Alosno - Huelva

Como le habia prometido a Nalita este sencillo y encantador poema de Juan Ramon Jimenez mientras nuestro POETA sigue matillenado su cerebro con nuevas bellezas.

LXXVIII

¡Calla!. Gusta del cenit,
escucha el sol.

¡No me hables! Enlaza,
en la flor permanente
de un infinito amor,
tus manos y mis manos,
tu silencio y el mio.

¡Calla! Aspira el azul,
escucha el oro.

De nuestro Onubense genial.

¡Calla! Gusta del sol
tu mi amor,
amor infinito, que en el lago nació,
estremece el besar,
aquí junto a la mar,
enlazando las olas
junto a tu lado estar,
en lo pinos de mi sierra,
de mi sierra a la mar,
de la mar hasta los ríos
que la vienen a regar,
como tu riegas este amor mío,
para no dejarle marchitar,
lo riegas con tus besos,
lo riegas con tu cantar,
tardes otoñales andévaleñas,
entre la sierra y la mar,
entre tu labios y los míos,
solo cabe el respirar,
nuestras brazos no envuelven,
que el amor no pueda escapar,
solo escapo yo hacía mi sierra
una vez mas, soy Halcón Peregrino,
¡Que también sabe amar!
¡Calla! Aspira el olor a pino,
no lo dejes escapar,
al oro no lo puedes escuchar,
no hay mejor tesoro,
que el amor del lago,
que no dejaremos escapar.

El Poeta.

Aquel candil de chapa reluciente
que alumbraba lo oscuro de mi estancia,
alargando entre sombras la distancia,
le tengo en mi cerebro bien presente.
Con el paso del tiempo es evidente
que la luz que emitía se hizo rancia
y el aceite quemado en abundancia
cayó ante la bombilla incandescente.
Ahora que este mundo indiferente
olvida que antaño hiciste falta:
yo te sigo teniendo aquí en mi mente.
Y lo hago con frente limpia y alta,
con orgullo, mirándote de frente,
y la emoción contenida en mi garganta.

El Poeta.

un saludo poeta que hace ya unos dias que no entro por aqui tambien en rada se te hecha de menos haber si haces una visita a los amigos-castilleja-