Villanueva de los Castillejos - Huelva

Mensaje en una botella

Acabo de cumplir 65 años y llevo el finiquito de la empresa en el bolsillo para corroborarlo. Me he sentado a la orilla del mar, oteando el horizonte, esperando, … no sé realmente que espero. Analizo mi vida y sus razones y se las escribo a un desconocido que ni siquiera sé si llegará a leerlas, por el simple hecho de que no tengo a nadie a quien contárselo.

Toda mi existencia adulta, desde que cumplí 20 años, terminé la carrera y entré a formar parte del conglomerado que conforman los individuos de una multinacional, ha girado en torno al trabajo: en casa, en la oficina, los 7 días de la semana y los 365 días del año. He tenido vacaciones como todo el mundo pero siempre he sabido buscar la excusa perfecta para volver antes a la oficina o para llevarme la oficina a casa.
No conozco a mis vecinos, apenas he hablado con mis compañeros de asuntos que no fuesen estrictamente laborales, a pesar de haber vivido prácticamente con ellos y, por supuesto no tengo amigos ni familia, a los que di de lado hace muchísimo tiempo y de los que desconozco su situación, han recibido tanto silencio de mi parte a sus llamadas y cartas, que ya no se molestan en invitarme a ningún evento o reunión.

Y en este momento no se qué hacer con mi vida, me doy cuenta que no tengo ni idea de cómo se cocina, se ríe, de qué manera se ve una película o como sacar partido a un libro que no sea una memoria de una empresa…. ¿Es tarde para aprender hacer encajes o bordar?, siempre me gustó pero nunca encontré el momento ¿ Podré ahora conocer a los vecino o viajar sola, sin que sea por negocios? He viajado muchísimo, pero solo conozco de los países donde he estado las sucursales de mi empresa, poco dadas al arte . …¿Encontraré amigos? ¿ Es tarde para empezar a vivir…?

Estoy acostumbrada a mirar la bolsa, donde las acciones suben y bajan y fui viviendo en función de esos mercados…todo mi futuro lo hipotequé en ellos. He aprendido algo tarde, que el verdadero caudal de nuestra existencia es el tiempo. Ningún factor, económico, político o existencial me hará recuperar los años, los días, los segundos perdidos…. No hay marcha atrás..

Ahora es cuando empezaré a correr tras los sueños, que la mayoría de la gente han cumplido y yo aún ni siquiera se cuales son.
Meteré este mensaje en una botella y lo lanzaré al mar.... quizás me llegue una respuesta, pero esa,... será otra historia.

Un saludo desde mi rincón con los cielos azules y también oteando el horizonte, buscando también respuestas a porque este año las nubes no quieren visitarnos...

GRacias al cielo no soy ni fuí nunca el personaje de tu cuento. Jamas me sucedió eso y jamas lo quise. El trabajo no fué mi objetivo ni mi conquista ascensional entre los demas ni en mi casa con mi mujer y mis hijos. Fui y soy todo lo contrario. Me encantan los JARAMAGOS, sencillos, naturales y bellos que abundan por millones en los campos. No se nada de la BOLSA y un buen vino y los labios de mi mujer son los manjares mas exquisitos. Mis 35 años laborables me permiten seguir viviendo, ya jubilado, con mi misma inquietudes de niño, lo importante son las personas que te rodean, te aman y ensanchan tu horizonte emocional positivo.

Este cuento que nos manda cuentaselo a tu hijo para decirle:

- Hijo mio, esto nunca lo hagas pues seras un infeliz siempre por mucho dinero que ganes.

¡Ya estamos en Pascuas!

"Conozco un planeta en el que vive un señor muy colorado. Nunca ha contemplado una estrella. Nunca ha amado a nadie. nunca ha hecho otra cosas que sumas. Se pasa el día diciendo como tu: "!Soy un hombre serio! !Soy un hombre serio!" , lo que le hace hincharse de orgullo. Pero no es un hombre, !es un hongo!
El Principito
Como siempre muy bonito, Marilo

Un saludo

Mariló, siempre queda la ilusión de vivir y conocer cosas pequeñas que las alimenta.

"Tenue rumor de túnicas que pasan
sobre la infértil tierra,
y lágrimas sonoras
de las campanas viejas

Las ascuas mortecinas
del horizonte humean,
blancos fantasmas lares
van encendiendo estrellas

Abre el balcón,la hora
de la ilusión se acerca...

La tarde se ha dormido,
y las campanas sueñan...

Mis cuentos no son autobiográficos...
me he dedicado parte de mi vida a averiguar como vive el resto, porque siempre me interesaron las personas. Y aunque casi siempre escribo en primera persona, son las vidas de otras gentes la que suelo retratar...
Yo suelo disfrutar de las cosas pequeñas que es donde me siento más cómoda. Algún día puede que me toque escribir mi vida, pero eso... será otra historia..

Un saludo desde mi rincón y he echado un vistazo el meteosat. Dice que lloverá el viernes, por lo menos en Ayamonte, Cartaya y San Bartolome. Espero que la tormenta no le de por rodearnos y dejarnos fuera.