Villanueva de los Castillejos - Huelva

Con Los Tosantos parecen que llega el invierno. Este año parece que sera soleado y frio. La visita al cementerio, en mi caso es obligada porque soy de aquellos que piensas que mis familiares muertos viven mientras yo los recuerde y voy con A. Feria todos los años a nuestro cementerio de San Bartolomé, que asi se llama nuestro cementerio en Villanueva. Mis padres estan junto al panteon de los Ferias, asi es que tambien estare cerca de mis padres por toda la eternidad. No todos mis hermanos tienen mi misma idea, asi que junto con una sola de mis hermanas vamos a dejarle las flores de nuestro recuerdo permanente.
Es una fiesta triste y nostalgica pero nuestro cementerio es una preciosidad y esta muy bien cuidado y el dia de TOSANTO luce con un colorido diverso y olor de mil flores.
Ves en el camposanto a muchas personas que hace mucho tiempo no veias y el saludo por ambas partes es agradecido y recordatorio de momentos felices y mas proximos a la juventud.
Me gusta Los TOSANTOS por su caracter de pueblo que no pierde sus tradiciones y por su reflexion de lo bello que es vivir.
Dejo una flor en la tumba de mis padres y otra en los fusilados de la guerra y vuelvo a casa reconfortado.

yo tambien tengo enterrado a mis abuelos en ese cementerio y las cenizas de mi madre con ellos, pero aunque no pueda ir porque estoy muy lejos para mi y mi familia ella siempre esta con nosotros, en mi casa siempre hay una flor fresca,que es dedicada a ella
tienes razon es un dia de nostalgia y recuerdos pero hay gente que no nos gusta ir al cementerio y por eso incineramos a las persona que queremos,tambien hay que reconocer que hay gente que solo se acuerda de ir al cementerio ese dia y el resto del año nada, yo soy de las que mas vale una flor a diario que no un ramo de rosas una vez al año
un saludo

Como hasta morirse cuesta mucho dinero, hace ya muchos años que toda mi familia nos hicimos un seguro para los gastos del ultimo dia, todo y y todos por incinerizacion. Una vez realizado iremos, bien al panteon del cementerio, al corral de su casa como dice mi mujer y yo a un arroyo que corra a buena velocidad por el tiempo de otoño-invierno. Mientras tanto vamos por el cementerio que en estos dias de sol y frio cran una atmofera de los antiguos romanticos, tipo Becquer. Luego, para burlarnos de la muerte nos iremos de cuchipanda y bebida larga y que nos deje en paz al menos por un milenio, si puede ser.