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¡¡¡OMAÑA NO ES MARBELLA!!!

Queridos vecinos, frente a este ambiente de elecciones en los que unos critican a Pano y otros al que parece su posible sucesor, Julio…nadie se ha percatado de que Omaña se hunde y todos permanecemos indiferentes ante lo que viene.
En estos tiempos de fraudes y grandes especulaciones de terrenos, nuestra tierra no se ha salvado. Una gran urbanización en plena reserva de la biosfera (como algunos presumen) se llevará a cabo y todo a golpe de talonario. El pasado día 23 el señor alcalde convocó un pleno para así con su mayoría absoluta votar un nuevo plan de ordenación del territorio, es decir, para que nadie ponga pegas a esa urbanización y todo sea legal.
Pero nadie ha pensado en las consecuencias de ello y yo les voy a contar algunas:
1º Sólo sacarán beneficios el promotor, el alcalde y alguna boca importante que haya que callar; rápidamente 174 chalets por 120.000 € de media que costarán, hacen un total de 20.880.000 €. Y los costes por hacerlos serán de unos 8.000.000 €, quedan 14 millones de euros a repartirse, juzguen ustedes mismos.
2º Se habla ya de que ésta es sólo la primera fase, después vendrán más proyectos de este tipo y más pueblos quedarán en poder de sus carteras, mientras las casas de nuestros pueblos se caen, los pueblos quedan desolados en invierno y es imposible que nuestros hijos se queden aquí.
3º En esta urbanización vivirán unas 500 personas que tendrán el poder sobre toda la comarca, ya que habrá más gente ahí que en el resto de nuestro ayuntamiento, necesitan luz por lo que construirán otra línea eléctrica cuyo paso afectará a pueblos que ni se lo imaginaban. También necesitan agua para lo que el alcalde se ha comprometido a darles servicio…como no, traerla de un río (que cada verano amenaza con secarse) y devolverla allí. Y yo me pregunto: ¿qué opinan los pueblos de toda la ribera del Omaña de que sus aguas discurran mucho más contaminadas? Entre otros, Riello que bebe de ellas.
4º Por supuesto, el turismo rural desaparecerá y con él los valientes empresarios que decidieron apostar por quedarse. Porque ¿quién quiere salir de Madrid para descansar y no oir ruido a un pueblo de 500 habitantes como será Pandorado?
5º Los comercios, restaurantes o panaderías, no se piensen que les vendrá bien esto, ya que en la urbanización se construirá todo esto y más, para que la gente que viva allí tenga todos los servicios y no tenga que salir a pasear por la zona, viéndonos así como bichos raros.
6º Tenemos el privilegio de que Omaña es recorrida por la Cañada Real de la Plata (la más importante de España) por la que durante siglos han pasado ganaderos; y casualmente será pisada por la urbanización.
7º Poco a poco la vida tradicional y sus ganaderos desaparecerán porque no interesa que un rebaño de ovejas ensucie los zapatos de unos veraneantes que vendrán como mucho un mes al año.
8º Esto es sólo el principio, con los años llegarán más urbanizaciones, los campos de golf, mini estaciones de esquí o los propios molinos, que nos acechan durante años y todo por haber una normativa urbanística municipal con manga ancha.
En definitiva, se cumplen todos los requisitos de un “pelotazo urbanístico”: un individuo que compra fincas rústicas a precio de peseta, un alcalde con poder absoluto que las urbaniza y un promotor especulador.
PD: ¿Y Autonomía Omañesa qué hace por las preocupaciones de sus habitantes?


¡ Homus Manium !