Rubalcaba pende de un hilo. Mientras Guerra, Belloch y la mayoría de barones quieren jubilar al líder El PSOE se cuartea: se alía con los proetarras, a punto de escindirse del PSC y Susana Díaz pasa de Rubalcaba Alfredo Pérez Rubalcaba tiene el partido dividido y los ojos puestos sobre él. Socialistas vascos y navarros se están negando a condenar a terroristas en libertad por la derogación de la doctrina Parot, lo que le ha costado la reprimenda del ministro del Interior; la relación con el PSC pende de un hilo, con presión de la 'vieja guardia' para que haya ruptura, y Susana Díaz pone en cuestión permanentemente a su líder. La portavoz del grupo socialista en el Congreso, Soraya Rodríguez, ha recalcado que el PSOE siempre ha estado promoviendo las iniciativas destinada a impedir homenajes de los ayuntamientos a etarras y que su posición ha sido firme y contundente. Soraya Rodríguez ha respondido así a los periodistas en el Congreso al ser preguntada por el motivo por el que los ediles del PSN y Bildu abandonaron el pleno del Ayuntamiento navarro de Tafalla, cuando iba a votarse una moción de condena a la etarra Inés del Río. Este jueves, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, pidió al PSOE que se distancie claramente de la izquierda abertzale y no se sume a esas políticas, petición de la que ha salido al paso la portavoz socialista al afirmar que siempre han estado en contra de homenajes o de declarar hijo predilecto de un ayuntamiento a personas con vínculos con la violencia etarra. Esta polémica se suma a la catalana: ¿Consulta o no consulta? Una llamada de Susana Díaz fue clave para que el PSOE votara en contra en el Congreso, donde el PSC no hizo lo mismo. Alfonso Guerra y otros dirigentes de la 'vieja guardia' apuestan por una ruptura con la filial catalana, que no piensa dar marcha atrás, y los barones aprovechan la coyuntura para desgastar a Rubalcaba por este flanco. Y no barones: Carme Chacón ha vuelto y el debate de las primarias vuelve a tomar temperatura. |