Riego de la Vega - Leon

El Vaticano encubrió los abusos de un cura a 200 menores sordos en Estados Unidos
El reverendo Lawrence C. Murphy trabajó durante más de 20 años en una escuela para niños sordos de Wisconsin, donde presuntamente se produjeron los abusos que el entonces cardenal Ratzinger conocía pero optó por proteger a la Iglesia del escándalo.

Pero lo gordo no es que quisieran tapar estas infamias. Ni tampoco que éste fuera uno de los miles y miles de episodios de infamia con que la iglesia ha escrito su historia del siglo XX. Son miles y miles los niños emocionalmente lesionados durante el pasado siglo. Y no digamos en los siglos anteriores. Y no hablemos de los hijos no reconocidos. Y tampoco entremos en temas en las afinidades políticas con los totalitarismos nacionalistas,desde Franco¿ hasta Pinochet.

Lo gordo, lo verdaderamente gordo, obsceno hasta la náusea, es la tradicional práctica de cambiar de diócesis a los monstruos atrapados con las manos en el niño. No apartarles de la iglesia, no: trasladarles con sus baúles de inmundicia pederasta a otros lugares, para que su ascendente sobre las gentes humildes siga causando perjuicios a generaciones enteras.
Eso ha hecho la iglesia. Eso ha hecho Ratzinger.

Suerte que tienen que su dios no existe (por eso hacen lo que hacen y viven tan tranquilos los muy canallas).

Estamos en el año del Orden. Al principio significa que a todo el desorden se lo va a llevar por delante. Por eso lo pone primero. Para ordenar una casa primero hay que limpiarla.

No pienso que el Vaticano haya creido jamás en Dios, al menos en el Dios real y en el que enseñó Jesucristo. Todo lo que es Vaticano, todo el poder que obtuvo lo fue a través del robo de sus palabras y en la manipulación-utilización de las mismas y de su figura en la cruz. Te aseguro que con tanto descalabro van a creer en él, mejor dicho, van a tener temor de él. Por temor sometieron, por temor serán sometidos por su propio temor. El temor de ser descubiertos.

Un saludo