SANTIAGO A FISTERRA.BENEDITO A SANTIAGO Después de la crucifixión se dedicó a predicar la nueva fe. Una tradición española no documentada supone que Santiago viajó a Hispania para predicar por encargo del propio Jesucristo y que se le apareció la Virgen María en Zaragoza (en el lugar en donde luego se levantó la basílica del Pilar). Santiago murió decapitado durante las persecuciones contra los cristianos que realizó el rey de Judea, Herodes Agripa I Santiago murió allá por el año 41 a el 44, poco antes de la Pascua en Jerusalén. Y no es hasta el siglo IX Donde un obispo gallego dice que vio unas luces en un monte, se dirigió hacia ellas y encontró un esqueleto decapitado y dijo, mira si es el esqueleto de Santiago. Según cuenta la iglesia el esquileo fue trasladado asta Compostela desde Jerusalén en un barco de piedra, con piloto automático. La iglesia no ha permitido nunca hacerle cualquier prueba a los huesos. La tumba del apóstol Santiago viene a descubrirse en un momento difícil para España. A comienzos del siglo VIII la invasión de la Península desde África por los musulmanes supuso el fin del reino cristiano visigodo. La monarquía y la nobleza se replegaron hacia el norte, quedando refugiadas tras las montañas de Asturias. El poder político visigodo quedó herido de muerte y los musulmanes de hicieron con el control de casi la totalidad del territorio peninsular. Cuando, un siglo después, se descubre la tumba de Santiago, el reino astur no había logrado apenas ningún avance en la reconquista. Tampoco para la Iglesia el siglo VIII había sido fácil, pues las controversias teológicas hacían sufrir heridas de ruptura en la cristiandad y ofrecían el triste espectáculo de una época de concilios y contra concilios. España necesitaba un motivo de unión para enfrentarse al invasor moro y que mejor en aquella época donde la religión cristiana dominaba Europa, montar la tumba del apóstol en uno de los pocos lugares que todavía no habían invadido los moros. Precisamente uno de los primeros peregrinos fue el rey Alfonso II. España necesitaba la ayuda de el cristianismo para afrontar la reconquista. Los primeros que visitaban la tumba del apóstol llegaban en barco hasta algún puerto de Asturias, pasando por Oviedo y desde allí entraban en Galicia. A éste se le llama el camino primitivo. Las peregrinaciones se fueron intensificando a medida que se conocía la noticia del hallazgo. Los avances en la reconquista de tierras a los musulmanes abrieron nuevas vías de peregrinación. Ya a finales del siglo IX, Alfonso III consigue fortificar la línea del Duero y repoblar la zona. La meseta quedó libre de dominio musulmán y se favoreció el camino seguido por la mayoría de los peregrinos a Santiago, que es el llamado camino francés. A finales del siglo XI, Alfonso VI alcanza en la Reconquista la línea del Tajo, conquistando Toledo, lo cual abre una nueva franja de tierra libre y se crean los caminos del sur y se amplían los portugueses. Las peregrinaciones supusieron un movimiento de personas nunca antes visto en Occidente. Como se puede ver el camino de Santiago no es mas que el camino de la reconquista. El mito del apóstol santo no es más que un fraude ¿cómo es posible que un idolillo de palo revestido de oro, plata y piedras preciosas pueda alcanzar tato poder?. Aunque parezca mentira lo han proclamado adalid del nacional catolicismo, fuhrer supremo del fascismo españolista y caudillo del imperio hacia Dios. En su nombre se han cometido los crimenes más espantosos, con la espada y la cruz los conquistadores sometieron a los gentiles, esclavizaron a los bárbaros herejes, destruyendo pueblos y naciones y expoliando sus riquezas. |