Sotiel Coronada - Huelva

Esta noche ha caído una gran “pelona”, hace un frió de espanto, las hierbas están blancas,los tejados se han tornado también en esta madrugada de color blanco. Desde las canales caen gotas de agua del deshielo que comienza a deshacerse como va caminando la mañana.
Desde el arroyo remonta un manto de vaho que lentamente se va elevando y formando una capa blanca e impidiendo el paso del sol que aun hace a la mañana mas retraída y fría, en las esquinas de sombras que son poco visitadas de sol, aun por las tardes aun perdura “el carámbano” de días anteriores como es “la fragua vieja”.
Va en dirección al colegio, lleva una de las manita metida en el pequeño y del poco profundo bolsillo del endeble y fofo pantaloncito, la otra mano, la lleva helada y sostiene a duras penas la muletilla de plástico algo envejecida y deteriorada por el tiempo, ya que en su día esta, fue uno de los pocos regalos de reyes del año anterior.
Las orejitas, como la nariz, la lleva anestesiadas por el intenso frío, viste el llamado partámonos (pantalón con petos y tirantes) este ya finísimo por los frecuentes lavados, por el abusivo uso de el, su madre le dice que para lo que queda ya de invierno ay que aprovecharlos.
Pero era feliz, en sus tardes de Sotiel, se había sentido Rey, piloto, capitán, marinero, torero, jinete, guerrero y torero, con una caña por caballo y una vara por espada ganaba cientos de batallas, sin herir ni matar y navegaba por un mar de montañas,......


---unsotieleño---