Villanueva de los Castillejos - Huelva

Si el desarrollo cultural, técnico y científico no tiene precedentes en la historia de la humanidad y si el planeta dispone -todavía- de recursos suficientes para los habitantes actuales, ¿por qué diablos existe la crisis y por qué el mundo entero está amedrentado ante ella?



Sí, la crisis existe porque unos cuantos tragaldabas sin escrúpulos ni ética se comieron la ración de la mayoría

Si aceptamos el planteamiento anterior, la respuesta es obvia. La crisis existe porque no se distribuye la riqueza con justicia. La crisis existe por un desequilibrio brutal entre la capacidad de producción y enriquecimiento progresivo de la clase pudiente y el empobrecimiento paulatino por pérdida de poder adquisitivo de la clase trabajadora, que se traduce en una fuerte disminución de la capacidad de consumo de ésta última, y en una creciente y peligrosa desigualdad social.

Sí, la crisis existe porque unos cuantos tragaldabas sin escrúpulos ni ética se comieron la ración de la mayoría. Y, ahora, ahí están, sesteando en un rincón -fiscal, se entiende-, haciendo la digestión del empacho de ganancias de las dos últimas décadas. Mientras, cerca de 3,5 millones de parados viven asustados sin saber si mañana tendrán un mendrugo de pan que llevarse a la boca.

Es cierto que la mayoría nos hemos comportado honradamente y, por tanto, no somos culpables de haber provocado esta absurda crisis. Sin embargo, tanto gobiernos como ciudadanos sí somos culpables de no haber hecho nada para evitarla. Porque, como dijo Einstein: "La vida es muy peligrosa. No por las personas que hacen el mal, sino por las que se sientan a ver lo que pasa".

Estas cosas se pueden decir más alto, pero no más claro.

"Idem de idem" en la suscripción al 100% de esta reflexión.

Un saludo.