Saelices del Payuelo - Leon

Si alguien ha tenido la suerte de estar esta mañana en Mansilla, que nos lo cuente,es una feria de la que siempre me acuerdo, las castañas, las garrapiñadas,las cachas de caramelo,el motón de alforjas que tejia mi padre y mi madre para ese dia,las hogueras que hacíamos en el camino Mansilla, nos lo pasábamos a lo grande nos conformábamos con muy poco,saludos

Tejedor Samartino ya no es lo que era, ya no se hace feria de ganado, ya no se vende grano, tampoco se encuentran las cachas de caramelo que tanta ilusión nos hacian, etc. El Samartino de ahora se limita a la exposición de maquinaria agrícola y al inmenso mercadillo que se prepara por todas las calles de Mansilla. De todas formas hay tantísima gente que es imposible aparcar el coche. Este año amaneció el cielo gris, por la mañana lluvió algo y por la tarde lluvió mucho.
Saludos

Tejedor,

tengo algo para tí , para una vez que no vas al pueblo te quedaste sin ello...

Envíame la dirección de tu domicilio y lo recibirás rápidamente, pulsa a la izquierda de este escrito "ENVIAR PRIVADO" y solo lo veré yo

salud.

Ya pasó Samartino y se levantó la veda del cerdo. Ahora estamos en cuarto menguante y con heladas, para que cure bien el gorrino.

¿Se escucharán gruñidos en el pueblo?

¿Se fabricará alguna pedorreta? ¿Pasaría este juguete, hoy día, los controles sanitarios pertinentes? ¿Os acordais de cuántos niños enfermaron y murieron entonces, presa de insufribles dolores, por jugar con tan primitivo globo?

Muchas histirias acerca de ello he oido yo J.Payuelo, anímate y cuéntate una

Yo ya he puesto el árbol de Navidad, es decir, un par de varales de chorizos y salchichones, otro de huesos, costillas y solomillos y un jamón en salazón.
Con estas heladas, orean en pocos días y tenemos el avío para todo el año, esperemos que las moscas no pongan el culo donde no lo tienen que `poner y dejen a la carne curarse en paz.

tejedor si hoy hicieramos las fogatas de antaño, si quemaramos las zarzas del camino de mansilla, seriamos delincuentes y no tradicionales, se ve que eres del 54 mas menos, un abrazo y no sueñes que sahelices y los saheliceros-censes somos y estamos en el mismo sitio

A cuento de San Martín y el tema sobre los cerdos. Espero que nadie se sienta aludido. Mi intención es contar si la memoria me dicta mi experiencia sobre el tema de matar el gocho. Algunos colegas seguro que tendrán las suyas vividas en la infancia, sin duda divertidas de escuchar.
Recuerdo cuando se hacía en casa, yo al primer gruñido me metía debajo de la cama con la cabeza bien tapada, pero en aquel incómodo escondite entre temblores y miedos yo sentía algo más, lástima y sentimiento pues por más cerdos que sean estos animales, también se les coge cariño.
¡Y que corta es su vida!

Pero había un segundo episodio de verdadero pánico, cuando ya chamuscado y vaciado ponían el banco mortuorio debajo de la escalera lugar fresco y en penumbra donde colocaban al animal espatarrao y, allí pasaba la noche. Este lugar era un paso obligado para salir a la cuadra o, al corral, que al pasar involuntariamente tenia que mirar aquella imagen estática con los ojos abiertos que me miraba y miraba y, me seguía como una sombra.

Esta parte ya resultaba más agradable, cuando sacaban los chorizos, morcillas y más, al corral a secar había que cuidarlo no saltara algún perro. Eso era tarea mía, y vaya que los cuidaba, día, a día observaba y tanteaba su textura, ya en su punto iba tirando de aquellos pingos de carne que colgaban, bien de los huesos, lomos o solomillos, pero con discreción, con cautela para no levantar sospechas. ¡Resultaba un pellizco delicioso!

¡Son vivencias que dejan posos.!


Una frase: “Trece morcillas tiene un cerdo, ni te las doy, ni te las cuento “

Nunca entendí bien la expresión morcilla sin atadero, como tampoco entiendo bien lo que sigue:

Como muy mal puede ser
morcilla sin ser atada
así menos puede haber
mujer linda sin tener
tacha de que ser notada.

Lo más cierto y verdadero
es que nunca falta un pero
si puta si no borracha
y es decir linda sin tacha
morcilla sin atadero.

Aquí necesitamos un magisterio.

entiendo que el autor encuentra tan extraño una morcilla embutida sin atar, como una bella mujer sin ser criticada de rebuscado defecto

en fin, prefiero las ciencias...

Lo más genial de la poesía, es que da lugar a la interpretación del "libre albedrío"(otra cosa diferente, es lo que el poeta quisiera decir en realidad)pero como (casi todos) se lo llevan a la tumba, pues tenemos nosotros la potestad de permitirnos nuestra interpretación propia, y cualesquiera que fuere, sería válida; eso sí, dotada de un mínimo rigor.
Bajo mi modesto entender,se pone de manifiesto, que la mujer atractiva no siempre es perfecta-sino más bien- es bastante común un fondo defectuoso cual morcilla sin atar.De ahí, el dicho tan común de "la suerte de la fea, la guapa la desea"
P.D.
No descarto yo aquí en el dicho anterior, un salpicado de cierta envidia.ante una mujer hermosa ¿quién no se rinde?
FELIZ DESCANSO.

Sea como sea, parece algo peyorativo referido a las mujeres lindas y sin tacha (o con falsa facha). ¿Envidia?. ¿Realidad?.

Un tema espinoso.

Todo por las morcillas. Donde estén las de cebolla, que se quiten las de arroz. Aunque "enriquezcan" el aliento.

J.P. te sugiero que pruebes las de arroz(que aunque nos gusten más las nuestras), merece la pena.A mí me costó rendirme a catarlas, pero cortadas en lonchas del grosor de un dedo, rebozadas con harina y fritas a fuego fuerte -que se ponen doradas y tiesecitas-, están bien ricas.¡buen provecho¡

Nisma: estás hablando con un cazurro. No desprecio las de arroz, pero me quedo con las autóctonas.

Tengo una fijación mental que no sé en qué momento de la infancia se me instaló. Lo cierto es que tengo asociada la romería de la Virgen del Camino con las morcillas. Siempre van juntas. Paso por el pueblo de La Virgen del Camino e inmediatamente me vienen a la mente el olor a morcillas, y veo morcillas y me acuerdo de La Virgen del Camino. Tendré que consultarle a Her Frëud.

Esto es más lógico: De malas tripas, malas morcillas.

1º jejejejejejej, J.Payuelo, debe hacer 1 mes escaso trajeron de Burgos y típicas de Burgos morcillas de arroz, estaban de rechupete aunque me gusta más las otras de sangre. Apa alegría que de eso se trata.

En las bodegas de Valdeminbre ponen un plato de morcilla tipica leonesa de cebolla que no le supera niguna de Burgos ni de Sebastopol. Te arrebaña el palto hasta que le salga brillo.... Uhmmmm .. !!! Uhmmm!!
Que sabrosa esta la morcilla de cebolla.
Saludos desde Solana Beach, ya en tierra firme.

¡Ándales¡, ¡pues claro¡ que es indiscutible "la nuestra"pero CAZURRONES, que no es malo probar otras cosas buenas y así ganamos en las comparaciones ¿o no? Feliz descanso.

La morcilla reciente, cómela con tu pariente.

(A ver si cuela y me toca)

¡Pues a buena prte fuiste¡ ¡cómo si supiéramos hacerlas¡ olisquea cerca de las foreras con solera, que yo sé que una de la otra esquina del pueblo, las hace sabrosonas (y otras no foreras ¡claro¡).Anda vivo( que aunque no sea pariente tuya)igual se ablanda.

Si me ofreces algo a cambio... Puedo conseguirte un plato de mondongo de pata negra.

Hubo un tiempo en que cuando se hacía la matanza, se llevaba la prueba a los parientes ... y también a algún amigo.

A los amigos nó lo sé ,pero a los parientes sí que lo conoci y era una tradición bien sana ya que la matanza era necesaria en la época.
También recuerdo lo de la prueba de la miel ,en tiempo de cata, buén recuerdo nos ha traido jp a la memoria.

Si señor, era una de tantas buenas costumbres,o tradiciones, que con el tiempo se han ido perdiendo, con lo que nos gustaba recibir el trocito de tocino, chorizo, y la morcilla, y poder comparar sabores,en cada casa eran distintos,no tenia nada que ver el de la tía Bernarda, con el de la tía Petra,o con el de casa tío Fermín, todos buenísimos, pero ninguno se parecía al que hacía mi madre, y cuando ibas a casa de algún amigo a merendar eran completamente distintos, espero que para estas Navidades, estén ya un poco oreados, saludos.

¡Hombre¡ Sangre de roble.menos mal que te has dado por aludida con el "mondongo" ya iba yo a liarme a dar voces a ver si nos oías leñes;la parada la has hecho larga de narices ¿que tal tu gente menuda? ¡claro¡ será entre otras cosas la culpable de que no encuentres tiempo ni para respirar(pobrecitos, con lo lindos que son)Feliz descanso

Ya Nisma ya, estoy un poco atascada mucho trabajo y poco tiempo.

Jupinis y JP. En mi casa todavía se estila lo de la prueba de la cata de miel y del mondongo.

Yo lo llamo hacer amigos. Un seto de miel se lo damos a TODO el que lo pide, normalmente gente de edad que lo recuerda con añoranza, de sus abuelos de sus tíos, o gente que no lo ha probado nunca y tiene curiosidad....

Tanbién se lo damos a quien sabemos que lo agradece, ese es el caso de la vecina de enfrente que con un bocado de cera es la mujer más feliz del mundo.

Así que si de verdad os hace ilusión un trocin de seto o de panal como dicen ahora, apuntaros en la lista y en su tiempo se os tendrá en cuenta.

En cuanto a lo del mondongo... hay un vecina del pueblo que cuando le ha tocado dice que la sabe a langostinos. Hacía tiempo que no la tocaba, pero este año... como le dije a JP. nos ha ofrecido algo a cambio, y le tocará su ración de langostinos.

A ver... y lo de "algo a cambio" no lo interpreteis mal, que es poca cosa lo que pedimos.

De todos modos a quién no le hagan morcilla en casa y haga mucho tiempo que no la come y tenga mucho antojo... que hable ahora o que calle para siempre... que nuestro gocho Antoñito, tiene los días contaos.

Seguiremos haciendo amigos...

Agradecimientos a sangre por su forma de hacer amigos,respetando las buenas costumbres que conocimos antaño y que a mí personalmente me há tocodo en lo mas hondo.
Yó nunca olvidaré aquello aunque pensaba que se habia ido perdiendo.
Ni hablo ni callo pero si alguna vez tengo la ocasión la aprovecharé.

¡Remoños¡, pues si que tienes bien grabada en el disco duro la frasecita ."que hable ahora, o calle para siempre".Se ve que todavía tienes las velaciones como de ayer. Aver..., a ver..., si te temías algo
P.D.
Como yo soy una de las afortunadas que pruebo el rico panal "mutis", que está DELICIOSO;si con suerte llega Navidad y todavía huele a morcilla en casa de Vitorina, pues eso, la oleré.Buenas noches- días ¡yo que se¡para cada cual lo que le convenga.

Jupinis, si alguna vez sé que estas por el pueblo "a tiempo" lo tendré en cuenta.

¡Pobre Antoñito Sangre de roble¡ ufffffffffff ya estará en jijas y mondongo, ¡que pena que no te podamos ayudar en tantas faenas hombre¡aunque sólo fuera para llenar las morcillas(aunque lo solucione en parte el arcón) o darle a la manivela par que tú agilizases más todavía en el choriceo. ¡Claro¡ que tampoco creo que se trate de correr porque tú sabes muy bien "mimar" las tripas y los percances del reventón serán los mínimos;ten paciencia,que luego tienes el apaño para el año entero.Buenas noches.

Hemos dejado de lado las castañas, con el buen olor que daban a la lumbre mientras se asaban. Y al paladar más tarde, después de soplarlas en las manos hasta que dejaban de quemar. Las humildes castañas que llevaban los gallegos y asturianos y cambiaban por centeno: dos heminas de castañas por una de centeno. Supongo que variaría el precio de una cosecha a otra, pero yo recuerdo permutarlas en esta proporciòn.

Al leer lo de las castañas me ha dado un vuelco el corazón, os explico, el pasado 23-24 de noviembre un gran leonés de nombre Paulino Carro, viajó a Tedejo, lugar donde había nacido y desde que era pensionista viajaba muy a menudo, NO SE SI, cometió el error de buscar castañas en el terreno, y mira por donde los cazadores no se percataron de su presencia y uno de ellos le disparó y cayó creo que en el acto al suelo en presencia de Teresa su mujer, yo todavía no me he recuperado y creo que quien les conocían tendrán el mismo problema que yo, mañana jueves tenemos una misa por Él en la parroquia. LAS CASTAÑAS, seguro tenía su final destinado y en su pueblo.

¡Menuda putada!. Yo he pasado miedo buscando setas por montes, y me he cruzado con algún cazador, así que tomaba ciertas precaciones. Pero cuando te lo encuentras así, tan cercano y real, acojona.