La Palma del Condado - Huelva

Las cloacas de Suiza/Liechtenstein
| 25/noviembre/2012

Jamás en la historia de este país un ministro de Hacienda en ejercicio se había conducido de esa guisa. “Supe en mis años anteriores como ministro de Hacienda quién pagaba impuestos y sé ahora quién no los paga…”, subrayó hace unos días Cristóbal Montoro a propósito de la polémica en torno a los paraísos fiscales y los dirigentes de CIU.

Dijo también el ministro que esos, los defraudadores, deberían comparecer ante la sociedad y estoy de acuerdo. Pero es a él quien corresponde ponernos a esos defraudadores a tiro de los ciudadanos. Para eso le pagamos. Porque la Agencia Tributaria se muestra siempre implacable con los asalariados y rentas bajas y muy sumisa ante los poderosos.

TUFO.
Yo no sé si el diario El Mundo, ahora que dicen que su director se encuentra en horas bajas, dice la verdad en relación con Mas y Pujol. Pero si no lo dice, Pedro J. se debe ir a cocer patatas a Logroño; si lo dice, son los dirigentes máximos de Convergencia los que tienen que ir directamente a la decrépita cárcel Modelo de Barcelona.
Pero todo esto desprende un tufo irrespirable; de unos y de otros. Dice Duran i Lleida -¡jamás he visto un personaje tan camaleónico que se sube al carro de la secesión y mantiene su pasaporte diplomático con el membrete de Reino de España!- que las cloacas del Estado se han puesto en movimiento para impedir que el “poble catalá” se pronuncie libremente. No lo creo, sinceramente. Lo que sí creo es que hay cloacas y no muy lejos de él.

FRAUDE.
Yo le voy a tomar la palabra a Montoro. Quiero que me diga quién o quiénes tienen que comparecer ante la Justicia, y el pueblo. Para eso le pago. Después de tantos años ya de democracia va siendo hora de agarrar por los cuernos aquellos que se llevan el dinero a otras latitudes mientras los que pagamos el IRPF estamos acogotados por los impuestos.

El mismo dice que le produce sonrojo este hecho. Dé nombres, señor ministro, dé apellidos, direcciones para que la sociedad lapide a esos sinvergüenzas que seguramente luego irán pregonando lecciones éticas y comportamientos cívicos.

Tengo para mí –es una lástima que no pueda tabular esos nombres en este diario-que hay nombres y sagas que bien se merecen un repaso por el oprobio y la indignidad, aunque vayan con escolta y subidos en coches de alta gama.

Nombres de la amnistía
Por ejemplo, el ministro debería decirnos quién y quiénes se han acogido a su famosa amnistía fiscal. En primer lugar, para felicitarles por haber conseguido defraudar a la Hacienda y pagar tan sólo el 10 por ciento mientras el común de los mortales hemos tributado hasta un 50%.

Y en segundo lugar, para encender una pira democrática y ponerles al rescoldo. De paso también exigir a los responsables públicos y políticos su cuota de culpa en que estos caraduras corruptos se hayan burlado de todos nosotros.

Por lo menos conocer sus nombres….!

¡Ya va siendo hora!

Graciano Palomo es periodista y escrito