Lago del Jaral - Guadalajara

hola queridos vecinos, cuantos dias sin hablar con vosotros.

Ayer me di otro paseo, si, por la urba, claro, que con un frio de tres pares, y pude comprobar como por la tarde estaba todo desierto, coña, puedes llegar a sentirte el dueño se una gran finca, mira, aqui mis pistas de padel, mira, aqui mi pabellon de caza, mira, aqui mi laguna, mis calles, mis campos, mis arboles, mi piscina.

Por cierto, la piscina, ya estamos a mediados de abril, casi, y esta vacia, me imagino que es por empezar a arreglarla ya, pero estuve midiendola más o menos y son

50x25=1.250 m2 que a una media de 1,60 de altura hace alrrededor de 2.000 m3

eso son 2.000.000 de litros de agua que año tras año echamos, vaciamos, echamos, vaciamos. No os parece una verguenza por nuestra parte, Aprovechando este arreglillo que vamos a hacer ahora, el que se nos conto en la Asamblea, ¿no sería posible, bajar la altura media de la piscina?
¿eso no evitaría que al echar menos agua, las bombas no trabajen el doble sno justo la mitad? ¿podria esto ahorrarnos una averia de la bomba? ¿no se limpiaria menos la piscina? ¿facilitaría el mantenimiento del aguan durante todo el año? etc, etc, por no hablar de la cantidad de agua que ahorrariamos no solo por su coste, que es cero, pero ¿pensamos en los demás?

Se que lo que estoy diciendo es caro, aprox. 70.000 €, pero poco a poco se anda el camino.

Como nos poetizaba Francisco Suarez sobre el agua

En aquel largo otoño
que viví coincidiendo
con varias primaveras.

En aquel largo otoño
envejecí cien años.

Hasta darle sentido
al pensamiento oculto,
a la voz, a la niebla.

Y hoy surgen las palabras
gota a gota, una a una,
destilándose simples.

Sencillamente agua.

Sencillamente agua
se me antojan los pinos,
la urbana fresca sombra
de laureles de Indias,
la cumbre, los senderos
hollados por mil pasos,
el rojizo color de la tierra
en que crece la verde laurisilva.

Sencillamente agua
se me antoja la niebla,
la bruma de la cumbre,
los charcos del camino,
la pequeña cascada pasajera
del barranco que corre.

Sencillamente agua
se me antojan las rocas
de la playa, la arena,
la perpetua embestida
persistente, tozuda,
caprina, multicornia,
de la mar en la costa.

Sencillamente agua
se me antoja la mar
surcada por mil quillas,
herida sin descanso,
cicatriz permanente.

Sencillamente agua
se me antoja la brisa,
el viento enfurecido,
el alisio, la calma,
el calor del verano,
la tormenta, la lluvia,
la calina y el humo.

Sencillamente agua
se me antoja la vida,
la infancia, los juguetes,
el trabajo, la historia,
los profundos estudios,
la más pura poesía,
la lenta decadencia,
el nacer, la agonía.

Sencillamente agua
se me antoja tu sombra
tras haberte buscado
en campos, en silencios,
en la orilla del mar,
en la cumbre más alta,
en las calles estrechas,
en amplias avenidas.

Sencillamente agua
que mis manos no abarcan.

Sencillamente agua.

y siguiendo mi liturgia para mi amigo el recaudador de terrenos que a pesar de la demo, no disingue el esta bien con el esta mal:

En el Reino de Chu vivía un hombre que ignoraba donde crece el jengibre, pero no obstante pensaba que lo sabia.
Una mañana se encontró con un vecino y queriendo ratificar su idea sobre el jengibre, le comentó:
- “El jengibre crece en los árboles” – dijo.
- “Crece en el suelo” – le contesto el vecino.
No se quedó satisfecho con la respuesta que le dio su interlocutor y le propuso:
- “Ven conmigo, interrogaremos a diez personas diferentes – le dijo–. Te apuesto mi asno a que el jengibre crece en los árboles”.
Sucesivamente, las diez personas interrogadas dieron todas la misma contestación:
- “El jengibre crece en el suelo”.
El apostador se turbó, pero ante la unanimidad de la respuesta de los interrogados le dijo al vecino:
- “Tome, llévese mi asno, ¡Eso no impide que el jengibre crezca en los árboles!”

Cuantas veces nos obcecamos en “nuestra verdad”, y no somos capaces de reflexionar y rectificar aunque sea evidente que no tenemos la razón. Es importante saber ceder y considerar que podemos estar equivocados en nuestros puntos de vista.


avaricia.(Del lat. avaritĭa). Afán desordenado de poseer y adquirir riquezas para atesorarlas.


Besos a ellas y abrazos a ellos

Ante todo aplaudirte por tus versos y fabulas, por tu abundante litúrgia, la cual agrada pues dices sin decir y sin faltar ni herir, que eso en este foro es mucho.

Y razón tienes con el tema de la piscina, pero paso a paso se anda el camino y el primer paso es el que se va a realizar, el que se aprovó en la asamblea, reparar el fondo y paredes del vaso y adecuar la instalación a la normativa para poderla abrir este año y que funcione todo bien. Al próximo año se podrá hacer el rebaje de profundidad y con un pco de suerte revestir fondo y paredes para no tener que estar con el gresite todos los años y así conseguir que en pocos años poder reciclar el agua sin tener que vaciar y llenar.