La Carolina - Jaen

"Presunta trama organizada"


Una auditoria externa muestra un desfase de 600.000 euros en la venta de alcohol durante el festival de Villarobledo celebrado en 2008.

La primer teniente de alcalde de Villarrobledo, Amalia Gutiérrez, ha presentado este lunes en los Juzgados de esta localidad albacetense una querella por la "presunta trama organizada" en la gestión del festival Viña Rock de 2008 y el supuesto desvío de fondos, que podría superar los 600.000 euros.

La querella va dirigida contra el entonces concejal de Cultura del PSOE, Antonio Arribas, la interventora y secretaria del Organismo Autónomo Miguel de Cervantes, Pilar Solana, y la empresa que gestionaba al cincuenta por ciento el festival entre los años 2008 y 2011.

El pasado verano, el PP de Villarrobledo denunció este supuesto desvío y explicó que una auditoría externa del festival de 2008 indicaba que las ventas de bebidas alcohólicas generaron 1.150.000 euros, en lugar de los 593.000 declarados, por lo que había un desfase de 600.000 euros.

En aquel momento, el alcalde de Villarrobledo era el actual senador socialista Pedro Antonio Ruiz Santos, que también presidía la Diputación Provincial de Albacete.

Gutiérrez ha detallado que la querella se dirige "contra las personas sobre las que tiene indicios sólidos y contundentes de presunta participación en esta trama organizada".

También ha explicado que los presuntos delitos cometidos son de "prevaricación administrativa, malversación de caudales públicos, fraude a la Administración y delito contra la Hacienda Pública".

Ha lamentado que la gestión municipal del Viña Rock haya estado "bajo sospecha" en los últimos años de mandato del senador y ex alcalde Ruiz Santos y ha recordado que esta querella es fruto del "compromiso" del actual alcalde, Valentín Bueno (PP), con los vecinos para "esclarecer este asunto".

Entre las irregularidades detectadas en la auditoría externa de las cuentas de la edición de 2008, está el diseño y ejecución de un plan para adjudicar el contrato de gestión a la empresa que participó al cincuenta por ciento con el Ayuntamiento en la gestión del festival, lo que vulneró las normas de contratación pública.

Gutiérrez ha dicho que la "presunta desviación de fondos" corresponde exclusivamente al año 2008 y ha indicado que este momento se están investigando las cuentas del festival entre 2009 y 2011, "que arrojaron unas pérdidas de cerca de dos millones de euros para las arcas municipales".

Según la primer teniente de alcalde, se trata de "un escándalo mayúsculo" y ha indicado que "el tiempo y la investigación dirán que es lo que verdaderamente ha pasado", al tiempo que ha subrayado que la obligación y la responsabilidad de los concejales del Partido Popular "ha sido en todo momento acudir a los tribunales".