Género burlesco castillejero Se dice de la forma literaria que busca desvirtuar los valores de las obras literarias en las que se basa por medio de la exageración ridícula de sus temas, personajes o argumentos. Como sucede con la sátira, aparece bajo dos formas: la épica burlesca, en la que un tema trivial se trata con grandiosidad, como en algunas partes de Los Cuentos de Canterbury, de Geoffrey Chaucer, y la mofa, en la que un tema serio se trata de modo frívolo, como en Don Quijote, de Miguel de Cervantes. El género burlesco es confundido a menudo con otras dos formas de sátira: la farsa y la parodia. La parodia es una imitación burlesca de una obra o del estilo de un autor en particular; la farsa es una pieza dramática escrita con el objeto de hacer reír. En Castillejos se han acuñado estos términos aplicándolos a coplillas que se suelen cantar en momentos de alegría para provocar la risa. Ejemplos de dichas tonadillas: (1)Para pasar por la plaza, en automóvil montao, mete una marcha corta, y lleva el freno pisao. Porque hay unos gachones, que están allí escarranchaos, y es que los trincan los coches: ¡Co_o!, no se echan pal lao. (2)Manuel el latero es el dueño, de una finquilla en la sierra, y según su testimonio, hay más rabuos que piedras. Manuel se vuelve a espantar, y los rabuos como sordos, anda y vete al Fabián, si quieres ver rabuos gordos. (3)El molino Zahurdon donde tanto yo he cag.. mojones y churretones mi culo allí han dejao. (4)Al entrar a Castilhelhu o primeiro que se ve, a la Martina ferru velhu alavandose os pes. Y el estribilhu, uma tabla com pelos es um cepilhu. Y así se podría seguir durante horas, pero no estaría de más que cada cual aportase más coplillas de éste género tan castizo, y tan nuestro. |