Conde pumpido, debio de irse ayer PUMPIDO SE AFERRA AL PODER PESE A TENER SU MANDATO VENCIDO POR EL CESE DEL GOBIERNO “Debió irse ayer porque su cargo está ligado a la vigencia del Ejecutivo que lo nombró”, explican fuentes jurídicas. En el Estatuto Orgánico del Ministerio Público no se contempla un fiscal en funciones. • El Fiscal General del Estado, Cándido Conde-Pumpido se resiste a perder el poder de la institución que preside. Eso es, al menos, lo que transmite al no haber dejado el cargo una vez que ya ha cesado el Gobierno de Zapatero que fue quien lo nombró. “el fiscal general debió cesar ayer con el Gobierno porque la vigencia de su nombramiento está ligada a la duración del mandato del Ejecutivo”. En otras palabras, “la legislación contempla que haya un Gobierno en funciones pero no un fiscal general del Estado”, subrayan. Esto es así porque el artículo 31 del Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal, reformado por la Ley 24/2007, establece que “el fiscal general del Estado cesará antes de que concluya su mandato, entre otras causas, cuando cese el Gobierno que lo hubiera propuesto”. Esta modificación legal se introdujo expresamente en el texto para evitar que el fiscal general pudiera ser cesado de un modo injustificado o por razones que el Ejecutivo considerase ajustadas a la legalidad vigente. Por su parte, el artículo 21 de la Ley 50/1997, de 27 de noviembre, del Gobierno deja muy claro que “el Gobierno cesa tras la celebración de elecciones generales” y que “continuará en funciones hasta la toma de posesión del nuevo Gobierno”. En este sentido, el Boletín Oficial del Estado publicó ayer el cese del presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, y el de todos sus ministros, que continuarán en funciones hasta la toma de posesión del nuevo Ejecutivo de Mariano Rajoy. Con estas premisas legales “Conde-Pumpido no puede ejercer de fiscal general del Estado en funciones porque el Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal no prevé dicha situación”. Lo que sí establece el artículo 17 es que el sustituto natural con carácter general es el teniente fiscal del Tribunal Supremo, que corresponde a Juan José Martín-Casallo”, destacan. Por tanto, “la situación de interinidad que está dando Conde-Pumpido no es buena para la carrera fiscal porque da a entender que no se quiere marchar”. Es más, “en este caso para cesar como fiscal general no hace falta que se dicte y se publique un decreto porque la situación está prevista legalmente. Es idéntica a cuando se llega a la edad de jubilación”, señalan. |