Ojo a las carnes rojas ¿Por qué el consumo de carne roja está asociado a enfermedades cardiovasculares? La grasa y el colesterol podrían no ser los únicos enemigos. La carnitina, una substancia contenida en las carnes rojas, podría ser la causante de estimular la producción de un compuesto bioquímico que se cree que facilita el acceso del colesterol a las paredes de los vasos sanguíneos y dificulta al organismo la expulsión de colesterol sobrante. La grasa y el colesterol podrían no ser los únicos enemigos Investigadores de la Cleveland Clinic (EE.UU) han desarrollado una nueva teoría según la cual el elemento realmente perjudicial de la carne roja no sería la gruesa capa de grasa que rodea un bistec o un entrecot; de hecho, las grasas saturadas o el colesterol podrían incluso jugar un papel muy secundario. El verdadero culpable podría ser un elemento químico poco conocido que es expelido por las bacterias intestinales una vez digerida la carne roja. Este compuesto es transformado por el hígado en un segundo compuesto tampoco demasiado conocido denominado N-óxido de trimetilamina (Trimethylamine N-oxide, TMAO), el cual pasa al torrente sanguíneo y aumenta el riesgo de cardiopatías y arteriosclerosis. |