Riego de la Vega - Leon

Como demócrata (ni siquiera como republicano) quiero expresar mi repugnancia y profundo desprecio por la miserable traición del PSOE a los españoles en este asunto. Hay gente en este país "y mucha gente" que jamás han podido votar al Jefe de Estado, y ahora el PSOE le arrebata ese derecho, le roba la fe en la democracia y nos escupe en la cara. ¡¡Qué vergüenza!!, ¡¡qué infamia!! No pido la República, y soy consciente que, probablemente, la mayoría de este país es monárquico, pero ¿por qué no se permite que los españoles, de izquierdas y derechas, voten en libertad y decidan? Una última advertencia: ni yo ni los 3 millones de españoles que en las ultimas elecciones votamos republicano (sin contar nacionalistas) JAMÁS reconocedemos en el nuevo Borbón otra cosa que un usurpador, un ocuka sin legitimidad al que NADIE ha elegido. Será el Rey del PSOE y el PP, el de la mafia, pero jamás el Rey de los españoles; ni por un minuto. Lucharemos con la democracia en la mano y no descansaremos hasta derribarlo a él y al régimen corrupto que le negó la democracia a los españoles.



Un gran error es considerar que el PSOE es un partido político de izquierdas.
¿Es acaso Felipe González de izquierdas?, ¿lo era alguno de los que fueron sus ministros?
¿Privatizar las grandes empresas nacionales era de izquierdas? Felipe lo hizo muy bien y luego fue secundado por Aznar con el mismo acierto para la empresa privada, para sus amigos.
Cuando salimos de la dictadura, para España se estudió el modelo americano, que como se sabe está compuesto por dos grandes partidos, uno el demócrata de derechas y otro, el republicano de extrema derecha. Como quiera que salíamos de una etapa de 40 años de dictadura, el común de los mortales, en los inicios de la democracia, fue incapaz de distinguir si el PSOE era o no de izquierdas. Hoy día ya lo sabemos.
Si en el futuro otros partidos supuestamente de izquierdas tocan poder, serán domesticados lo mismo que en el pasado lo fue el PSOE conducido por el señor Gonzalez.al poder.
La diferencia entre PP y PSOE en lo económico es insignificante, pero si hay algún distingo es en lo social.

Así, mientras la militancia acude a las manifestaciones en apoyo a la III República, las juventudes del partido o diversas agrupaciones solicitan un referéndum constitucional, la esclerótica dirección del PSOE con el muerto viviente Rubalcaba a la cabeza se alía con el Partido Popular Nazionalcatólico en defensa de la corrupta monarquía y el mantenimiento del status quo de esta pseudodemocracia agónica, que no representa a los ciudadanos y que sirve de tapadera para que el expolio peremne de los de siempre: banqueros, gran capital, iglesia y ejército continúe año tras año sin que nada cambie. Esquizofrenia tan evidente que ahora ya solo falta que su militancia y la ciudadanía en general abran los ojos y certifiquen en las próximas elecciones el entierro del cadáver hediondo en el que se ha convertido el PSOE. Descanse en paz.