Vilches - Jaen

Hoy estoy solo como la una, solo conmigo mismo… Y me gusta, disfruto, le saco partido.

Hace algún tiempo esto hubiera sido algo impensable para mí. No me hubiera entrado en la cabeza que una persona “sola en su soledad”, que ya es decir, pudiera disfrutar de ello. ¿Cómo es posible poder encontrarse feliz y a gusto consigo mismo en semejantes circunstancias…? Pues aunque os parezca mentira, a mí me está pasando.

¿Será la edad…? ¡Madre mía, las cosas tan bonitas que pueden llegar a pasarnos cuando llegamos a los 50!.

No creáis que en mi soledad no echo de menos a mis seres queridos. Todo lo contrario, me acuerdo de ellos, siento que les quiero incluso más que cuando están a mi lado. Pero ahora quiero estar solo conmigo mismo, porque ahora y en este trance me examino, me cabreo y me reconcilio yo mismo. Y esto, creedme, es muy bueno.

En la vida diaria yo me doy cuenta que el 90% de mis actos, aunque son voluntarios, están condicionados a todo cuanto me rodea (trabajo, familia, pareja, amigos…). Nunca, o muy pocas veces, actuamos dejando a un lado aquello que es externo a nosotros, aunque sea algo inherente a nuestra persona. Y creo que es un gran error. No quiero decir con esto que nos olvidemos de nuestras obligaciones y de nuestros lazos afectivos, no. Pero sí que debemos dejarlos a un lado de vez en cuando, para dedicarnos tiempo a nosotros mismos. Esto es bueno, bastante bueno… para nosotros y para todos los que nos rodean.

Si yo me encuentro conmigo, disfruto, me cabreo, me reconozco a mí mismo… Y ME ACEPTO TAL COMO SOY, estoy dando un gran paso para poder reconocer y disfrutar de todas aquellas personas que me rodean.

En definitiva, creo que con la soledad, al menos yo estoy conociéndome. Cosa que tenía bastante olvidada, y la verdad es que ahora entiendo a muchos familiares y amigos que cuando tienen la oportunidad me suelen decir lo que hasta ahora no aceptada en mi persona.

¡Vaya tela, que razón tienen! ¡Hay veces que no me aguanto ni yo mismo!

Un saludo, por mi cuenta.

Y, has tenido que llegar a los 50, para darte cuenta que la soledad es necesaria, que es cuando realmente nos encontramos con nosotros mismos.
Yo, como sabes, me tiro horas y horas solo, vagando por diversos lugares y !SOY MUY FELIZ! es cuando mejor estoy, y despues hasta gusta encontrarte con tus seres queridos.
Sigue disfrutando compañero, que te lo mereces.
Un abrazo. J d N Roguemos.

Borrado por Foro-ciudad.com

La soledad es un buen sitio para reencontrarse.Pero al mismo tiempo, es un mal lugar para quedarse.