Riego de la Vega - Leon

La Navidad ya es definitivamente un rito pagano. Únicamente se celebra para que el Corte Inglés venda más trajes de Emidio Tucci. España es una Navidad donde según Rajoy la crisis ya ha pasado a la historia. ¿Pero qué historia?, me pregunto yo. No hay historia en España, sino puro presente, gente que en estas navidades en vez de turrón tendrán que morder piedras, gente sin empleo o sin casa, gente sin alimentos.
Navidades blancas que vemos cómo relucen tras los anuncios de televisión, tan bonitos, con esa musiquita tan dulce, tan sinfónica, donde las modelos venden perfumes medio en cueros y con los cabellos rubios inundados de Cloé. Ah, la Navidad española.

La Navidad española es un Rajoy a golpe de BOE. La Navidad española es un Montoro que no baja el IVA. La Navidad española son mujeres embarazadas a las que les han desahuciado y a las que nunca les tocará un décimo de la lotería. ¡Qué bonito el anuncio de la lotería nacional por Navidad¡ Dan ganas no se sabe si de llorar o de vivir esta España nuestra así como quieren que la vivamos, es decir, entre la mendicidad y las preferentes de Bankia, entre la nueva elección de Rusell o los parados que necesitan un nuevo Plan Marshall para probar la leche en polvo. España es la tradición, nunca la modernidad. Hace tiempo que dejamos de ser felices. Hace mucho tiempo que el Gobierno español ha evitado erre con erre nuestra felicidad. Ahora somos no pobres, sino pobretones. Pero la Navidad cruje de parlamentarismo y de legislaciones abstractas en donde el capital sólo es usado por los de siempre, los que van a besar los pies del biennacido, los que van a misa en Nochebuena, los que viajan en aviones privados a Miami en Nochevieja. Ah, esta España invertebrada. ¡Cuánto echamos de menos a Ortega y Gasset¡ Seguramente Ortega le hubiera dicho al Gobierno español que rectificara su actitud a la hora de usar el presente como historia. No hay historia, diría Ortega, sino el yo de las circunstancias ahí plenas, saboteadas por unos antoligantes que han secuestrado la nación para hacer con ella lo que les venga en gana. ¡Qué difícil es vivir con unos políticos que todavía no han comprendido que lo que necesita este país es presente, instantes, momentos dados en la hora en punto del reloj. Son las cinco de la tarde, las cinco en punto de la tarde, decía Lorca. Pero a esa hora los españoles vamos arrinconándonos poco a poco en las fronteras que se amontonan entre la riqueza y la pobreza. España necesita el milagro del Papa Francisco.

España está herida de Navidad, está hueca de soledades solas, de caminos amputados por donde ni los rebaños cruzan. España es una Navidad de corrupciones, de tarjetas negras como la pena, de leyes mordazas, de vallas con concertinas, de duelos entre el bien y el mal, de bancos que no dan crédito a las pymes, de ventanos en donde aparece don Mariano y su historia. ¿Pero a qué historia se refiere don Mariano? Pero luego llega el PIB y el déficit y la deuda externa y la macroeconomía y todos los españoles nos preguntamos por qué es todo tan difícil, por qué no habrá una salida de verdad y en virtud de esta crisis que los mismos que la crearon ahora dicen que ya es historia. Pero por diós, que no nos tomen más el pelo, que salgan todos los ministros anunciando un turrón de Jijona por los canales del Opus Dei. ¡Qué país¡ ¡Qué vergüenza¡ ¡Cómo les gusta a los clanes políticos tomarnos por tontos¡ Aquí lo que hace falta es que puenteemos la Navidad y nos pongamos a trabajar todos los españoles para producir una España mejor, con el cubismo de la justicia, con la cuchara de la igualdad, con la trementina de la libertad. Es necesario reformar la Constitución. ¿Qué dirá Felipe VI en su mensaje de Navidad por el ventano? ¿Nos hablará también de historia? España se cae a trozos, producto de un atentado contra la dignidad, la buena ética, la aquiescencia y el conocimiento del presente. Pido presente para España. Lo grito por todas las ciudades en donde los niños no van a tener demasiados juguetes para divertirse dentro del Parlamento.

España no es navideña, pues hay casas vacías de vida, escalfadas de odio, abigarradas de silencios sonoros en donde los españoles hemos aprendido ya durante todos los años que aquí se necesita una heroicidad, algo epopéyico, para que esto cambie. O reformamos este país o las siguientes navidades seguiremos matando con cruceta en la nuca a este país al que tanto amamos.

Infelices ciudadanos;os deseo que paseis unos felices días de fin de año y que el que viene2015 sea mejor para todos ESCEPTO para los que dictan leyes injustas contra los ciudadanos mas pobres e indefensos,los ladrones,estafadores,defraudadores y todos aquellos que se aprovechan de los obreros y del sudor de los débiles etc,etc......