abril de 2004, en Leganés, y para desgracia de todos los españoles de bien, sólo murió un agente de los GEO llamado Francisco Javier Torronteras, de 41 años. El primer muerto -asesinado, más bien- en 40 años de historia de ese cuerpo especial de seguridad. Vaya este artículo en su memoria.

No es sólo que en el sumario del 11-M existan tres versiones distintas de lo sucedido aquel día, ni tampoco que el confidente "Cartagena" declarase que ese era un piso "controlado" por la policía, donde ya se habían practicado detenciones por asuntos de droga con anterioridad, es que, además, allí no había sangre -más que la del GEO-, ni se hicieron autopsias a los supuestos suicidas, ni hay vecino alguno que viese alguien vivo en aquel piso ese día, ni apareció ningún casquillo de los supuestos disparos que hicieron.

Por no detenerme en más detalles (que son muchísimos) como las falsas llamadas "para despedirse de la familia", el fax que nunca llegó "desde ese piso", el vecino policía experto en escuchas, los papeles de la ETA, los pantalones puestos al revés, los dedos de varias manos que no aparecieron, los envoltorios de cartuchos de dinamita que podrían provenir de Santa Elena de Jamuz "sin ir más lejos", los inhibidores de frecuencia del coche de Díaz de Mera, a la sazón, Director General de la Policía, etc., etc.

Por cierto, este "capítulo de Leganés" sigue sin ser juzgado, ¿por qué será?
Al igual que la profanación del cadáver del malogrado Torronteras, ¿por qué?

¡Ah, ya entiendo: este asunto de la explosión de Leganés es lo que en puridad se llama "cierre de expediente", es decir, había que localizar a todos los presuntos autores de la masacre del 11-M y que se inmolaran, que es lo que manda el Corán; porque así estarán ahora en el paraíso con las cien huríes permanentemente vírgenes por barba! Ya, pues... ¡UN JAMÓN!

El mensaje subtitulado "DÍA 13: ´MENTIRAS ARRIESGADAS` es el capítulo VII de este hilo titulado IRIDISCENTE FABIA.

A imagen de aquel noble visigodo que dirigió la lucha de los astures contra los musulmanes allá por el siglo VIII, surgió un héroe contemporáneo llamado Francisco Javier Lavandera Villazón: un "don Pelayo" de nuestro tiempo.

Si la victoria que dio origen a la Reconquista se libró en Covadonga, el inicio de la "nueva Reconquista" que, a buen seguro, va a ser el esclarecimiento de la autoría de la mayor masacre terrorista que ha sufrido España en toda su historia, será siempre recordado por el nombre de "la cinta de Cancienes".

Quiso el destino -y un guardia civil auténticamente benemérito del cuartel de Cancienes- que conociéramos los españoles de bien el contenido de una conversación que demuestra de manera clara e IRREFUTABLE que EL 11-M NADA TIENE QUE VER CON LA "GUERRA DE IRAQ", NADA TIENE QUE VER CON UNOS "ISLAMISTAS" Y NADA TIENE QUE VER CON NINGUNA "TRAMA ASTURIANA DE EXPLOSIVOS".

¿Por qué? Porque la cinta de Cancienes estaba grabada en agosto de 2001.
Y, por tanto, en aquella fecha nadie sabíamos quién era Bin Laden, ni su madre, ni su padre, ni si tenía perro que le ladrase; ni se conocía más que la guerra del G. Pérsico (primera parte de la guerra de Iraq, dicho sea de paso); y faltaría casi un mes para que sucediesen los trágicos atentados de Nueva York y Washington: 11 de septiembre de ese mismo año. ¿Qué "guerra" hubo antes del "11-S"? ¿Cuál?

¿Y qué decía Lavandera en esa cinta? Informaba a la Guardia Civil de que dos "piraos", Toro y Trashorras, vendían dinamita a la ETA y buscaban a alguien que supiese montar "bombas con móviles". Y todo ha resultado cierto.
¡Pero no para que se montase ninguna bomba con ningún teléfono móvil en los trenes de Cercanías de Madrid tres días antes de las elecciones generales!

CIERTO PARA OBSERVAR QUE LA "VERSIÓN OFICIAL" ES FALSA DE TODA FALSEDAD. Falsa como un euro de madera.

¿Quiere esto decir que el 11-M tiene alguna relación con la ETA? Es posible; por la composición del explosivo, utilizado habitualmente por la ETA. Pero lo que resulta evidente es que la ETA no intervino en la "consumación de la mascarada". Desde luego, sería el mal menor que las bombas hubieran sido colocadas por etarras. La otra opción posible, y en mi opinión, más probable, es más siniestra.

Lo que resulta seguro es que aún quedan personas de bien en nuestro país. F. Javier Lavandera es una de ellas: unos policías dejaron morir ahogada a su mujer; su vida se ha convertido en un peligro constante, aún más desde que renunció a ser testigo protegido; unos desconocidos le dispararon cinco tiros cuando iba en el coche; le han llenado el portal de sangre; se encontró las fotos de la autopsia del cadáver de su mujer en el buzón; cierto día "apareció" una caja sospechosa bajo su coche, etc.

¡Qué triste resulta atisbar que en España no hay peor cosa que decir la verdad!

Y es que toda aquella "trama asturiana" es una completa y total falacia.
Como falso es todo aquel "cuento" que nos intentaron colar del "traslado de los explosivos en... autobús, en dos coches por... Burgos, con... nieve, con... multas", etc., etc.

Quienes sostienen semejante versión en relación con el 11-M mienten por toda la boca. Como lo hicieron, por cierto, cuando algunos periodistas, estos sí, valientes investigaron a los G.A.L., ¿verdad Rubalcaba, portavoz?
"Otros" los llamaban "locos", ¿recuerda el lector? Pero la verdad salió a la luz. Y el tiempo dio la razón a los héroes y apagó las voces de los "villanos estafadores de la palabra".

Esos que "mienten de noche y de día. Mienten a diestro y siniestro.
Mienten al Ave María. Mentirán al Padre Nuestro".

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