Un poco de historia

Los primeros documentos escritos sobre Sta. Olaja datan del año 928, cuando el rey Alfonso IV dona al monasterio de los Santos Facundo y Primitivo de Sahagún una serena in Sancta Eulalia subtus Corabita, más tarde en el año 942 existe ya en este lugar una iglesia, con dos presbíteros, dedicada a Santa Eulalia, su patrona, de donde el pueblo recibe su nombre.

En el S. XVI además de dos iglesias con cura propio, una dedicada a Santa Marina y la otra a Santa Eulalia, existía una ermita bajo la advocación de S. Juan.

Ya en el S. XVIII, el catastro que mandó hacer el Marqués de la Ensenada nos dice que en el pueblo había 32 casas habitadas, 1 deshabitada, 2 molinos: uno con dos ruedas y el otro solo de una, 1 taberna y 1 panadería, que estaban ambas atendidas por el concejo.

En el S. XIX, Madoz escribía que su clima era sano, sin que se padecieran más enfermedades que las causadas por los cambios estacionales, había por aquel entonces unos 127 h.

En el S. pasado, según el padrón que realizó Mourille, en 1.920, nuestro pueblo contaba con 220 h., a mediados de siglo Santa Olaja era uno de los lugares del entorno con más juventud, teniendo dos cantinas, la de Araceli y la de la tía Gregoria, había tambien un salón de baile a donde venían los mozos y mozas de todos los pueblos cercanos.

En la actualidad, solo quedan aquí 35 ó 36 personas. La mayoría jubilados, algún niño y 2 ó 3 ganaderos.

Se cultivaba el lino, la linaza, el centeno y otros cereales.