DESESPERACIÓN Quiso el azar que yo viviera en un bosque antes de ir a Luzón y a Ciruelos ,y un día , hace muchos años en que el dolor me asolaba recurrí a mis montes y ahí estaban , intactos para consolar mi dolor y cuando mis montes se quemaron fueron ellos con mi propia voz quienes cantaron mis trágicas palabras. La creación nunca se sabe donde empieza y donde acaba. Puede servir para uno y para el resto y es un consuelo que después que tengamos un sufrimiento , también tengamos palabras de consuelo para calmar nuestro dolor. DESESPERACIÓN Subiré a los montes Donde no haya nadie Y junto a una roca Romperé a llorar, Vaciaré mis lágrimas, Solo entonces volveré a rezar. Enterraré tu recuerdo Y ya volveré cansada Buscando refugio En mi bella casa abandonada. Recordaré mi infancia De frías noches Iluminadas por un débil candil Donde sombras deformadas Me asustaban sin querer. Volveré a mi vacía casa, Quizás un atardecer Y escucharé el silencio De mi profundo ser. Y volveré a ser árbol Y volveré a ser pez. Y volveré a los campos de mi niñez. |